Unlikely partners. Xi Jinping and Vladimir Putin behave like the best of buddies. But suspicion between Russia and China runs deep

Cita: 

The Economist [2017], "Unlikely partners. Xi Jinping and Vladimir Putin behave like the best of buddies. But suspicion between Russia and China runs deep", The Economist, London, 29 de julio, http://www.economist.com/news/china/21725611-suspicion-between-russia-an...

Fuente: 
The Economist
Fecha de publicación: 
Sábado, Julio 29, 2017
Tema: 
China y Rusia, entre la amistad y la rivalidad
Idea principal: 

Las últimas semanas en la escena internacional han estado cargadas de gran simbolismo político. El 21 de julio de 2017 tres buques de guerra chinos navegaron en el mar Báltico acompañados de flota rusa. Para la revista el mensaje fue claro: ambas naciones están unidas en oposición a la dominación occidental y no tienen miedo de mostrar su músculo en el patio trasero de la OTAN. Otro evento simbólico fue la visita del presidente chino, Xi Jinping a Vladimir Putin en Moscú, días antes del encuentro del G20 en Alemania, para ser recibido y condecorado con el más alto reconocimiento ruso. Estos han sido algunos acontecimientos actuales pero que son continuaciones de un comportamiento entre ambas naciones desde años atrás (Dato Crucial 1).

Compañeros déspotas

El artículo señala que ambos presidentes están cómodos con la inclinación autoritaria del otro. Ambos comparten sus experiencias y tácticas; China imitó las severas leyes de Rusia sobre las ONGs y Rusia está intentando aprender cómo censurar el Internet al modo chino. En China se ha permitido la entrada de Channel One (el canal televisivo principal de Rusia) para lanzar un servicio de cable llamado Katyusha (nombre de un cohete ruso). La ruptura entre Rusia y Occidente como resultado del conflicto por Ucrania, ha llegado hasta China.

A pesar de la estrecha relación de compañerismo entre ambas naciones se oculta una relación de rivalidad y enemistad. Rusia necesita más de China que ésta de Rusia. El artículo señala que Rusia se incomoda por la mayor popularidad, fuerza económica y creciente poder militar que está ganando China. Por su parte China se preocupa por la obstinación de Rusia de permanecer en el viejo orden de la guerra fía y de no querer trasladarse a la globalización. Por otra parte difícilmente China querrá renunciar a la globalización que le ha permitido los grandes beneficios presentes.

Respecto el tema incómodo de la intervención rusa en Ucrania, los líderes de Beijing se han hecho de la vista gorda, aunque formalmente tampoco han reconocido la anexión de Crimea a Rusia. Después de la votación de Crimea en un falso referéndum para incorporarse a Rusia, China ordenó dejar de transmitir el evento. Lo que es un indicativo de que China no quiere tener problemas respecto la determinación autónoma por la propia población en alguna de sus regiones (Taiwan, Tibet o Xinjiang).

La economía china está fuertemente relacionada con la economía estadounidense (The silk-silver axis. Averting a Chinese-American trade war. The world’s most important bilateral economic relationship is flourishing—and in deep trouble), en comparación el comercio ruso con Estados Unidos es insignificante (Dato Crucial 2). En el comercio entre ellos, China está interesado en el petróleo y gas rusos (Dato Crucial 3 y 4). Otro negocio importante entre ambas son las armas (Dato Crucial 5), las cuales, según la revista, tienen objetivos más lucrativos que estratégicos para Rusia, pues también le suministra armas a enemigos de China (India y Vietnam).

Fascinación por la seda

China se ha convertido en la principal fuente de fondos de capital para Rusia, quien tiene negado el acceso al mercado internacional de capitales como resultado de las sanciones occidentales. De acuerdo con la revista, los principales beneficiarios son los amigos cercanos a Putin, como Gennady Timchenko copropietario de Sibur, una empresa petroquímica, que ha vendido importantes acciones a China (Dato Crucial 6).

De acuerdo con los políticos y expertos chinos, una buena relación con Rusia tiene más importancia en cuestión de seguridad nacional que beneficios económicos. Es difícil que China aumente su interés por Rusia; se requiere una fuerte reestructuración de las políticas económicas rusas que otorguen certeza de un sistema legal robusto y con derechos claros a la propiedad privada. Para la revista, China interpreta a Rusia como un poder débil y declinante, pero en lugar de ignorarlo (como hace Estados Unidos) prefiere estar cerca de él para evitar que se vuelva un problema o amenaza para su país.

Para The Economist ambas naciones también temen la una a la otra y se mantienen en alerta constante ante cualquier conflicto armado. Ambas naciones disputan la influencia de Asia Central, donde China se ha convertido en el principal socio comercial de las últimas repúblicas soviéticas. Rusia mantiene una mayor presencia militar y política, y por su parte, China tiene una supremacía económica en la región.

El artículo señala que las rivalidades y resentimientos entre ambas naciones se pueden observar incluso en el turismo compartido entre las naciones. Donde alguna vez fueron los rusos quienes imponían con su fuerte poder adquisitivo y ahora son los chinos quienes gastan sus ingresos crecientes en Rusia frente a un rublo devaluado. Los buques chinos en el mar Báltico generan la misma sensación en los rusos.

Datos cruciales: 

1. Desde 2012 con el ascenso de Xi Jinping a la presidencia china, Moscú se convirtió en la ciudad capital más visitada por el presidente chino. En 2013 durante una reunión en Indonesia con los líderes de la región Asía-Pacífico, Xi Jinping atendió en una fiesta privada el cumpleaños de Putin. En 2015 el Sr. Xi fue el invitado de honor de un desfile militar en Moscú del 70 aniversario del final de la guerra; cuatro meses después el Sr. Putin atendió un desfile celebrado en Beijing por la victoria china en la guerra contra Japón.

2. Gráfica 1. Balanza comercial de bienes de Rusia y China respecto Estados Unidos, 2007-2016 (miles de millones de dólares, mmd). En los 9 años de estudio el punto mínimo del valor del comercio de China con Estados Unidos fue en 2009 con un valor poco menos de los 300 mmd, desde 2010 tuvo una pendiente creciente hasta su punto más alto en 2015 con más de 500 mmd. Por su parte el comercio ruso con referencia a Estados Unidos se mantiene en un nivel estable por debajo de los 50 mmd para todo el periodo analizado.

3. El año pasado (2016) Rusia desplazó Angola y a Arabia Saudita de ser la nación suministradora de petróleo crudo más grande del mundo.

4. En 2014 Rusia y China firmaron un contrato con un valor estimado de 400 miles de millones de dólares para bombear gas natural desde proveniente de dos campos en Siberia oriental mediante nuevos oleoductos a China. Los envíos empezarán en diciembre de 2019.

5. Desde el colapso de la Unión Soviética en 1991, Rusia ha vendido a China 32 mil millones de dólares en armas, cerca del 80% de las importaciones de armas en China. Recientemente le ha suministrado sistemas avanzados de misiles tierra-aire S-400 y aviones de combate Sukhoi SU-35.

6. En diciembre de 2015 Sibur vendió 10% de sus acciones a Sinopec, la más grande refinería petrolera paraestatal china, por un valor de 1.3 miles de millones de dólares. El año pasado (2016) vendió otro 10% de sus acciones a Silk Road Fundo, otra paraestatal china en la industria de la construcción.

Nexo con el tema que estudiamos: 

Más allá de las divergencias entre las naciones asiáticas, su rivalidad con Estados Unidos y en general con el bloque de países desarrollados occidentales podría ser un buen motivo para una cooperación entre ambas para su mutua expansión en la región y más allá de ésta ¿El hegemón estadounidense podrá hacerle frente a ambas?

No olvidemos que Estados Unidos mantiene relaciones estrechas con ambas naciones; con China un fuerte comercio (bienes, capital y otros), y recientemente se acusa a Trump de mantener una fuerte relación con Rusia.

Otra ficha que polemiza la alianza entre China y Rusia en el LET:
Blue-water reds. The West need not fear China's war games with Russia. In fact, America's navy should co-operate more with China's, too