Warren Buffett and the Myth of the 'Good Billionaire'

Cita: 

Giridharadas, Anand [2021], "Warren Buffett and the Myth of the 'Good Billionaire'", The New York Times, New York, 13 de junio, https://www.nytimes.com/2021/06/13/opinion/warren-buffett-billionaire-ta...

Fuente: 
Otra
Fecha de publicación: 
Domingo, Junio 13, 2021
Tema: 
Razones para no idolatrar a los multimillonarios y al sistema
Idea principal: 

Anand Giridharadas es columnista en The New York Times. Estudió ciencias políticas e historia en la Universidad de Michigan. Es autor de Winners Take All: The Elite Charade of Changing the World.


A primera vista Warren Buffet parece el millonario humilde, desinteresado por el dinero y con intenciones filantrópicas. Hace años, una propuesta para aumentar los impuestos recibió su nombre. Sin embargo, afirma Giridharadas, los peores multimillonarios son los “buenos multimillonarios”. A partir de la imagen que generan personas como Buffet, muchas personas pueden estar tentadas a creer que el sistema solo requiere ajustes (regulaciones, mayores impuestos, etc.), cuando en realidad el problema es el sistema en sí mismo.

En Estados Unidos, a medida que la sociedad deviene una plutocracia, no hay multimillonario que no saque provecho de los vacíos legales en sistema tributario, en las leyes laborales y en los aparatos regulatorios. El problema en Estados Unidos no es cuán virtuosos o no son los multimillonarios, sino que todo el sistema se basa en arreglos sociales que hacen posible que pocas personas acumulen tanta riqueza, aun cuando millones de personas carecen de alimentos, trabajo, vivienda, salud, entre otras.

Warren Buffet ha lucrado con las bebidas azucaradas de Coca Cola, con la desintegración de los sindicatos promovida por Amazon, la extracción de petróleo de Chevron y los préstamos predatorios de Clayton Homes. Además, como reveló recientemente un informe de ProPublica, Buffet se ha beneficiado por mucho tiempo del código fiscal de Estados Unidos.

En la publicación de ProPublica se documenta que los más grandes multimillonarios pagan muy poco o nada de impuestos. En la cima de este listado se encontraba Buffet, el "buen multimillonario", con la reputación más limpia de la élite. Más allá de que incluye el nombre de Buffet, el informe de ProPublica ha evidenciado que el código tributario estadounidense castiga a los trabajadores y permite a los billonarios aumentar su riqueza.

Entre 2014 y 2018, la riqueza de Buffet aumentó en 24.5 miles de millones de dólares; en este mismo periodo, según el informe de ProPublica, sólo pagó 24.7 millones de dólares en impuestos. Si la clase media de Estados Unidos disfrutara de una tasa de impuestos tan baja, tendrían que pagar sólo unas pocas docenas de dólares por hogar durante este mismo período de tiempo. En cambio, como señala ProPublica, los hogares de clase media pagaron alrededor de 62 mil dólares en impuestos.

Los pagos de impuestos que realizan los multimillonarios como Buffet son perfectamente legales; es decir, el sistema tributario de Estados Unidos no grava su riqueza, que crece cada año, sino el flujo anual de ingresos, que no considera propiedades, ni bienes inmuebles.

El autor considera que la influencia que tienen los plutócratas sobre la vida pública es incompatible con la democracia representativa basada en que a cada persona corresponde un voto. La “filantropía” de los multimillonarios es sinónimo de jugar por debajo de la mesa con la opinión pública. Por ejemplo, durante la pandemia, Bill Gates se ha convertido en un activo promotor de las vacunas y ha ejercido una importante influencia en las decisiones de política, ello sin tener un puesto en el gobierno ni haber sido electo democráticamente. Aunque Buffet se ha alejado de dar tales declaraciones, ha donado parte de su fortuna a la fundación Gates, aumentando su influencia antidemocrática.

Otro problema de los "buenos multimillonarios" es que usan la filantropía como marketing y como medio para relacionarse con figuras públicas. Por ejemplo, recientemente Goldman Sachs anunció una iniciativa para combatir la brecha de riqueza racial, aun cuando en la crisis de 2008 hizo poco o nada para evitar que las familias afroamericanas perdieran sus casas, daño que fue propiciado por el propio banco.

La imagen de Buffet del buen billonario es la de un hombre que no hace lo que resto de la élite: si bien le preocupa el dinero, no le importa tanto; supuestamente no busca lo que resto de los billonarios. El mito del "buen multimillonario" –del cual Buffet es la imagen más acabada– es perturbador porque lleva a que la opinión pública cuestione los excesos del sistema y no al sistema mismo.

El autor concluye señalando que la sociedad no debería idolatrar personas a las cuales el sistema les permite acumular riqueza superior a los 100 mil millones mientras hay personas que no tienen empleo, que no tienen dinero para comer, que pagan hipotecas y limitan sus condiciones de vida.

Nexo con el tema que estudiamos: 

Las élites empresariales han adaptado a sus intereses el sistema tributario y la opinión pública, promoviendo la antidemocracia y concentrando a través del tiempo el ingreso de la sociedad. La relación entre el gobierno y la élite empresarial ha sido más estrecha en las últimas décadas, ya que los esquemas de tributación han perjudicado a la clase media mientras que a los millonarios los ha beneficiado, al gravar el ingreso y no la riqueza.