Exxon’s Plan for Surging Carbon Emissions Revealed in Leaked Documents

Cita: 

Crowley, Kevin y Akshat Rathi, "Exxon's Plan for Surging Carbon Emissions Revealed in Leaked Documents", Bloomberg, 5 de octubre, New York, https://www.bloomberg.com/news/articles/2020-10-05/exxon-carbon-emission...

Fuente: 
Otra
Fecha de publicación: 
Lunes, Octubre 5, 2020
Tema: 
Documentos filtrados muestran los planes de crecimiento de Exxon, y el poco compromiso en reducir su impacto ambiental.
Idea principal: 

Sobre los autores

Kevin Crowley estudió en la Universidad de Oxford (2003-2006), ha sido reportero de finanzas y de minería. Desde noviembre de 2017 es reportero de temas con relación al petróleo, en Bloomberg News.

Akshat Rathi trabaja como reportero en Londres, para Bloomberg News. Asimismo, ha trabajado para The Economist y para The Royal Society of Chemistry. En 2018 ganó la categoría de periodista del año, en The Drum Online Media Awards.


De acuerdo con un análisis de documentos internos, realizado por Bloomberg, de la empresa productora de petróleo más grande de Estados Unidos, Exxon Mobile, tiene planes de crecimiento en producción que, a su vez, podrían aumentar las emisiones de carbono. La empresa petrolera más grande de Estados Unidos no se ha comprometido a reducir su impacto ambiental, y con su estrategia de inversión para el aumento en la producción, es menos probable que lo haga.

En relación con sus planes de crecimiento, el impacto ambiental de Exxon (aparte de lo contabilizado por el nivel estándar de emisiones conocido como Scope 3 emissions) sería cinco veces más de lo considerado, puesto que, la empresa petrolera sólo ha contemplado el impacto que genera en las operaciones directas. No obstante, las demás emisiones provienen de usos finales, como las generadas por los clientes al momento de usar sus vehículos, debido a la quema de combustible.

A pesar de las estimaciones de la Agencia Internacional de Energía, sobre la necesidad de gran inversión monetaria para el abastecimiento de gas y petróleo para el año 2040, expertos señalan la urgencia de reducir la producción de petróleo para así limitar el aumento del calentamiento global a no más de 1.5 grados Celsius.

Los planes de Exxon fueron hechos antes del surgimiento de la pandemia, sin embargo, tampoco se han cancelado por completo a pesar de la reducción de la demanda de petróleo. Desde abril de 2020 se redujo el gasto presupuestal a un tercio para preservar el efectivo, también hubo reducción de personal y de beneficios para los empleados, para así solamente poder pausar los planes de crecimiento.

Exxon ha buscado crecer desde hace 10 años, por lo que, sus planes de crecimiento serán basados a partir de sus intereses, incluso si esto implica cubrir la demanda de combustibles fósiles. Para esto, están pensados 5 proyectos para la extracción de petróleo y gas natural en lugares como la Cuenca Pérmica, Guyana, Brasil, Mozambique y Papúa Nueva Guinea.

La empresa petrolera intensificó los esfuerzos por reducir sus emisiones totales, no obstante, el grado de contaminación sigue siendo significativo. A pesar de no divulgar sus cifras de Scope 3, Bloomberg Opinion estimó que, en 2019 Exxon produjo 528 millones de toneladas métricas de CO2. Cifras con gran diferencia a las publicadas por la gran petrolera, sobre sus emisiones Scope 1 y Scope 2, con 127 millones de toneladas métricas en el año 2018.

A partir de las divulgaciones parciales de empresas petroleras sobre el impacto medioambiental, se han generado conflictos legales: demandas y exigencia de compensaciones de productoras petroleras (entre ellas Exxon) a ciudades y comunidades (que pagan impuestos) que inevitablemente deben adaptarse al cambio climático.

Tanto empresas petroleras europeas como de otros países ya están trabajando en el compromiso de reducir de manera significativa las emisiones de carbono; a comparación de Exxon, cuyos planes de crecimiento solo se alinean con el aumento en la demanda de combustibles, su compromiso por reducir su impacto ambiental no está claro.

Por intereses de dicha empresa petrolera, le ha servido alinearse del lado conservador de la política estadounidense. En el cual, directivos de Exxon, han desempeñado cargos públicos; lo que le ha permitido una participación directa en las discusiones sobre el rumbo de la economía de Estados Unidos.

Asimismo, mantiene cierta imparcialidad, sujeta a los beneficios que Exxon busca; puesto que por un lado, se ha beneficiado de la política del gobierno de Donald Trump sobre la liberación del dominio energético, y a su vez, ha realizado donaciones económicas a ambos candidatos presidenciales (tanto Trump como Biden).

Por otro lado, China se comprometió en alcanzar la neutralidad respecto a sus emisiones de carbono, para el año 2060. Y en el caso de Estados Unidos, su objetivo es ser neutro en sus emisiones de efecto invernadero para 2050, con financiación del Pacto Verde (o también conocido como Green Deal ). Con estos compromisos, también se espera la contribución de la petrolera Exxon Mobil, debido a su considerable impacto medioambiental.

Datos cruciales: 

1. Las emisiones directas de Exxon en 2025 aumentarían a 154 millones de toneladas de CO₂ equivalente, un aumento del 26% con respecto a los niveles de 2017.

2. Una gráfica incluida en los documentos de Exxon enlista las emisiones directas en 2017 (las cuales equivalen a 122 millones de toneladas métricas de CO2), asimismo, se muestra una proyección de 143 millones de toneladas para 2025.

3. El crecimiento productivo de Exxon también afectaría en el incremento de emisiones de carbono, con 17% para el año 2025.

4. De acuerdo con los documentos internos de Exxon, con el aumento previsto de perforaciones y refinaciones en el proceso de producción petrolera, también aumentarían las emisiones de gases de efecto invernadero a 143 millones de toneladas de dióxido de carbono por año.

5. Crecimiento de emisiones de dióxido de carbono en millones de toneladas métricas.

6. Emisiones de gases de efecto invernadero en millones de toneladas métricas.

Nexo con el tema que estudiamos: 

La industria petrolera es una gran contaminadora del ambiente, a pesar de la reducción de producción durante la pandemia de COVID- 19, a largo plazo los esfuerzos por cumplir el compromiso en reducir las emisiones de carbono en todas las actividades son insuficientes. Es evidente que la competencia entre empresas y la búsqueda de generar mayores ganancias económicas deja de lado la explotación y extracción de recursos naturales de cualquier parte del mundo; asimismo, el impacto ambiental y social ha generado demandas y resistencias entre las comunidades más afectadas.