As China Boomed, It Didn't Take Climate Change Into Account. Now It Must

Cita: 

Myers, Steven Lee, Keith Bradsher y Chris Buckley [2021], "As China Boomed, It Didn't Take Climate Change Into Account. Now It Must", The New York Times, New York, 26 de julio, https://www.nytimes.com/2021/07/26/world/asia/china-climate-change.html

Fuente: 
Otra
Fecha de publicación: 
Lunes, Julio 26, 2021
Tema: 
El crecimiento de la economía china ligado a problemas en el cambio climático
Idea principal: 

Steven Lee Myers: es periodista y trabaja para The New York Times desde 1989, actualmente es jefe de la oficina en The New York Times en Beijing, anteriormente trabajó como corresponsal en Moscú, Bagdad y Washington cubriendo temas sobre la Casa Blanca, el Pentágono y la Secretaría de Estado en Washington.

Keith Bradsher: es el jefe de la oficina en The New York Times en Shanghai. Anteriormente se desempeñó como jefe de la oficina de Hong Kong, y como jefe de oficina de Detroit. También fue corresponsal en Washington cubriendo temas de comercio internacional y de la economía de Estados Unidos, a su vez ha sido reportero en telecomunicaciones en Nueva York y reportero de aerolíneas.

Chris Buckley: es corresponsal en jefe de China y ha vivido en China durante casi 30 años después de crecer en Sydney, Australia. Antes de unirse a The Times en 2012, fue corresponsal en Beijing de Reuters.


El crecimiento que ha tenido China durante los últimos cuarenta años ha traído consigo modificaciones en lugares donde antes había aldeas o eran tierras para cultivos, hoy en día en estos espacios hay fábricas, las cuales han atraído trabajadores, y han sacado a cientos de personas de la pobreza en la que se encontraban, sin embargo, estas ciudades ahora se enfrentan a dificultades como el cambio climático y sus consecuencias, las cuales por cierto son más difíciles de enfrentar debido a la urbanización.

Kong Feng, profesor de política pública de la Universidad de Tsinghua en Beijing solía decir que las inundaciones en las ciudades de China han sido provocadas especialmente por la urbanización, la expansión de las carreteras, los subterráneos y los ferrocarriles, todo esto desde que las ciudades comenzaron a crecer a gran escala, dando como resultado que hayan menos lugares en los cuales el agua se pueda absorber, irrumpiendo el ciclo hidrológico natural.

Las grandes poblaciones se originaron cuando los líderes chinos le restaron importancia a la resistencia climática e impusieron el crecimiento económico. Sin embargo, China ha comenzado a tomar medidas al respecto para poder lidiar con el cambio climático, convirtiendo a Xi Jinping en el primer presidente chino en hacer prioridad esta problemática a nivel nacional; en los últimos veinte años China ha quintuplicado las áreas verdes, e introdujo un programa piloto llamado “ciudades esponja”, ya que absorben mejor las lluvias. Un programa similar a las “ciudades esponja”, fue el implementado en Estados Unidos llamado “desarrollo de bajo impacto”, en el cual se llevaría el agua de las zonas urbanas hacia parques y lagos, para que el agua fuese absorbida o reciclada.

El presidente chino también se comprometió a reducir las emisiones de gas y neutralizar las emisiones de carbono para el año 2060, sin embargo, podría ser tarde, debido a que estamos viendo las consecuencias del cambio climático actualmente, como las ciudades en China que se están hundiendo, debido a la construcción apresurada de infraestructura mal construida, que no cuenta con el drenaje necesario para desviar la lluvia de las tormentas.

Las consecuencias del cambio climático que cada vez se agravan más, pueden simbolizar un fracaso para el Partido Comunista, ya que el poder político chino se caracteriza por su capacidad para dominar los desastres naturales.

Por otro lado, la urbanización también ha beneficiado a miles de personas que anteriormente tenían una menor defensa contra las inundaciones que suelen ser muy recurrentes, reduciendo la cifra de afectados a cientos de miles y no a millones de personas.

El decano de la Escuela de Arquitectura del Paisaje de la Universidad de Pekín, Yu Kongjian, mencionó que desde 1980 China ha recurrido a diseños occidentales que no se ajustan a las necesidades y condiciones del país.

China tiene planeado construir nuevo drenaje y crear nuevas áreas verdes, pero por otro lado, muchas personas aún cuestionan la efectividad de las “ciudades esponja”, surgiendo argumentos a favor, ya que las esponjas absorben el agua lentamente y tienen cierta capacidad, que estas ciudades nunca estuvieron destinadas para lluvias muy fuertes como las que suelen haber en Zhengzhou, sin embargo, también se lamenta que el gasto en el proyecto no haya traído consigo los resultados esperados. A pesar de ser una buena alternativa, todavía está en duda que esta opción sea la adecuada para combatir la problemática.

Un reto para China es que las fábricas que han contribuido a su crecimiento económico también son las que más contaminan, haciendo aún más difícil la tarea de reducir las emisiones de gas y reparar las consecuencias que han ocasionado.

Datos cruciales: 

1. La tormenta que inundó ciudades como Zhengzhou en China, al menos dejó 69 muertos, afectando líneas del metro, carreteras y pueblos.

2. Faith Chan, profesora de geología de la Universidad de Nottingham, China, dice que al menos existen 93 ciudades con más de un millón de habitantes.

3. En 2013, Xi Jinping prometió construir una civilización ecológica en China.

4. La población china se ha duplicado desde 2001, a aproximadamente 12.6 millones de personas.

5. En 2016, Zhengzhou fue una de las 16 ciudades elegidas para un programa piloto, en el cual se expandieron las áreas verdes para reducir las inundaciones. El nombre del programa fue llamado ”Ciudad esponja”. Se construyeron más de 3 mil millas de drenaje nuevo, se eliminaron 125 áreas las cuales tenían más probabilidades de inundarse y se implementaron más áreas verdes.

Nexo con el tema que estudiamos: 

Frente a los desastres naturales, China ha tenido que implementar medidas para contrarrestar los efectos del cambio climático, sin embargo, estos no han sido suficientes, especialmente porque la contaminación de las grandes fábricas y la industrialización acelerada.
La acción para contrarrestar estos desastres naturales depende del trabajo en conjunto tanto del estado, las empresas y la sociedad, empezando con el Estado que es el que promueve estos cambios.