Private Inequity: How a Powerful Industry Conquered the Tax System

Cita: 

Drucker, Jesse y Danny Hakim [2021], "Private Inequity: How a Powerful Industry Conquered the Tax System", The New York Times, New York, 12 de junio, https://www.nytimes.com/2021/06/12/business/private-equity-taxes.html

Fuente: 
Otra
Fecha de publicación: 
Sábado, Junio 12, 2021
Tema: 
La industria de capital privado y sus estrategias fiscales
Idea principal: 

Jessie Drucker es un reportero de investigación de negocios en el New York Times, previamente trabajó en el Wall Street Journal y en Bloomberg News. Danny Hakim es un reportero para el New York Times, anteriormente fue corresponsal de economía en Europa.

El 5 de enero de 2021, un día antes de los disturbios en el Capitolio, la administración de Trump aprobó nuevas regulaciones fiscales, más permisivas que las establecidas en el 2017, que benefician de gran manera a la industria de capital privado o capital inversión[private equity]. Se estima que el valor de las inversiones en esta actividad actualmente alcanza los 4.5 billones [trillion] de dólares.

Las prácticas para evadir impuestos dentro de la industria son tan agresivas y potencialmente ilegales, que incluso algunas personas dentro de la misma industria han alertado a la agencia gubernamental encargada de recaudar impuestos en Estados Unidos, el Internal Revenue Service (IRS, por sus siglas en inglés). El IRS, debido a múltiples recortes en su presupuesto, actualmente se encuentra sin el personal necesario para operar de manera adecuada, lo que hace aun más difícil combatir la evasión de impuestos de una industria como la de capital privado. Otra dificultad para cobrar impuestos a esta industria son sus conexiones políticas: se estima que en la década más reciente ha hecho contribuciones a campañas políticas por 600 millones de dólares.

Las auditorías para las grandes empresas multinacionales son bastante comunes. No obstante, en el caso de los fondos de capital privado, las auditorías son "casi inexistentes". Ello se debe en parte a su intricada estructura organizativa, que hace muy difícil el trabajo. Una estimación reciente calculó que en Estados Unidos se pierden cerca de 75 mil millones de dólares anuales en ingresos fiscales debido a estas asociaciones que no declaran sus impuestos de manera adecuada. Ese monto equivale aproximadamente al presupuesto federal anual en educación.

La industria de capital privado hace dinero de dos formas. Primero, los fondos cobran a los inversionistas un cargo por administración de sus activos, normalmente alrededor de 2%. Segundo, estos mismos fondos de capital privado se quedan con 20% de las utilidades futuras que las inversiones realizadas generen. Ese 20% sobre las utilidades futuras es considerado por el IRS como ganancias de capital, en lugar de ser considerado como un ingreso ordinario. Esta distinción es bastante significativa para la industria, pues el impuesto sobre las ganancias de capital (20%) es menor al impuesto sobre el ingreso (que llega hasta 37%). Viktor Fleischer, profesor de leyes en la Universidad de California, calcula que esta diferencia representará 130 mil millones de dólares en ingresos al gobierno federal estadounidense durante los próximos 10 años.

Diferentes fondos de capital privado han encontrado la manera para que su cargo por administración de 2% también sea tratado como ganancias de capital, lo que ha reducido sustancialmente sus pagos de impuestos. Por ejemplo, un fondo de capital privado que reciba 1 millón de dólares por cargo de administración sería gravado en 37%; sin embargo, bajo esta nueva estrategia, el fondo aceptaría recibir 1 millón de dólares como una parte de las utilidades futuras, que declararían entonces como ganancias de capital que se gravan en 20%, ahorrándose así 170 mil dólares en impuestos. Entre los fondos de capital privado que recurren a estas prácticas se encuentran Kravis Roberts, Apollo Global Management, TPG Capital, Bain Capital, entre otros.

Al principio de su presidencia en 2008, Barack Obama tenía la idea de acabar con estos privilegios y fallas fiscales que favorecían de manera importante a los fondos de capital privado. Sin embargo, fondos como Blackstone, recurrieron al "lobbying", práctica que consiste en la donación de fondos a políticos con el objetivo de que estos legislen a su favor y bloqueen leyes que pudieran afectar sus intereses económicos. Ambos secretarios del Tesoro durante los dos periodos de la administración de Obama, Jacob Lew y su sucesor, Timothy F. Geithner, se unieron a fondos de capital privado después de abandonar su cargo público.

Después de los cambios fiscales hechos por Trump al principio de su administración, le tomó más de dos años a la Secretaría del Tesoro proponer nuevas reglas más estrictas para los fondos de capital privado. La industria pronto rechazó estas nuevas reglas. En octubre de 2020, mediante una carta, el Consejo de Inversión Americano, cuyo líder es Drew Maloney, anteriormente colaborador de Mnuchin, Secretario del Tesoro en ese momento, argumentó que estas nuevas propuestas afectarían gravemente a la industria debido a sus restricciones. En diciembre, los funcionarios de dicha Secretaría que trabajaban en las nuevas regulaciones fueron presionados por David Kautter, funcionario responsable del proyecto, para que la propuesta estuviera lista justo antes de que Trump y Mnuchin dejaran sus cargos. En Enero de 2021 la Secretaría del Tesoro reveló la versión final de la propuesta, la cual venía sin las regulaciones más estrictas. El ahora ex-Secretario del Tesoro Mnuchin, fundó un fondo de inversión que podría beneficiarse de estas nuevas reglas.

Datos cruciales: 

1. La industria de capital privado tiene un valor de 4.5 billones de dólares.

2. Una estimación reciente calculó que en Estados Unidos se pierden cerca de 75 mil millones de dólares anuales en ingresos fiscales debido que los fondos de capital privado no declaran sus impuestos de manera adecuada.

3. El impuesto sobre las ganancias de capital es de 20%, mientras que el impuesto sobre el ingreso llega hasta 37%.

Nexo con el tema que estudiamos: 

Los grandes fondos de capital privado forman parte de una industria multimillonaria, y no solo encuentran diferentes maneras para pagar menos impuestos, también hacen contribuciones de campaña a aquellos políticos que pueden promover sus intereses fiscales dentro del sistema legislativo estadounidense. Además, ha habido mismos funcionarios gubernamentales encargados de regular esta industria que, al dejar su cargo, consiguen trabajo dentro de la misma industria que estaban encargados de regular. La presente y palpable corrupción en la industria de capital privado debe combatirse para que todos contribuyan de manera equitativa en la recaudación de impuestos que, a la larga, servirá para un desarrollo más sano de la economía y para reducir la notable desigualdad social.