Lea Hensen es una periodista germano-italiana que escribe para el periódico Deutsche Welle. Es especialista en temas de cultura, historia e igualdad de derechos.

Lea Hensen habla sobre la organización Omas gegen rechts (abuelitas en contra de la derecha) haciendo énfasis en la historia de su creación. La autora también señala la razón por la que las “abuelitas” se movilizan y profundiza en los testimonios de la fundadora principal de dicha asociación en Alemania: Anna Ohnweiler. En ese sentido, la unión de las abuelas inició en Austria y continuó en Alemania a través de un grupo de Facebook con el motivo de derrocar a los partidos con ideologías de extrema derecha que apoyen a la corriente neo-nazi.

Fuerte fe en la democracia

Con el motivo de alzar la voz ante las injusticias provocadas por el neonazismo, Anna Ohnweiler decidió hacer peticiones tanto a Helmut Kohl, cuando era canciller de Alemania, como a Angela Merkel (actual canciller del país germano), cuando tenía el cargo de ministra de la mujer y juventud. Incluso, la fe en la democracia que esta mujer manifestaba tiene una razón profunda, pues creció en Romania neostalinista en el régimen de Nicolae Ceausescu y posteriormente fue prisionera en uno de los campos de concentración nazi durante el mandato del Tercer Reich.

La rebelión de las abuelas y los abuelos

La Sra. Ohnweiler aceptó su papel de abuela y lo politizó. El grupo de Facebook, creció y actualmente cuenta con 3 000 miembros, tras su fundación en 2018. Más tarde en 2019, se formó una asociación de abuelas en contra de la derecha, en la cual también se unieron abuelos. No obstante, esto generó controversia y diversos comentarios negativos en las redes sociales. Uno de ellos fue escrito en Twitter por parte de uno de los integrantes del Movimiento Identitario de extrema derecha con sede en Salzburgo. El comentario “era una queja en contra del grupo de ancianas que protestaban contra el Partido de la Libertad de Austria”. Ohnweiler reaccionó y comentó que le extrema derecha crea un lenguaje de odio que divide a la sociedad y pone en riesgo a la democracia, es por eso que es necesario protestar, para no olvidar los estragos que provocó el nazismo.

Protestando por convicción

Por otro lado, "Protestando por convicción” es el lema más importante de la movilización y sus miembros lo utilizan cada que se manifiestan en las calles en contra de la derecha y al vigilar las protestas de sus contrincantes (partidarios del neonazismo). Asimismo, agendan constantes reuniones para dirigir las actividades de la organización. La primera de ellas fue llevada a cabo en Dresden en agosto de 2019 con el objetivo de reunir a un grupo de gente de diversos países que estuviesen interesados en apoyar a Omas gegen rechts. Hoy en día, la coalición se encuentra en más de 70 ciudades, en ellas se encuentran participantes de la tercera edad, al igual que jóvenes e individuos que pertenecen a la generación de postguerra.

Tras vivir una infancia y una juventud descrita por discriminación, carencias y privación de la libertad, Anna Ohnweiler se interesó por la política y la defensa de los derechos de la mujer, considerándose como apartidista. Empero, en febrero de 2019 Ohnweiler volvió a ser criticada, pues recibió una postal de amenaza que vapuleaba las actividades de la asociación de las abuelitas.

Finalmente, Anna Ohnweiler está consiente de lo que implican las actividades de su organización, entonces su reacción ante los discursos de odio, manifestados de distintas formas, es positiva. Ella sabe que no puede controlar el odio de la gente y comenta que: “El miedo es un mal consejero. Si se le extiende hasta tal punto que nadie esté preparado para hablar, ahí es cuando nuestra democracia está en grave peligro”.