La empresa criminal. Por qué las corporaciones deben ser abolidas.

Cita: 

Tombs, Steve y David Whyte [2016], La empresa criminal. Por qué las corporaciones deben ser abolidas, Barcelona, Icaria, 208 pp.

Fuente: 
Libro
Fecha de publicación: 
2016
Tema: 
Las empresas en el neoliberalismo
Idea principal: 

El crimen corporativo omnipresente

La Junta de Recursos del Aire de California (CARB) emprendió pruebas para resolver las dudas que existían sobre las mediciones de emisiones contaminantes de los coches Volkswagen. La CARB encontró irregularidades y se lo anunció a Volkswagen y a la Agencia de Protección Medioambiental (EPA), lo que demostró que existía un crimen corporativo. Volkswagen instaló un software que permitía manipular los datos de emisiones de sus carros. El software podía detectar cuando el automóvil se encontraba en un banco de pruebas y cambiaba de posición para reducir al mínimo las emisiones de óxido de nitrógeno.

VW admitió el 4 de noviembre del 2015 que los dispositivos manipulados también se instalaron en motores de gasolina y enmascararon las emisiones de CO2, el software también se instaló en marcas como Porsche, Audi, SEAT y Skoda. Los delitos de Volkswagen incluían fraude organizado para enmascarar la dispersión de NOx y de CO2. VW siguió vendiendo autos pese al escándalo. Los técnicos y Bosch habían advertido sobre las irregularidades desde antes de 2015. El investigador André Spicer señaló que VW llevaba montando dispositivos defectuosos en sus coches desde 1973. Los motores de GM estuvieron envueltos en una demanda en 2014 debido a que tenían unos interruptores de arranque defectuosos.

Todas las empresas terminan poniendo el beneficio por delante de la salud humana o el interés general. El impulso de cometer delitos y causar daño a expensas del consumidor y la población es característico de las estructuras políticas y jurídicas que dan vida a la corporación. Milton Friedman defendió a Ford desde una lógica de mercado y argumentó que el valor de la seguridad del coche deben decidirlo las partes directamente involucradas en la compra y uso del coche. En todos los casos analizados se ocultó al público, a los consumidores y a los propietarios de vehículos información que pudo haber salvado muchas vidas. Todos ellos protegieron su reputación y su posición en el mercado.

VW realizó un fraude estratégico cuando presentó sus coches como amigables con el medio ambiente y los gobiernos apoyaron el libre mercado subsidiando y exentando de impuestos a los coches diésel. Las corporaciones cometen delitos y luego mienten para que no sean conocidos. El hecho de que VW entrara a un mercado amigable con el medio ambiente influía en las elecciones del consumidor. VW tienen una posición dominante en el mercado del automóvil y eso ayudaría a que no tenga perjuicio en el precio de las acciones y que los daños a largo plazo sean mínimos, dado que el mercado funciona como un oligopolio.

El caso de VW ilustra que la corporación moderna puede ser entendida como un dispositivo criminógeno y externalizador. Criminógeno porque viola la ley de forma calculada y como parte de su modus operandi; y externalizador porque las corporaciones socializan los costes reales de producción. La corporación no puede reformarse y la destrucción del planeta sólo se podrá evitar frenando el poder político y económico de la corporación. La tarea política más importante en este caso sería la abolición de la corporación y los fundamentos económicos, políticos y jurídicos que la sostienen.

Con todos ustedes: la empresa criminal

Las empresas tienen un papel dominante en la vida cotidiana de las personas porque suministran la comida, la ropa, medios de comunicación y las películas. Ellas también producen los químicos contaminantes y los fármacos. Las empresas tienen tanto protagonismo en la vida humana que su existencia aparece como algo natural. El dominio del sentimiento de necesidad generado en las personas hacia las empresas se basa en el efecto sinóptico del poder corporativo. La empresa proyecta su imagen en sentido inverso del panóptico. El principio sinóptico sugiere que las personas deben disciplinarse en torno a una forma concreta de poder cuando ellos mismos miran a las personas poderosas en vez de ser observados por ellos. Las empresas son un foco de atención y deseo por su propaganda.

La mayoría de los gobiernos del mundo acepta que la empresa es la mejor forma de organizar las producción y distribución de bienes y servicios en el mundo contemporáneo. El principio general hegemónico en la política contemporánea es que las corporaciones alcancen por sí solas el equilibrio entre crecimiento económico y bienestar social. Los problemas que son causados por las empresas no son daños colaterales, sino que son vistos como funciones necesarias. El mundo puede existir sin empresas y además las empresas pueden ser transformadas debido a que son totalmente dependientes de la actividad estatal relacionada con el derecho, la política y la ideología. El desafío de las corporaciones es necesario.

El dominio corporativo

Las economías de las corporaciones son tan grandes que pueden compararse con las de un estado-nación. Varios investigadores han intentado demostrar que el periodo que va de 1930 hasta el siglo XXI, las políticas neoliberales han servido para consolidar una estructura favorable a la acumulación de beneficios y la expansión de la influencia política y social de las grandes empresas. La concentración del poder corporativo se ubica en el centro de la globalización neoliberal. Los oligopolios se benefician por una ideología basada en la necesidad que tienen las empresas de operar a una escala donde puedan competir a nivel mundial.

Un estudio del Instituto Federal de Tecnología suizo muestra cómo un conjunto de bancos y entidades financieras posee una parte amplia de la economía global. El triunfo de las economías de escala concentra más riqueza en manos de menos entidades y la mayor parte de las inversiones que viajan de los países más ricos a los más pobres consisten en capitales empleados en adquisiciones y fusiones. La permanente concentración del mercado tocó techo durante 2006 y 2007. Weissman señala que la fusión-manía dejó ver cómo todos los sectores quedaban bajo dominio de un pequeño número de actores.

La mayoría de las áreas clave de la actividad económica están oligopolizadas. Las tiendas de Wal-Mart están construidas por una de las tres compañías acereras que dominan el mercado global. El mercado de servicios financieros también está organizado como otro poderoso oligopolio. Las cuatro grandes empresas de comercio del Reino Unido (Tesco, Asda, Sainsbury’s y Morrison) han construido grandes negocios globales con éxito. Los bufetes jurídicos más importantes de Reino Unido son el centro de una élite empresarial. Las nueve firmas legales más importantes de Reino Unido ejercen un gran poder a nivel global.

Empresa eficiente versus empresa criminal

El sistema basado en grupúsculos elitistas y omnipotentes constituye un capitalismo basado en una competencia que no es sana y en un sistema cerrado a los negocios. El capitalismo oligopolista no tiene una buena relación con las reglas sobre el funcionamiento del sistema. En los libros sobre teorías del capitalismo como sistema de producción y organización social idealizan la competencia entre actores económicos, sin embargo, en la práctica no es así. Los teóricos liberales de la economía política del siglo XVIII no encuentran relación entre lo que en teoría es el libre mercado y en la forma empresarial del siglo XXI.

Las empresas suelen crecer debido a las fusiones que hacen debido a que las economías de escala rinden más rápido de esta forma que por expansión interna y porque ponen sus activos en manos de los mejores gestores. La eficiencia de las grandes empresas a menudo se toma como medida de su contribución social y de su responsabilidad. La eficiencia empresarial tiene dos importantes puntos donde se destaca la relación entre concentración de poder y producción de daños. El primero señala que la apología neoliberal de la eficiencia ignora las externalidades y el segundo dice que las corporaciones son autónomamente eficientes. El segundo de ellos se refiere a que la eficiencia económica reside fuera de la infraestructura o asistencia estatal.

Externalizando crímenes y daños

Las empresas no se encargan regularmente de los daños que causan debido al sistema contable que tienen, el cual privilegia costes y beneficios. Los propietarios u operadores suelen encargarse de una parte mínima de la responsabilidad. Esto provoca que las empresas actúen como “máquinas de externalizar”. La ilusión de separación formal del poder burocrático entre estados y empresas se olvidó cuando los gobiernos del mundo intervinieron para poder salvar a sus bancos.

Los estados-nación han demostrado ser quienes garantizan las condiciones políticas y materiales para que haya acumulación de capital global. Hay quienes dicen que ni el estado-nación está limitado, ni la desregulación es necesaria en la economía política internacional. Los crímenes y daños son consentidos por los gobiernos. El origen de esos crímenes y daños está en la persecución de un “interés común” estatal-corporativo. El estado ideal debería garantizar seguridad a su población, un buen cumplimiento de la ley y un buen funcionamiento del sistema económico y financiero.

La visión neoliberal considera que la intervención estatal excesiva puede ser peligrosa para el funcionamiento racional del mercado. Los estados suelen distribuir de manera ineficiente los recursos. La ayuda estatal es solicitada cuando hay crisis, se necesita liquidez en los mercados y que se rescaten a las empresas que lo necesiten. El sector de la construcción goza de grandes subsidios públicos. El dominio de la corporación oligopolística se debe a una estrategia que supera cualquier obstáculo.

“Regulación” - ¿Dónde el estado se encuentra con el mercado?

Todos los gobiernos vendieron a privados cientos de empresas de propiedad pública entre 1979 y 1997. Las industrias británicas que se privatizaron fueron la de aeronáutica, telecomunicaciones, gas, electricidad, agua, navieras, fletes y puertos, carbón, ferrocarriles y energía atómica. La idea de desregulación se presentó como determinada económicamente por un desarrollo global del neoliberalismo que supuestamente se llevó a cabo de forma natural. La desregulación y la privatización han visto un cambio en el papel del gobierno, quien ha pasado de ser el proveedor directo de servicios a quien dirige la construcción y regulación de los mercados.

El auge neoliberal de Reino Unido fue una falsa retirada del estado, sólo fue una estrategia para alcanzar la hegemonía. Ningún discurso o teoría justifican ni explican los crímenes y daños que cometen las empresas. La contracción del estado producto del neoliberalismo no es lo mismo que el anti-estatismo usado como dispositivo hegemónico. El periodo de 1990-2020 no ha sido una época de desregulación debido a que se han manifestado dos desarrollos políticos en materia legislativa que son la vía penal y la administrativa. La desregulación es insuficiente para describir las relaciones estado-mercado porque la actividad de las corporaciones tiene lugar bajo regulación estatal.

La empresa criminal. Panorama

El libro estudia y analiza a la corporación, la cual se refiere a las estructuras legales que dotan a la empresa de la capacidad para actuar como sujeto político y económico. El objeto del libro es el orden general de normas y prácticas que da forma a todas ellas. El eje argumental del libro es una interdependencia entre estados y corporaciones que debe ser el punto de partida para comprender la producción de criminalidad. En las sociedades industriales la seguridad social y las pensiones fueron garantizadas desde el sector público por poco tiempo y en el siglo XXI las personas dependen del producto de años de inversión en bolsa.

Otra clave en el libro es la ubicuidad corporativa, que se muestra cuando algunas empresas privadas suplantan al “estado de la protección social” en las funciones de regulación de otras empresas. En el futuro se espera que las corporaciones jueguen un papel más importante en la vida de las personas La empresa moderna es una invención relativamente reciente. El mundo puede vivir sin corporaciones.

Datos cruciales: 

1. Los coches de Volkwagen volvían a la posición normal cuando estaban fuera del banco de pruebas y se multiplicaba hasta 40 veces el límite legal de emisiones.

2. McHugh argumenta que el número de vehículos afectados por el software estaba en aumento constante, se tenía registro de 700 000 coches en España en 2015.

3. VW admitió en 2016 que su ex director general Martin Winterkorn recibió en 2014 un memorándum donde se detallaba que algunos coches de la empresa producían hasta 35 veces más emisiones de óxido de nitrógeno de lo permitido.

4. GM pagó indemnizaciones por 124 muertes debido a los defectos de sus motores.

5. BMW, Chrysler, Ford, Honda, Mazda, Nissan y Toyota anunciaron en 2014 la retirada de vehículos por problemas en sus bolsas de aire y la demanda afectó a 40 millones de vehículos en todo el mundo.

6. El Centro para la Seguridad del Automóvil (Center for Auto Safety) documentó 185 accidentes fatales por fallas en el Jeep Cherokee y dejó un saldo de 270 muertes y varios heridos.

7. El caso del “Ford Pinto” salió a la luz en 1977 y la empresa optó por no retirarlos si únicamente morían 180 personas por colisiones traseras, el coche salió del mercado pero siguió en uso durante 10 años.

8. Las estimaciones oficiales muestran que tres de los casos señalados han cobrado más de 20 veces el número de vidas que el Ford Pinto.

9. El gobierno español concedió ayudas de 1 000 euros para la compra de cada “coche diésel limpio”.

10. El Banco Europeo concedío préstamos a VW de 4 600 millones de euros desde 1990.

11. VW buscaba el dominio del mercado verde a pesar de ser el segundo fabricante de automóviles del mundo después de Toyota, con casi 600 000 empleados. VW participaba de esta manera en un oligopolio mundial en donde cinco fabricantes producen más de la mitad de los coches del mundo.

12. Los 11 millones de coches de VW vendidos que emiten partículas mortales de diésel y NOx, no serán señalados como causantes del daño a la salud de las personas porque ocultaron ser tan contaminantes.

13. Un informe reciente de Global Trends muestra que de los 150 entes económicos más grandes del mundo, 59% son empresas y 41% son estados. El informe también muestra que la facturación anual de Ford es superior al PIB de Nueva Zelanda, la de Shell mayor a los de Pakistán y Bangladesh juntos. Wal-Mart sería la economía número 22 del mundo si fuese un estado.

14. Adolf Berle estimó en 1962 que “600 grandes compañías controlan hoy entre dos tercios y tres cuartas partes de la producción, y llevan haciéndolo unos treinta años”.

15. El estudio del Instituto Federal de Tecnología suizo revisó la relación entre los propietarios de 37 millones de empresas e inversores en todo el mundo, concluyendo que 43 060 empresas transnacionales se encuentran conectadas por una compleja red de propiedades compartidas. Del análisis se dedujo que un núcleo de 1 318 compañías conectadas por sus accionistas mayoritarios controlaban 20% de la facturación global. 147 “súper-corporaciones” de este grupo controlaban 40% de la riqueza generada dentro de esa red.

16. 85% de la inversión directa extranjera fue empleada en fusiones de empresas y comprar de negocios a principios de los años 2000.

17. Un estudio sobre el dominio del mercado de la producción agrícola del siglo XXI concluyó que “cuatro firmas controlan 58.2% de las semillas, 61.9% de los agroquímicos, 24.3% de los fertilizantes, 53.4% de los productos farmacéuticos para animales y, entre la genética animal, 97% del ganado avícola y dos tercios del porcino y bovino”. En cuanto a la industria alimentaria, “seis multinacionales controlan 75% de la investigación privada sobre cultivos, 60% del comercio de semillas y 76% de las ventas globales de agroquímicos”.

18. Casi todas las áreas del negocio de la alimentación se encuentran bajo control de oligopolios – con niveles de concentración en las cuatro mayores multinacionales de hasta 80% en algunos sectores del mercado agroalimentario.

19. La producción oligopólica controla los principales productos agrícolas – incluidos cereales, aceites, café, cacao y plátano. Tomando este último ejemplo, cinco compañías controlan 80% de la producción y el comercio global de plátano, a su vez el cuarto cultivo del mundo, después del arroz, el trigo y el maíz.

20. La concentración amplía el diferencial entre precios mundiales y locales en mercados de productos como el trigo, el arroz y el azúcar, que se multiplicaron por 2 entre 1974 y 1994.

21. Los “cuatro grandes del Reino Unido", aquellas corporaciones más importantes en el comercio (Tesco, Asda, Sainsbury’s y Morrison) acaparan casi tres cuartas partes del mercado.

22. Wal-Mart vende entre 30 y 50% de los productos consumidos en Estados Unidos, así que es una empresa que domina el mercado.

23. La fusión-manía en Estados Unidos redujo a la mitad el número de bancos comerciales en 25 años. En 2008 tras el crack financiero, “cinco bancos se quedaron con más de la mitad de los activos que eran controlados por los mayores 150”. Esos bancos poseen 97% de los derivados financieros.

24. Las cuatro corporaciones de comercio más grandes de Reino Unido se encargan de auditar 90% de las 350 compañías del índice bursátil de referencia de la Bolsa de Valores de Londres (FTSE) y gestionan negocios de consultoría. Los miembros de estas empresas están sobre representados en 100 consejos de administración del FTSE y son una pieza central de la regulación corporativa.

25. Un ejemplo de que los costes sociales de la actividad corporativa superan ampliamente los beneficios declarados es el informe de Global Trends el cual demostró que 44 de las mayores compañías del planeta facturan 11% del PIB mundial empleando 0.4% de la población activa.

26. En Reino Unido el rescate bancario después del crack de 2008 fue de 550 mil millones de libras entre 2008 y 2009.

27. New Economics Foundation dice que los subsidios a los bancos demasiado grandes para caer superan los 30 000 millones de libras en 2011 y 2012.

28. Mair y Jones anunciaron que la Iniciativa Financiera Privada ha valorizado una transferencia del sector público al privado que beneficia a las constructoras con tasa de retorno de capital que superan 60%.

29. El impuesto base al consumo de energía asciende a 1 mil millones de libras y los subsidios directos del gobierno suman 10 000 millones.

Nexo con el tema que estudiamos: 

En las últimas tres décadas del siglo XX comenzó a transformarse el orden mundial y el neoliberalismo se convirtió en un modelo llamativo para casi todos los gobiernos del mundo; su penetración fue tan grande que incluso algunos países con gobiernos que se oponían al capitalismo decidieron unirse al modelo, poniendo sus objetivos económicos antes que su ideología política y sus principios. Las primeras dos décadas del siglo XXI fueron clave para el desarrollo y evolución del neoliberalismo, las corporaciones se han vuelto sujetos importantes en el sistema internacional y en la gobernanza mundial.

Los autores proponen una tesis relevante al concebir la comisión de crímenes de todo tipo como una conducta intrínseca a la actividad de las empresas. Comportamiento que se ha acentuado en los años recientes. En efecto, las empresas se han expandido inmensamente al grado de superar económicamente el PIB de algunos países. La competencia también se ha incrementado entre ellas y eso las ha orillado a cometer crímenes y a minimizar estándares de calidad en sus productos con tal de incrementar sus ventas. La competencia sigue y sigue entre las corporaciones, sin embargo no es posible decir que son sujetos protagónicos en el sistema internacional, puesto que de acuerdo con los autores, los Estados siguen influyendo en gran medida porque son ellos los que tienen la facultad de aplicar restricciones a empresas extranjeras y con ello cerrarles mercados, también son ellos los que tienen la capacidad de intervenir en la economía de su nación y salvarla con ayuda de políticas fiscales, económicas y monetarias en caso de crisis.

Esta perspectiva fortalece nuestra indagación sobre el vínculo entre capitalismo y autoritarismo y aporta elementos para la crítica de la corporación, que lejos de ser vehículo de la eficiencia, es un sujeto concentrado en la obtención de ganancias aún y cuando ello implique la comisión de crímenes.