Handbook on Wealth and the Super-Rich

Cita: 

Hay, Iain y Jonathan Beaverstock (edit.) [2016], Handbook on Wealth and the Super-Rich, Cheltenham, Edward Elgar.

Fuente: 
Libro electrónico
Fecha de publicación: 
2016
Tema: 
Estudios multidisciplinarios del capitalismo de súper ricos.
Idea principal: 

1. "Nunca les ha ido tan bien": el aumento de los súper ricos y la desigualdad de riqueza
Iain Hay y Jonathan Beaverstock

Iain Hay es profesor distinguido de geografía humana en la Universidad Flinders, en Australia.

Jonathan V. Beaverstock es profesor de gestión internacional en la Universidad de Bristol, en Reino Unido.


Introducción

El capítulo presenta una serie de trabajos que abordan, desde distintas perspectivas, el “capitalismo de súper ricos” [super-rich capitalism]. De acuerdo con Iain Hay y Jonathan V. Beaverstock, este tema adquirió relevancia en los debates públicos y académicos después de la crisis financiera de 2008, llamando la atención sobre los “niveles tan desiguales de prosperidad y riqueza en la sociedad global” (p. 1). En particular, la academia comenzó a analizar “el consumo excesivo, la economía política y la desigual creación de riqueza” (p. 1). Quizá uno de los exponentes más populares de este enfoque es Thomas Piketty, con su obra El capital en el siglo XXI (2014). Sin embargo, como Hay y Beaverstock reconocen, las contribuciones a este tema abundan desde el último cuarto del siglo XX: desde los trabajos que analizan la distribución desigual del ingreso hasta la historia de los súper ricos y la identificación del denominado “1 por ciento”. Este fenómeno también recibió la atención de los movimientos sociales, como el movimiento Occupy, que no sólo evidenció los enormes bonos que recibían los banqueros en medio de la crisis financiera, sino que denunció la desigualdad del ingreso a nivel global con la consigna “99% vs 1%”.

Riqueza y súper ricos

La identificación de los súper ricos es uno de los tópicos más recurrentes del tema. Los autores reconocen que el análisis más sistemático de los ricos y su riqueza es el realizado por la revista Forbes, que en 1982 comenzó a publicar un listado de las 400 personas más ricas en Estados Unidos. A este esfuerzo le siguió una publicación similar en Reino Unido, Sunday times Rich List, que comenzó a circular en 1989, después de que Margaret Thatcher redujera las tasas impositivas al ingreso personal. Estas listas fueron complementadas con publicaciones para cada país: Brasil, China, Canadá, Australia, Sudáfrica, entre otros. Como señalan Hay y Beaverstock, este cúmulo de información proporciona detalles sobre el crecimiento de este segmento de la población a nivel mundial.

Desde la década de los años noventa del siglo XX, se han realizado múltiples esfuerzos para analizar la composición de los súper ricos. Por ejemplo, Stephen Haseler identificó una “pirámide de súper ricos”: en la punta ubicó a los “mega ricos multimillonarios” que poseían más de mil millones de dólares, en el medio estaban los multimillonarios cuya riqueza era en promedio de 10 millones de dólares (mdd), y la base la ocupaban los millonarios. Del mismo modo, los bancos y las instituciones financieras han propuesto diversas clasificaciones basadas en la riqueza personal. En 1996, Capgemini y Merrill Lynch denominaron individuos de alto valor neto (HNWI, por sus siglas en inglés) a los súper ricos, dividiéndolos en 3 segmentos: 1 a 5 mdd, 5 a 30 mdd, y más de 30 mdd. Por su parte, Boston Consulting Group separa a los ricos en individuos de ultra alto valor neto (más de 100 mdd), ricos establecidos (más de 5 mdd), ricos emergentes (1 a 5 mdd) y ricos (100 mil dólares a 1 mdd). Estas clasificaciones tienen en común que toman en cuenta los activos líquidos, excluyendo propiedades residenciales y bienes durables.

Los autores reconocen que establecer un monto o un rango puede ser complicado pues “la riqueza toma diferentes significados dependiendo del contexto” (p. 4). No obstante, señalan que por practicidad retoman las definiciones internacionales según las cuales “lo que se necesita para ser súper rico ahora comienza típicamente para un individuo (no un hogar) con una riqueza líquida y activos para invertir de 1 millón de dólares” (p. 4).

Siguiendo este criterio, Hay y Beaverstock señalan tres cambios en la composición de los súper ricos: ha aumentado su número (5.1 millones de ricos entre 2008 y 2013), el monto de la riqueza que poseen (de 32.8 billones de dólares en 2008 a 52.6 en 2013) y han emergido nuevas regiones como sede de más y mayores fortunas (por ejemplo, Asia Pacífico).

Los estudios sobre súper ricos también han utilizado como fuente de información los registros nacionales sobre ingresos. Estas observaciones han concluido que la punta de la pirámide se ha beneficiado desproporcionadamente del crecimiento de la tasa de riqueza en comparación con el resto de la población adulta; también se ha encontrado que el crecimiento de activos financieros explica el aumento de los súper ricos y que la distribución del aumento de la riqueza ha sido sensiblemente desigual.

Para los autores, el estudio de los ricos y la riqueza debe acompañar al estudio de los pobres y la pobreza. En ese sentido, el objetivo de los textos compilados es interrogarse acerca de “la concentración de la riqueza en manos de individuos (no corporaciones ni estados) así como de sus estilos de vida, comportamientos y su agencia en la sociedad global” (p. 7).

Estructura

Los textos incluidos en esta compilación tocan una amplia variedad de temas: estudios del desarrollo, educación, geografía humana, administración, economía política, políticas públicas, sociología, entre otros. Esta mirada, multi e interdisciplinaria, busca contribuir al trabajo crítico de la distribución de la riqueza en el tiempo y el espacio: “cómo los ricos viven y expresan su riqueza, cómo la riqueza transforma lugares, y cómo los ricos experimentan relaciones de poder y estilos de vida que los separan completamente del 99% restante” (p. 8). Estos planteamientos se presentan en tres partes: “Riqueza, yo y sociedad”, “Vivir en la riqueza” y “Riqueza y poder”.

Antes de entrar a la primera parte, el capítulo de Sin Yee Koh, Bart Wissink y Ray Forrest presenta una revisión de los estudios sobre los súper ricos en las ciencias sociales. Estos autores también llaman la atención sobre las preguntas que podrían guiar las nuevas investigaciones en el campo: en lugar de indagar en quiénes son y qué hacen los súper ricos, se propone cuestionar qué hace a los súper ricos y por qué.

La parte I contiene ocho capítulos que en conjunto “cuestionan la moralidad y legitimidad de la riqueza extrema y la emergencia de los ‘nuevos’ súper ricos en la sociedad global” (p. 9). En el capítulo 3, Alastair Owens y David Green ponen énfasis en los desarrollos institucionales que generaron nuevas oportunidades de acumulación de riqueza y activos, como el desarrollo del sistema bancario y financiero. En el capítulo 4, Iain Hay evalúa las relaciones económicas y de poder de la plutonomía, recuperando el término popularizado por Ajay Kapur, un analista de Citigroup. El capítulo 5, de Andrew Sayer, cuestiona la legitimidad del retorno de los súper ricos, ligando su vuelta a las políticas neoliberales y al proceso de financiarización. En el capítulo 6, Ilan Kapoor estudia a dos figuras de la filantropía y la caridad, Bill Gates y George Soros, como ejemplo de lo que denomina “capitalismo descafeinado” [decaf capitalism]. Kapoor explica cómo estas donaciones son una práctica empresarial que ayuda a ocultar el lado más oscuro del capitalismo y mantener el status quo del orden económico neoliberal en la sociedad global. En el capítulo 7, Paul Schervish presenta los resultados de 49 entrevistas realizadas a emprendedores multimillonarios que relatan sus experiencias en la construcción de sus fortunas. A continuación, Sam Schulz e Iain Hay presentan un análisis de dos principios que conforman la subjetividad de los súper ricos: el silencio y la meritocracia. Esta sección es cerrada por dos capítulos que analizan ejemplos concretos de actividades lícitas (rap y hip hop) e ilícitas (drogas ilegales y fraude financiero) de los súper ricos.

La segunda parte incluye siete capítulos que abordan las características socioculturales y los estilos de vida de los súper ricos. En el capítulo 11, Rowland Atkinson, Roger Burrows y David Rhodes estudian el mercado residencial de Londres para los súper ricos enfatizando los cambios en las políticas residenciales y las viviendas de esa ciudad. El capítulo 12, de Chris Paris, analiza los espacios residenciales de los multimillonarios en todo el mundo y muestra el impacto desproporcionado que tienen los súper ricos en los sistemas internacionales de vivienda. Por su parte, Michael Woods presenta un estudio histórico de la propiedad de la tierra y su íntima relación con la riqueza. Los capítulos 14, 15 y 16 tratan detalladamente los estilos de vida y consumo de los súper ricos: desde la experiencia de vivir en Mónaco, pasando por la industria de los jets privados, hasta las principales marcas del consumo suntuario. En el último capítulo de la sección, Aidan Davison examina la relación entre el consumo de lujo de los súper ricos y los riesgos ambientales que atraviesa el planeta.

La parte III está compuesta por cinco capítulos que discuten “la supremacía de los súper ricos en el capitalismo contemporáneo y la globalización” (p. 13) a través de su influencia económica, política o cultural. El capítulo 18, de John Rennie Short, explora los patrones migratorios de los súper ricos. A continuación, Adam Dixon analiza los fondos soberanos en manos de las dinastías dominantes, en particular en Asia. En el capítulo 20, Jonathan Beaverstock y Sarah Hall presentan un estudio sobre la industria de la administración de riqueza privada para los multimillonarios. En próximo capítulo, Ronen Palan y Giovanni Mangraviti muestran los mecanismos de reducción de impuestos y el arbitraje jurisdiccional que usan los súper ricos para aumentar sus ingresos. Finalmente, el capítulo 22, de Isaac Osuoka y Anna Zalik, recupera la experiencia de los súper ricos que han construido su fortuna a partir de la industria petrolera.


2. Reconsiderando a los súper ricos: variaciones, condiciones estructurales y consecuencias urbanas
Sin Yee Koh, Bart Wissink y Ray Forrest

Sin Yee Koh es professor ayudante de geografía en el Instituto de estudios asiáticos en la Universidad de Brunei Darussalam.

Bart Wissink professor asociado en el Departamento de políticas públicas en la Universidad de la ciudad de Hong Kong.

Ray Forrest es profesor de estudios urbanos del Departamento de políticas públicas en la Universidad de la ciudad de Hong Kong.


Introducción

En este capítulo Sin Yee Koh, Bart Wissink y Ray Forrest hacen una revisión crítica de las aproximaciones analíticas al tema de los súper ricos y proponen nuevas preguntas para guiar las futuras investigaciones. Los autores señalan que las ciencias sociales han privilegiado el estudio de los estratos inferiores de la sociedad y, muy recientemente, el de las clases medias. No obstante, en un contexto de una mayor desigualdad en la distribución de los ingresos y de la emergencia de enclaves urbanos construidos para las élites, la academia comenzó a concentrarse en la investigación de los súper ricos. De este modo, desde distintas disciplinas como la geografía, los estudios de la movilidad, la macroeconomía y la sociología se está replanteando la agenda del análisis sobre las élites.

En opinión de los autores, a pesar de su crecimiento esta nueva agenda presenta algunos problemas metodológicos. En primer lugar, la literatura en torno al tema -académica y comercial- contribuye a la construcción de una narrativa normativa y centrada en el “sujeto súper ricos”. En efecto, la literatura comercial y popular así como la enorme diversidad de trabajos empíricos abonan la idea de que “los súper ricos son un grupo social preexistente” (p. 19) dejando de lado el estudio de las fuerzas estructurales de su existencia. Por ello, para los autores, es necesario alejarse de las preguntas ¿quiénes son los súper ricos y qué hacen? y mover el debate hacia preguntas como: ¿qué hace a los súper ricos y por qué?

En segundo lugar, los autores advierten que la academia ha contribuido a una formulación dicotómica de la realidad social, en la que el problema social se reduce a “ricos vs pobres”. Esta lectura implica un tratamiento simétrico para distintos segmentos de la sociedad.

Con estas consideraciones en mente, a lo largo del capítulo los autores desarrollan la necesidad de abordar las explicaciones estructurales de la expansión de los súper ricos así como sus consecuencias a escala local y en contextos urbanos.

Definir y describir a los súper ricos

Como Sin, Wissink y Forrest señalan, no existe una única definición para los súper ricos. La mayoría de los trabajos recuperan alguna de las 4 características que se enuncian a continuación:

• La primera característica, y también la más usual, se refiere a la riqueza material expresada como riqueza neta. Este aspecto es común en los reportes de administradores de activos, como los bancos. Thomas Piketty, por su parte, propuso una clasificación por centiles a partir de los registros fiscales.
• La segunda característica es la capacidad de los súper ricos para generar y acumular riqueza. Mientras los estudios “clásicos” ponían la mirada en la prevalencia de la riqueza intergeneracional (herencia), la información más reciente sugiere un cambio hacia riquezas “construidas”. Por ejemplo, dos tercios de los 1 645 multimillonarios incluidos en la lista anual de Forbes de 2014 se consideraban hechos a sí mismos en contraste con 13% que recibió su fortuna como herencia. En cualquier caso, lo que resulta crucial en este caso es que los súper ricos, a diferencia de otros, tienen la capacidad de acumular y acrecentar su riqueza.
• La tercera característica es la posición que ocupan los súper ricos así como sus conexiones. Ya sea a través de lazos familiares o en los directorios corporativos, los estudios sobre el tema identifican las redes de súper ricos y sus formas de operar para movilizar, desarrollar y proteger sus fortunas.
• Finalmente, la cuarta característica asociada a los súper ricos es la movilidad transnacional, sus múltiples residencias y la variedad de sus inversiones en el mundo, incluyendo los paraísos fiscales.

De acuerdo con los autores estas 4 características que describen y conforman el núcleo de la definición de los súper ricos construye una imagen normativa de estos actores asociada a la riqueza financiera, un estilo de vida suntuario, estatus, poder y movilidad transnacional. Esta mirada normativa impide avanzar en dos tareas críticas del análisis académico. Por un lado, se ha abandonado el ejercicio de explicar las fuerzas estructurales que han contribuido al ascenso de los súper ricos. Por el otro lado, es necesario cuestionar las diferencias dentro y entre los súper ricos, echando abajo el supuesto de que se trata de un grupo uniforme.

Los súper ricos como producto discursivo

Según Sin, Wissink y Forrest el análisis estructural del ascenso de los súper ricos exige un enfoque dual, que tome en cuenta la producción discursiva y material en torno al tema. En lo que respecta a la producción discursiva, los autores señalan que es necesario analizar cómo y bajo qué circunstancias se construyó la imagen de que los súper ricos son percibidos como un grupo social distinto a los demás. La importancia de este enfoque reside en que “las definiciones ahistóricas de los súper ricos contribuyen a la ilusión de que este es un grupo social preexistente, oscureciendo el trabajo y los objetivos políticos detrás de su conformación” (p. 22).

En este sentido, los autores hacen una revisión somera de los cambios sociales que están detrás de los términos usados para referirse a los súper ricos. Por ejemplo, señalan, el término “súper ricos” no era popular antes de la década de 1970, sino que era más común denominar a este grupo como “los ricos”, “los adinerados” o “las élites”. Los trabajos sobre los ricos y los adinerados comenzaron a aparecer a principios del siglo XIX: se multiplicaron las “listas de ricos”, publicaciones llenas de información biográfica que, en palabras de Sin, Wissink y Forrest “capturaban el espíritu materialista y capitalista de la época” (p. 23).

Con el ascenso de las finanzas ligadas al sector industrial, a finales del siglo XIX y principios del XX, creció también el “consumo conspicuo”, un término que Thorstein Veblen uso para describir los patrones de consumo de los nuevos ricos.

Hacia finales del siglo XX se popularizó el término “ricos” y se abandonó el de “adinerados”. Los autores atribuyen este cambio a una modificación en la fuente de la riqueza: “los adinerados”, suele vincularse la riqueza a la herencia familiar, mientras que “ricos” hace referencia a dinero acrecentado por la expansión de la economía global. Este desarrollo se evidencia en dos tipos de publicaciones específicas: las listas de ricos y las investigaciones monográficas de las élites.

Por ejemplo, siguiendo el esfuerzo de la revista Forbes desde 1982, han aparecido listados como The BRW Rich 200 en Australia, The Sunday Times Rich List en Reino Unido, Hurun Report en China, entre otros. Este tipo de literatura “constituye una mayor visibilidad de los nuevos ricos y su patrimonio en los medios de comunicación populares” (p. 25).

Al mismo tiempo aparecieron investigaciones especializadas en los ricos y su riqueza. Algunos de estos trabajos son: America’s 60 Families (1937) y The Rich and the Super-Rich (1968) de Ferdinan Lundberg; Riches, Class, and Power: America Before the Civil War (1990) de Edward Pessen; The Inner Circle (1984) de Michael Useem y The Power Elite (1956) de Charles Wright Mills. El término “súper ricos” se atribuye a la obra de Lundberg quien estudia la genealogía de las 60 familias más poderosas de Estados Unidos.

La industria de la gestión patrimonial también ha contribuido grandemente a la producción discursiva de los súper ricos como un grupo social distinto a través de publicaciones periódicas que ilustran el estilo de vida, el gasto o las inversiones de sus clientes.

Finalmente, los autores señalan que otra fuente para estudiar a los súper ricos es el periodismo, cuyos análisis pueden clasificarse en tres tipos. El primero se enfoca en los estilos de vida de los multimillonarios. El segundo describe la emergencia de los súper ricos, particularmente en Estados Unidos, con una mirada que divide a este grupo del resto de la sociedad. El tercer tipo de análisis se centra en señalar como culpables a los súper ricos de una serie de fenómenos que incluye la mala distribución de la riqueza, la gentrificación y la segregación urbana, entre otros.

Estos trabajos, en opinión de los autores, generan una narrativa dicotómica sobre los súper ricos centrada en una mirada “negativa” más que en indagar en sus relaciones y su integración social. La tarea más importante en este tipo de investigación es, citando a Saskia Sassen, “profundizar en las dinámicas sistémicas que articulan lo que hoy aparece desconectado” (p. 27).

Los súper ricos como un producto material

La investigación sobre la constitución material de los súper ricos implica el análisis sobre los cambios y la reestructuración del capitalismo contemporáneo en las últimas cuatro décadas. Los primeros trabajos con esta perspectiva, alrededor de la década de 1980, se centraban en los problemas de la pobreza extrema más que en los de la riqueza extrema debido a la falta de información confiable pero también porque persistía la creencia de que el neoliberalismo produciría una continua movilidad social. Sin embargo, las crisis frecuentes evidenciaron la creciente inequidad en el ingreso: la clase media cargó un mayor peso impositivo mientras las medidas de austeridad afectaban más a los pobres y hacían más ricos a los ricos. “Los regímenes impositivos más regresivos, la inflación salarial extrema de los puestos directivos, las políticas de privatización y el outsourcing son características interconectadas de la reestructuración del capitalismo contemporáneo” (p. 28), mismas que, en combinación, han producido diferentes facciones de los súper ricos. Por ejemplo, la reestructuración de la economía en la vieja Unión Soviética llevó a la emergencia de oligarcas y la caída en las tasas de impuestos permitió los altos salarios corporativos; en ambos casos, la estructura del capitalismo neoliberal dio nacimiento a enormes fortunas privadas.

De los espacios de los súper ricos a la espacialidad súper rica

La última sección del texto analiza los argumentos propuestos para la disciplina geográfica, en particular, los estudios urbanos. Antes de 1970, gran parte de esta literatura privilegiaba el análisis de fenómenos sociales como la pobreza y los desposeídos. A inicios de la década de los años setenta esta tendencia cambió radicalmente y la influencia de las élites capitalistas en el desarrollo de las ciudades comenzó a llamar la atención del campo.

Las transformaciones provocadas por el neoliberalismo tuvieron importantes consecuencias para las ciudades, como lo revelaron nuevos trabajos de los estudios urbanos. Por ejemplo, la investigación sobre las “ciudades globales” mostró como algunas ciudades se transformaron en nodos clave para la economía global, produciendo nuevas jerarquías urbanas y geografías desiguales; los estudios sobre gentrificación se enfocaron en cómo las élites se apropiaron y rediseñaron los barrios residenciales; los análisis sobre privatización del espacio público pusieron en cuestión la transformación de los espacios públicos en espacios de consumo. No obstante, los autores señalan que muchos de estos planteamientos no dejan claro quiénes son los actores que guían estas tendencias; por el contrario, sí es evidente que hay un segmento de perdedores debido a las transformaciones urbanas. En segundo lugar, las transformaciones urbanas son presentadas como desarrollos genéricos en distintos lugares. Finalmente, se presentan interpretaciones negativas de estos procesos, como amenazas a la comunidad, la solidaridad y la democracia.

Para el estudio de la espacialidad de los súper ricos, estas críticas implican una reformulación de las preguntas de investigación. Por ejemplo: ¿cómo se producen y consumen ciudades? ¿cómo percibe su agencia los súper ricos del resto de la sociedad? ¿qué variaciones se pueden observar entre los súper ricos? Para Sin, Wissink y Forrest este tipo de preguntas permite reconocer que los súper ricos no son un grupo homogéneo, que se comportan distinto según el lugar donde estén y que operan en determinada estructura social. De este modo, para los autores el estudio de los súper ricos supera la descripción de sus prácticas y estilos de vida y los sustituye por un análisis de prácticas localizadas y de las estructuras en las que operan.

En este sentido, los autores proponen cuatro líneas para continuar las investigaciones sobre el tema:
1. La influencia de los súper ricos en la producción del espacio.
2. Las conexiones de los super ricos al interior de las ciudades y entre estas.
3. Las estrategias de inversión de los súper ricos en propiedades residenciales.
4. La construcción discursiva de los super ricos y su agencia.

Conclusiones. Reconsiderando a los súper ricos

En contraste las afirmaciones simplistas, los autores reiteran que los súper ricos son un grupo diverso en la manera en que generan su riqueza, en que viven su vida y en los espacios que ocupan. Por lo tanto, los estudios sobre el tema deben producir un entendimiento más detallado de este grupo social y hacer afirmaciones más precisas. Estudiar las fuerzas estructurales que sustentan su capital, estatus y sus redes ayudan a entender mejor el fenómeno.

Nexo con el tema que estudiamos: 

La concentración de riqueza es uno de los signos de la decadencia del capitalismo contemporáneo. A diferencia de los periodos más prósperos del capitalismo, la desigualdad de ingresos refleja la incapacidad del sistema capitalista para asegurar la reproducción de la fuerza de trabajo y su base de consumidores.

Este texto proporciona herramientas metodológicas para identificar a los sujetos que ocupan la cima de la pirámide socioeconómica así como para indagar en sus estilos de vida y los mecanismos que permiten amplificar su influencia cultural y política.