The latest must-have among US billionaires? A plan to end the climate crisis

Cita: 

Milman, Oliver y Dominic Rushe [2021], "The latest must-have among US billionaires? A plan to end the climate crisis", The Guardian, 25 de marzo, https://www.theguardian.com/us-news/2021/mar/25/elon-musk-climate-plan-r...

Fuente: 
Otra
Fecha de publicación: 
Jueves, Marzo 25, 2021
Tema: 
Los planes de los multimillonarios para acabar con la crisis climática
Idea principal: 

Oliver Milman es un reportero del periódico The Guardian, enfocado principalmente a temas sobre el medio ambiente. Dominic Rushe, cuyo enfoque es la sección de negocios, también trabaja para The Guardian. Dominic Rushe fue parte del equipo de The Guardian que ganó el premio Pulitzer en 2014 otorgado al periodismo de servicio público.


La tendencia más reciente entre los ultra-ricos de Estados Unidos es tener un plan para salvar al mundo de la crisis climática. Elon Musk, fundador de Tesla y una de las personas más ricas del mundo, ha prometido un premio de 100 millones de dólares a la mejor tecnología de captura de dióxido de carbono (uno de los gases causantes del calentamiento global) de la atmósfera. Jeff Bezos, fundador de Amazon, y número 1 en la lista global de riqueza, ha prometido 10 mil millones de dólares a iniciativas a favor del medio ambiente. Bill Gates, otro multimillonario y cofundador de Microsoft, lanzó recientemente un libro sobre cómo llevar las emisiones contaminantes a cero.

Juntos, estos tres hombres tienen una riqueza estimada de 466 mil millones de dólares y unas de las huellas personales de carbono más grandes en el planeta. También son parte de una visión que ve al libre mercado y a los avances tecnológicos como la respuesta a una emergencia existencial ya afectando las vidas de millones de personas.

Serán necesarias innovaciones para eliminar las emisiones de ciertas áreas con pocas alternativas actuales, como la producción de acero y la aviación, así como también para absorber dióxido de carbono que ya ha sido emitido. Los científicos han dejado claro que la humanidad debe reducir urgentemente estas emisiones a la mitad en la próxima década para evitar un calentamiento global desastroso.

Algunos de quienes hacen campaña a favor del clima han dado la bienvenida al interés y al poder económico de la élite de Estados Unidos después de un año récord de incendios forestales y huracanes que azotaron al país, víctima de las consecuencias del calentamiento global. Otras personas también señalan que los estadounidenses más vulnerables podrían beneficiarse de intervenciones menos glamorosas pero inmediatas, como más espacio público verde y sombra en las ciudades para escapar del calor ascendente.

Algunos expertos también señalan la necesidad de enfocarse en encontrar varias alternativas y soluciones al problema del cambio climático, pues es posible que una sola solución no sea suficiente. Asimismo, se apunta la necesidad de garantizar la resiliencia de las personas y comunidades que serán más afectadas por las consecuencias del cambio climático.

Elon Musk está al frente de la batalla por construir un mundo de bajas emisiones, con Tesla, fabricante de vehículos eléctricos y baterías domésticas, que ahora es la empresa automotriz más valiosa del mundo. Elon Musk también ha realizado una propuesta de otorgar 100 millones de dólares al proyecto que logre remover y almacenar el dióxido de carbono del medio ambiente de manera medible y escalable.

Los científicos han dejado claro que es muy improbable reducir a cero las emisiones lo suficientemente rápido sin recurrir a algún esfuerzo adicional como la reforestación masiva o con máquinas que puedan absorber esos gases directamente del aire para después enterrarlos en el aire o utilizarlos para otro fin.

El problema es que este tipo de tecnología es relativamente nueva y necesitaría ser escalada masivamente para ser efectiva. Un estudio encontró que limitar el calentamiento global a 1.5º C arriba de la era preindustrial requerirá capturar alrededor de 810 mil millones de toneladas de dióxido de carbono, equivalentes a 20 años de las emisiones actuales. Actualmente, los sistemas de captura de carbono son bastante caros y requieren mucha energía eléctrica para funcionar, lo que a su vez genera mayores emisiones y contribuye al calentamiento global.

Bill Gates y su fondo de inversión, Breakthrough Energy –que también es respaldado por Michael Bloomberg, George Soros y Mark Zuckerberg– apuestan a proyectos de alto riesgo y largo plazo que apuntan a reducir las emisiones de carbono del mundo. Dentro de esos proyectos está el plan de convertir agua de mar en partículas microscópicas que serían esparcidas en las nubes, aumentando su blancura y, por lo tanto, su habilidad de reflejar más luz solar hacia el espacio, reduciendo el calentamiento global. Esta geoingeniería podría cambiar fundamentalmente el planeta, aclarando los cielos y cambiando los patrones del clima y las corrientes oceánicas. Gates también cuenta con otras inversiones en plantas nucleares y energía de tecnología verde más “tradicional” como la solar o la eólica.

En su nuevo libro, “Como Evitar Una Crisis Climática”, Bill Gates aboga por una reforma fiscal y gran inversión por parte de los gobiernos para eliminar lo que la llama la “prima verde”, la diferencia en el costo entre un producto que emite carbono y otro que no. Gates tiene muchas ideas, pero puede que no se cumplan, ya que, a pesar de su riqueza e influencia, incluso él tiene dificultades para cambiar el ambiente político global.

Jeff Bezos, con su fondo, Bezos Earth Fund, repartió 791 millones de dólares a varios grupos de conservación y soluciones para el medio ambiente, en lo que Bezos dijo es solo el comienzo de su batalla para combatir lo que él llama “la amenaza más grande para el planeta”. Bezos también estableció un compromiso climático para su empresa Amazon, la cual llegaría a cero emisiones de dióxido de carbono para 2040, a través de un cambio hacia energías renovables y la compra de 100 mil vehículos de entrega eléctricos. Docenas de empresas han prometido emular el objetivo de Amazon.

El hecho de que una de las empresas más grandes y poderosas del mundo se haya comprometido a tomar acción contra el cambio climático fue bienvenida por diferentes grupos ambientales y ha probado ser influyente con otras empresas. Otros han criticado la falta de detalle sobre cómo Amazon planea llegar a su objetivo, mientras algunos trabajadores de la compañía de Bezos están inconformes con el hecho de que Bezos se rehusó a terminar contratos de los servicios de cómputo en la nube con empresas de combustibles fósiles.

El artículo concluye señalando que el número creciente de corporaciones que se comprometen a una reducción en sus emisiones es opacada por el hecho que les falta “músculo político”. Un reporte reciente encontró que las grandes corporaciones de tecnología de Estados Unidos estaban gastando relativamente muy poco en cabildeo. Estas compañías están dejando que sus contrapartes en petróleo y combustibles fósiles dominen el entorno y el debate político.

Datos cruciales: 

1. Bezos, Gates y Musk tienen una riqueza estimada de 466 mil millones de dólares y unas de las huellas personales de carbono más grandes en el planeta.

2. Globalmente, un área de bosque del tamaño del Reino Unido es deforestada cada año, para hacer espacio para agricultura, caminos y urbanización.

3. Un estudio encontró que limitar el calentamiento global a 1.5º C arriba de la era preindustrial requerirá capturar alrededor de 810 mil millones de toneladas de dióxido de carbono, equivalentes a 20 años de las emisiones actuales.

Nexo con el tema que estudiamos: 

El hecho de que algunas de las empresas más poderosas de Estados Unidos, como Amazon, Microsoft y Tesla, entre otras, se comprometan en la lucha contra el cambio climático representa un cambio en el combate a esta problemática esta problemática. Estas compañías y algunas otras, reducirán sus propias emisiones, y, no sólo eso, sus fundadores también cuentan con proyectos en diferentes fondos de inversión que buscan atacar este problema desde diferentes frentes. Sin embargo, las acciones de entes privados no son suficientes, también se necesita iniciativa política del Estado. El futuro no se ve claro, pero de acuerdo a lo expuesto en la nota es posible que, por fin, el libre mercado y la innovación, factores principales del capitalismo, se orienten a combatir uno de los problemas más grandes que el mismo capitalismo causó.