A Quarter of Bangladesh Is Flooded. Millions Have Lost Everything

Cita: 

Sengupta, Somini y Julfikar Ali Manik [2020], "A Quarter of Bangladesh Is Flooded. Millions Have Lost Everything", The New York Times, New York, 30 de julio, https://www.nytimes.com/2020/07/30/climate/bangladesh-floods.html

Fuente: 
Otra
Fecha de publicación: 
Jueves, Julio 30, 2020
Tema: 
La última calamidad que atraviesa Bangladesh ilustra la inequidad de nuestro tiempo: La gente menos responsable del cambio climático es la más golpeada por sus consecuencias.
Idea principal: 

Sobre la y el autor
Somini Sengupta es reportera internacional del clima para The New York Times. Su trabajo se centra en contar las historias de las comunidades y paisajes más vulnerables a los efectos del cambio climático. Su primer libro, "The End of Karma: Hope and Fury Among India's Young" fue publicado en 2016.

Julfikar Ali Manik es un periodista independiente radicado en India. Ha escrito para The New York Times, The Times of India, The Economic Times, Sydney Morning Herald, The (Toronto) Star, entre otros medios.


Las lluvias torrenciales que han azotado a Bangladesh, han sumergido al menos una cuarta parte del país, arrasando todo a su paso, incluyendo animales, personas y sus propiedades. Este no es el único desastre que ha azotado al país de 165 millones de habitantes. Hace solo dos meses, un ciclón azotó el suroeste del país. A lo largo de la costa, un mar en aumento se ha tragado pueblos enteros. Y aunque es demasiado pronto para determinar qué papel ha jugado el cambio climático en estas últimas inundaciones, Bangladesh ya está siendo testigo de un patrón de inundaciones fluviales más graves y más frecuentes.

Las personas se están desplazando a medida que las catástrofes se llevan consigo sus hogares y sustentos económicos, “el sufrimiento aumentará” dice Sajedul Hasan, director humanitario de BRAC, una organización de desarrollo internacional con sede en Bangladesh. Los menos responsables del cambio climático se encuentran entre los más afectados por sus consecuencias. El estadounidense promedio es responsable de 33 veces más dióxido de carbono que calienta el planeta que el bangladesí promedio.

Las inundaciones actuales, que son el resultado de intensas lluvias río arriba en el Brahmaputra, podrían durar hasta mediados de agosto.

La situación de este país se multiplica por millones entre los que están en la primera línea del cambio climático. Vanuatu se está hundiendo literalmente en el Pacífico. Los pastores del Cuerno de África están siendo empujados al borde de la supervivencia por sequías consecutivas. En la megaciudad de Mumbai, India, las lluvias llegan con terribles lluvias torrenciales.

La inequidad es sorprendente. Los países más pobres han buscado reparaciones económicas causadas por el cambio climático, sin embargo, los países ricos, encabezados por Estados Unidos y la Unión Europea, se han resistido.

Estos desastres naturales vienen acompañados de una situación mundial más complicada: la pandemia de Coronavirus, la cual ha puesto en debate el papel de las industrias y los países más ricos en los planes de reactivación de la economía mundial y su vinculación con la emisión de gases de efecto invernadero -que contribuyen significativamente al cambio climático-.

Siguiendo con el desastre en Bangladesh, la inundación del Brahmaputra refleja el dolor desigual del clima extremo. Si bien son usuales las lluvias extremas en junio, la pandemia había orillado a miles de trabajadores a cesar actividades por lo que esta vez, antes de que se inundara, la gente ya no tenía con qué subsistir.

El Brahmaputra es un río temible y cambiante de casi 4 000 km que surge del Himalaya tibetano y se derrama en el noreste de la India antes de fusionarse con el Ganges en Bangladesh y desembocar en la Bahía de Bengala. Riega vastas áreas de tierras de cultivo, pero también es impredecible, a menudo se traga las islas que se forman en su interior. El cambio climático está alterando su destino y el de las personas que viven a lo largo de sus orillas. Las lluvias son más impredecibles y el río se eleva por encima de niveles peligrosos con mucha más frecuencia que antes. Solo en los últimos cinco años se han producido cuatro grandes inundaciones que han erosionado la capacidad de adaptación de las personas que viven a sus alrededores.

Aún con una disminución de las temperaturas mundiales, se prevé que las inundaciones a lo largo del Brahmaputra en Bangladesh aumenten 24%. Con un aumento de 4° grados Celsius, se proyecta que las inundaciones aumentarán en más del 60%.

Los defensores de los pobres dicen que la situación de Bangladesh con los desastres ilustra exactamente por qué las negociaciones climáticas, pospuestas hasta 2021, deben ofrecer una compensación para las personas que no han causado el problema.

“La gente está perdiendo lo poco que tiene”, dijo Farah Kabir, directora de país de ActionAid International en Bangladesh. “¿Cuándo y cómo van a recibir apoyo? ¿Cuándo va a asumir la responsabilidad la comunidad mundial?"

Datos cruciales: 

1. Según las cifras más recientes disponibles, casi un millón de hogares se inundaron en Bangladesh, 4.7 millones de personas se vieron afectadas y al menos 54 personas han muerto, la mayoría niños.

2. Un análisis reciente encontró que el 10% más rico del mundo es responsable de hasta 40% de los daños ambientales globales, incluido el cambio climático, mientras que el 10% más pobre genera menos del 5% de los daños.

3. Otro estudio estimó que el calentamiento global había reducido los ingresos en los países más pobres del mundo entre 17% y 30% a causa de los pagos de daños por los desastres naturales.

4. Un estudio encargado por las Naciones Unidas encontró que los 20 países más vulnerables al clima han pagado más de 40 mil millones de dólares en pagos de intereses adicionales debido a pérdidas derivadas de eventos climáticos extremos.

Nexo con el tema que estudiamos: 

Las grandes corporaciones mundiales y los países más ricos son los responsables de la debacle climática mundial. El nulo cese de la emisión de gases de efecto invernadero, ha provocado desastres naturales extremos en los países más vulnerables del mundo, haciendo que las consecuencias del cambio climático sean sufridas en su inmensa mayoría por quienes no están involucrados directamente, mermando significativamente su calidad de vida.