Li Yuan escribe la columna New New World para The New York Times, que se centra en la intersección de la tecnología, los negocios y la política en China y en toda Asia.

Los jóvenes chinos se refugian en las enseñanzas de Mao debido a la situación laboral negativa de China. El pensamiento revolucionario de Mao es difundido en espacios públicos como el metro o las bibliotecas y está resurgiendo en la generación Z de China. Las campañas políticas de Mao costaron millones de vidas, pero aún así inspiran a los jóvenes porque lo ven como un héroe. Las palabras de Mao justifican la ira que muchos jóvenes sienten hacia una clase empresarial que es explotadora. El Partido Comunista Chino se ha convertido en el centro de casi todos los aspectos de la vida china bajo el mandato de Xi Jinping. El crecimiento económico se debilita y las oportunidades para los jóvenes disminuyen.

El Partido podría enfrentarse a problemas serios si no controla la nueva generación maoísta. Un bloguero maoísta expresó en WeChat que la nueva generación está perdida en una sociedad dividida. Du Yu de 23 años dijo sentir optimismo por el futuro del país, pero incertidumbre por el suyo. Du Yu trabaja en Shenzhen, una ciudad China obsesionada con la tecnología. Él decidió renunciar a su trabajo por el horario que tenía y lleva 3 meses sin buscar trabajo porque está en contra de la explotación y del “esfuerzo sin sentido”. Los jóvenes abandonaron un poco el pensamiento maoísta en 1980 cuando la libertad y el libre comercio se manifestaron. Ellos preferían leer a Nietzsche, a Friedman o a Sartre.

Las novelas de artes marciales y los libros escritos por empresarios de éxito dominaron las listas de las publicaciones más vendidas después de la represión de 1989 de la plaza de Tiananmén. Muchos jóvenes creen que no podrán superar la posición de sus padres. La intensificación del adoctrinamiento bajo el mandato de Xi ha provocado un nacionalismo en los jóvenes y los ha orillado a que estén inmersos en la ideología comunista. Un eslogan en internet dice “¿Morir por la patria? Sí. ¿Morir por los capitalistas? Nunca”.

Los eslóganes muestran un pensamiento a favor de Mao. Los jóvenes hablan de un “descenso del consumo” debido al estancamiento de los salarios. Ellos se autonombran “esclavos asalariados”, “ganado corporativo” y “perros de horas extras”. Muchos de esos jóvenes quisieran ser holgazanes o como ellos dicen tang ping (acostarse). Los cinco volúmenes de Las obras selectas de Mao Zedong han vuelto a ser populares, donde más se han leído es en la Universidad Tsinghua en Pekín. Jóvenes como Mukangcheng ven en Mao una salvación a su realidad.

Mukangcheng utiliza una cuenta de correo electrónico llamada “Left Left” y publica sobre los altos precios de la carne de cerdo y la falta de dinero para pagar sus recibos de teléfono. Él visitó la sede del primer congreso nacional del Partido Comunista de Shanghái en 2018 y escribió en el libro de visitas “¡Nunca olvides la lucha de clases!”. Otras personas que leen a Mao lo ven como un maestro. Otros usuarios a menudo usan la frase de Mao “¿Quiénes son nuestros enemigos? ¿Quiénes son nuestros amigos?” “Esa es una cuestión de primera importancia para la revolución”. Muchas personas ven a los capitalistas como sus mayores enemigos y a Jack Ma (fundado de Alibaba) como el mayor objetivo de su ira. Ellos se burlan de los comentarios de Jack donde apoya la cultura del trabajo 996 y los negocios.

Jóvenes como Xu Yang piensan que personas como Ma deben ser eliminadas. Los llamamientos en internet contra los capitalistas no son censurados. Él quiere estudiar diseño de moda en la universidad y es un creyente del pensamiento de Marx, Engels, Lenin, Stalin y Mao. El sentimiento antisistema es tanto de jóvenes maoístas como de radicales, quienes cuestionan la profundización de la desigualdad social. Todos ellos se cuestionan por qué los que antes eran el objeto de la dictadura ahora están en la cima.

En 2020 Xu buscó con ayuda de un software especial datos ocultos que habían sido censurados y descubrió que el gobierno chino aplastó iniciativas activistas que ayudarían a trabajadores a organizar sindicatos y a pequeños movimientos a favor de derechos laborales. Xu cree que la burocracia y el capital están muy integrados.

El gobierno es cauteloso y ya ha comenzado a censurar mensajes maoístas. Un artículo que tuvo mucha difusión mencionaba que era poco probable que la revolución de Mao tuviera éxito en la actualidad debido a la vigilancia del gobierno y la verificación de antecedentes. Xu comenta que la gente debe tener cuidado cuando hable de temas como el maoísmo porque podría ser desaparecida.