Alguna vez North China Daily News fue el edificio más alto de Shanghái pero no durante mucho tiempo ya que, los rascacielos se pusieron de moda antes de que los comunistas tomaran el poder en 1949 y convirtieran a China en líder mundial gracias a ellos.

Posteriormente en 2015 se inauguró el edificio más alto de China con 632 metros en Lujiazui, la calle del muro de Shanghái, al otro lado del río Huangpu. Los funcionarios chinos lo llaman “la Torre de Shanghái”, símbolo del poderío de la capital financiera.

Esta estructura de 128 pisos, diseñada por una empresa estadounidense, pretende reflejar la forma retorcida de un dragón. Es el edificio de varias firmas financieras chinas y extranjeras que apuestan por el ascenso de China. JP Morgan, banco estadounidense, ocupa cuatro pisos; asimismo, el partido comunista también se encuentra ahí.

En 2018 Xi Jinping visitó la Torre de Shanghái y se detuvo en el piso 22 donde se exhibía un eslogan en el que pedía a los miembros del partido que se atuvieran a los ideales que inspiraron a los activistas hace un siglo: “Don’t forget the original intent, keep the mission firmly in mind, struggle forever., “No olvides la intención original, mantén la misión firmemente en mente, lucha para siempre”.

Estas palabras aparecen en varios carteles publicitarios en toda China la parte de “intención original” procede de un poema de la dinastía Tang. Xi dice que significa trabajar por el bienestar del pueblo y el rejuvenecimiento de China.

Siempre se ha dicho que, en un lugar de trabajo con tres o más miembros del partido, deberían formar una sucursal o, con 100 o más miembros, un comité. Pero a algunas empresas no les gustaba la idea y el partido no siempre insistía en ello.

Actualmente hay 40 centros de construcción del partido que cubren las más de 280 torres del distrito financiero. El año pasado se empezó a trabajar en la creación de otro nivel de control, con un comité de administración de edificios dirigido por el partido en cada propiedad comercial de varios ocupantes. Estos comités incluyen a los jefes de partido de las empresas inquilinas, así como a la policía. Los medios de comunicación del Estado dicen que se está inyectando un "gen rojo" en la gestión de la propiedad.

En las empresas privadas se ha hecho lo posible para tener la presencia del partido. Desde que Xi asumió el poder, la proporción de empresas que cuentan con organizaciones del partido ha aumentado de poco más del 50% a más del 70%.

Hay empresas extranjeras ansiosas y las que operan en sectores importantes para la economía de China, incluidos los servicios financieros, suelen formar empresas conjuntas con compañías estatales. En 2017, los jefes del partido de algunas empresas estatales, presionaron a sus socios extranjeros con el fin de que estos aceptaran una redacción en los estatutos de sus empresas que garantizara un papel de gestión para el partido. Por lo que las empresas están obligadas a tener unos estatutos aprobados oficialmente, de no ser así, el incumplimiento se puede considerar como delito.

Una extraña salida

En medio de la protesta de inversores extranjeros, los funcionarios del partido se echaron para atrás y dejaron de presionar a las empresas extranjeras para que especifiquen el papel del partido en la gestión de las empresas conjuntas. En cuanto a las empresas de propiedad extranjeras, la cámara dice que no ha oído hablar de que el partido tenga una función de gestión empresarial en ninguna de ellas (dato crucial 1).

Por otro lado, las empresas privadas chinas proporcionan 80% de empleos urbanos. Para garantizar el control de la sociedad china, el partido quiere aumentar su influencia en estas empresas, tanto en los consejos de administración como entre los empleados ordinarios.

Grupo Hodo, fabricante familiar de ropa y textiles con 30 000 empleados en la provincia de Jiangsu ha sido muy promocionado. Xi ha elogiado sus esfuerzos de construcción del partido. Zhou Haijiang, el director ejecutivo y secretario del partido. Asimismo, El jefe del departamento de recursos humanos se encarga de los asuntos organizativos del partido, el responsable del desarrollo de la marca es el jefe de propaganda del partido y el presidente del consejo de supervisión de la empresa es el jefe de disciplina del partido.

En 2018, los grandes empresarios extranjeros que asistieron al Foro de Desarrollo de China, se sorprendieron por la decisión de sus anfitriones de hacer alarde del papel del partido en materia económica. El Sr. Zhou, de Hodo contó a la audiencia sus hazañas en la construcción del partido y cantó las alabanzas de lo que los funcionarios llaman ahora un "sistema empresarial moderno con características chinas".

El modelo Hodo es atractivo ya que en aproximadamente 50% de las empresas privadas con sucursales del partido, el jefe es ya un miembro del partido. Asumir el papel adicional de secretario es fácil, ya que serlo puede abrir puertas con la oficialidad. Asimismo, los miembros del partido en sus empresas saben a quién deben ser leales para mantener su empleo: la empresa.

En la Torre de Shanghái, la visita de Xi ha sido un gran impulso. Cada mes, una empresa lo visita para que le ayude a abrir una sucursal. Asimismo, ha impulsado la demanda de afiliación al partido.

La construcción del partido en Lujiazui también consiste en controlar a los miembros. Se trata de una aplicación que muestra a los miembros cuántos puntos han obtenido por su trabajo voluntario, por participar en sesiones de estudio político o por presentar "informes de pensamiento". Si obtienes menos de 60 puntos en un año, puedes ser convocado a una con un funcionario del partido, o ser enviado a una escuela del partido para su reciclaje.

A pesar de ser aterrador, los chinos siguen acudiendo en masa a unirse al partido. Incluso en los campus, donde las restricciones a la libertad de expresión se han hecho más estrictas bajo el mandato de Xi que en cualquier otro momento desde Tiananmen, muchos estudiantes están dispuestos a inscribirse. Esto se debe a que la afiliación puede conferir beneficios de por vida.