A doom's doorstep: It is 100 seconds to midnight

Cita: 

Science and Security Board [2022], A doom's doorstep: It is 100 seconds to midnight, Bulletin of the Atomic Scientist, enero 20, https://thebulletin.org/wp-content/uploads/2022/01/2022-doomsday-clock-s...

Fuente: 
Otra
Fecha de publicación: 
Jueves, Enero 20, 2022
Tema: 
Diversos riesgos amenazan el futuro de la civilización humana.
Idea principal: 

El Consejo de Ciencia y Seguridad (SASB, por sus siglas en inglés) está formado por un selecto grupo de líderes reconocidos a nivel mundial que se centran específicamente en el riesgo nuclear, el cambio climático y las tecnologías disruptivas.


El cambio de liderazgo en Estados Unidos en 2020 significó una nueva esperanza para frenar la catástrofe a la que se dirige el mundo, debido a que se esperaba que la administración de Joe Biden generaría acuerdos con Rusia sobre el uso de armas nucleares y se integraría nuevamente al Acuerdo de París y al Acuerdo Nuclear con Irán. El cambio de mayor alcance es el regreso de la política pública basada en hallazgos científicos.

Sin embargo, el cambio del liderazgo no ha sido suficiente para inhibir las tendencias internacionales nucleares y ambientales. Las relaciones entre Estados Unidos, Rusia, China y Corea del Norte se encuentran tensas debido a que están modernizando su armamento nuclear y haciendo pruebas de misiles hipersónicos. Si se considera la tensión entre Rusia y Ucrania por el territorio, parece que los intentos por revivir el acuerdo nuclear de Irán han sido nulos e incluso se espera una nueva carrera nuclear. Respecto al ambiente, la brecha entre las emisiones de gases de efecto invernadero de mediano y largo plazo y las acciones para cerrarla están lejos de materializarse. A pesar del regreso de Estados Unidos al Acuerdo de París, aún no hay políticas para gestionar la crisis climática.

Por otro lado, la respuesta del mundo ante la pandemia de Covid-19 fue poco eficiente en los países pobres y en vías de desarrollo debido a los problemas con la distribución de vacunas provenientes de los países desarrollados, permitido el surgimiento de nuevas variantes del virus Sars-cov-2. "Más allá de los daños económicos y a la salud, el mundo debería concentrar sus esfuerzos en la bioseguridad y bioprotección. Además el establecimiento y la búsqueda de programas de armas biológicas marcó el comienzo de una nueva carrera armamentística biológica" (p. 2).

La Junta de Ciencia y Seguridad determinó que le mundo no es más seguro de lo que fue hace en 2020, por lo que decidió regresar el reloj de Doomsday de nuevo a 100 segundos para la medianoche. Mientras más cerca la manecilla del reloj a la medianoche, mayor es la cercanía de la humanidad del apocalipsis civilizatorio.

La cuerda floja nuclear

Las tendencias nucleares en diferentes países durante 2021 llevaron que los expertos señalen el comienzo de una nueva carrera nuclear.

Por una parte, en febrero del mismo año el acuerdo entre Rusia y Estados Unidos marcó un nuevo comienzo, ya que ambas potencias poseen 90% de las armas nucleares de todo el planeta. Joe Biden, presidente de Estados Unidos ha expresado su intención de regresar a Estados Unidos al Plan de Acción Integral Conjunto con Irán (JCPOA, por sus siglas en inglés) e invitar a China a unirse.

Por otra parte, Irán continúa expandiendo su almacén de uranio insistiendo en que se eliminen todas las sanciones antes de retomar las conversaciones con Estados Unidos sobre el JCPOA. Países vecinos de Irán, como Arabia Saudita y todo el Medio Oriente, podrían verse motivados a construir armas nucleares, como India y Pakistán que se encuentran justo en ese camino. China ha iniciado la construcción de misiles balísticos intercontinentales de largo alcance, y junto con Rusia y Corea del Norte recientemente han probado armas antisatélites.

Mientras tanto, la postura de Estados Unidos parece no estar definida del todo. Una declaración firme sobre su oposición al uso de armas nucleares podría modificar la postura de otros países que se encuentran desarrollándolas, y así hacer del mundo un lugar más seguro.

Cambio Climático: palabras pérdidas y poca acción

Las negociaciones climáticas multilaterales en Glasgow en 2020 se destacaron por la presión de los países a endurecer los esfuerzos y políticas para cumplir con los compromisos de cero emisiones de gases de efecto invernadero. Pero nuevamente fueron insuficientes, pues China e India afirmaron que sus economías dejarán de utilizar carbón gradualmente hasta alcanzar las cero emisiones en 2060 y 2070, respectivamente. Sólo hubo un progreso parcial en la creación de normas de contabilidad que permitan el desarrollo de mercados internacionales de emisiones.

Otro fracaso fue la falta de compromiso de los países desarrollados en el financiamiento y desarrollo tecnológico para asegurar una transición energética con energías renovables. Todos los compromisos que hicieron los países respecto a las cero emisiones requieren acciones inmediatas y en el corto plazo, que redireccionen la inversión lejos de los combustibles fósiles; se requiere también de una modernización masiva en la infraestructura existente y un cambio en el uso de la tierra y las prácticas agrícolas.

El cambio de política entre Donald Trump y Joe Biden es la implementación de políticas basadas en hallazgos científicos, la cooperación internacional y el reconocimiento del cambio climático como una crisis de nuestra generación. No obstante, el progreso de Estados Unidos en materia ambiental es frágil y con muchas restricciones en el camino. El enorme paquete de infraestructura aprobado en 2021 resultó ser decepcionante en materia ambiental con respecto a lo que el presidente planteó, pero se debe a que Biden está lidiando con un Congreso dividido.

La crisis climática ha animado a la sociedad civil a manifestarse y protestar para exigir respuestas ambientales eficientes e incluyentes. Principalmente estas manifestaciones se han llevado a cabo en la Semana Climática en Nueva York, en la COP 26 en Glasgow y en la Cumbre del G7, y han sido realizadas por jóvenes que se encuentran preocupados por el futuro de sus vidas.

La creciente amenaza biológica para la civilización

Por muchos años la inversión de Estados Unidos en la defensa de amenazas biológicas fue muy poca o incluso nula. La pandemia de COVID-19 fue subestimada en un inicio por lo que sus consecuencias fueron muy profundas para diferentes sectores de la población. Por lo anterior muchos países se encuentran enfocados en reducir el impacto de la pandemia, sin embargo, existen demasiadas amenazas biológicas en el mundo; prevenirlas y mitigarlas requiere grandes esfuerzos en materia de investigación e inversión pública.

En 2021 el Departamento de Estado de Estados Unidos declaró que Rusia y Corea del Norte tienen activos diversos programas de armas biológicas, para después expresar su preocupación sobre los programas de investigación biológica de doble uso de China e Irán, puesto que grupos terroristas como Al Qaeda e ISIS mantienen su deseo de adquirir o construir sus propias armas biológicas.

Por otro lado,en muchos países diversas corporaciones se encuentran invirtiendo en ciencia biológica, biotecnología y la combinación entre ciencia y tecnología, en el cual la biología trabaja con otras áreas de la ciencia. Por lo anterior la innovación biológica es una industria que se está moviendo rápidamente en favor de los intereses de los grupos terroristas y corporativos.

Los científicos de Estados Unidos y Suiza descubrieron en 2022 una revolucionaria herramienta genética que resulta ser lo suficientemente económica para promover la inversión en pruebas genéticas y tecnologías de células madre adultas. “Otros países y actores no estatales están explorando formas de crear supersoldados, personalizar la medicina, aumentar el rendimiento, mejorar la terapia genética humana y sintetizar la biología. Innovaciones como la biología sintética han creado nuevas áreas de descubrimiento, superando la actual salud pública y de seguridad” (p. 7).

Tecnología disruptiva en la era de la desinformación

“La administración de Estados Unidos ha hecho demasiado por restablecer el papel de los científicos en la formulación e implementación de la política pública y para disminuir deliberadamente la confusión y el caos que emana de la Casa Blanca” (p.7). No obstante, la práctica de la desinformación ha echado raíces dentro del Congreso y parece manifestarse en formas bastante peligrosas.

Algunas fracciones del Congreso continúan negando que Joe Biden haya ganado legítimamente las elecciones presidenciales de 2020. Con el tema de la pandemia existen tendencias similares, lo que inmediatamente disminuye la capacidad de las autoridades de salud para aumentar las tasas de vacunación y promover el uso de cubre bocas y el distanciamiento social como medidas de precaución. Mucha de esta información se propaga a través de redes sociales que toman ventaja de la psicología y procesos cognitivos de los humanos.

Otro gran riesgo para considerar son los ataques cibernéticos que han recibido empresas como Microsoft y Colonial Pipeline; esta última tuvo que pagar 4.4 millones de dólares para que el sistema volviera a funcionar.

La buena noticia es que la agenda de Biden ha llevado lejos las acciones para mejorar la ciberseguridad. El Grupo de Trabajo Abierto de la ONU y el Grupo de Expertos Gubernamentales han llegado a un consenso sobre normas cibernéticas de comportamiento.

Finalmente, las tensiones espaciales militares entre Rusia y Estados Unidos se han reactivado debido a que el primer país realizó una prueba de misiles que destruyó uno de sus propios satélites y creó una nube de basura que orbita cerca de la Estación Internacional Espacial en noviembre de 2021.

“Los informes de prensa han sugerido que el Mando Espacial estadounidense está a punto de revelar una nueva arma antisatélite. Por otra parte, se ha informado de que funcionarios estadounidenses de los departamentos de Estado y Defensa están redactando un borrador para una resolución vinculante de la ONU sobre el comportamiento responsable en el espacio. Si se aprueba, esta redacción podría reducir la probabilidad de que se produzcan incidentes espaciales de que se produzcan incidentes espaciales” (p. 8).

Pasos prácticos para alejar al mundo de la catástrofe y dirigirlo hacer el mundo seguro

Los líderes de las naciones más ricas no han actuado con la velocidad y voluntad necesarias para gestionar las amenazas que enfrenta la humanidad. La decisión de mantener el reloj del Doomsday en segundos para la medianoche es una clara advertencia para el mundo de que debemos apartarnos de la puerta de la perdición.

- Rusia y Estados Unidos deben acordar reducir la dependencia de las armas nucleares, limitando sus funciones, misiones y plataformas, y reducir los presupuestos en consecuencia. En particular, Estados Unidos debe persuadir a sus enemigos y aliados de mantener la estabilidad nuclear.

- Estados Unidos y el resto de los países deberían acelerar la descarbonización para empatar los compromisos con las acciones, además de incentivar a China a seguir patrones sustentables de desarrollo y no invertir en proyectos de combustibles fósiles.

- Los líderes de Estados Unidos y el resto de los países deberían elaborar, a través de la Organización Mundial de la Salud, programas para disminuir el riesgo biológico de todo tipo y construir un sistema de vigilancia internacional para tener un mejor control de las interacciones entre animales y humanos.

- Rusia debería reincorporarse al Consejo OTAN-Rusia y colaborar en la reducción de riesgos y evitar la escalada.

- Corea del Norte debe codificar su moratoria sobre las pruebas nucleares y los misiles de largo alcance.

- Irán y Estados Unidos deberían volver al pleno cumplimiento del Plan de Acción Integral Conjunto y iniciar nuevas conversaciones más amplias sobre la seguridad seguridad de Oriente Medio y la limitación de los misiles.

- Los inversores privados y públicos deberían reorientar los fondos de los proyectos de combustibles fósiles a inversiones respetuosas con el clima.

- Los países más ricos del mundo deberían proporcionar más apoyo financiero y cooperación tecnológica a los países en desarrollo para que emprendan una fuerte acción climática

- Los gobiernos, empresas tecnológicas, expertos y organizaciones mediáticas deberían coordinarse para formular e implementar políticas para combatir la desinformación.

- Las inversiones de recuperación de COVID deberían favorecer los objetivos de mitigación y adaptación al clima en todos los sectores económicos y abordar toda la gama de gases de efecto invernadero, incluidas las inversiones de capital en el desarrollo urbano, la agricultura, el transporte, la industria pesada, los edificios y electrodomésticos, y la energía eléctrica.

Nexo con el tema que estudiamos: 

La crisis climática junto con los conflictos militares-espaciales demandan no sólo la cooperación y formulación de políticas para asegurar el bienestar de toda la humanidad en su conjunto, sino el compromiso de las autoridades políticas, ambientales y de salud para materializar todos los programas y y de verdad alcanzar los objetivos que en ellos se establecen. Sin embargo, la iniciativa debe provenir de las economías más grandes y con mayor capacidad diplomática y militar para negociar y persuadir el resto de las economías avanzadas en favor de una transición energética sustentable e integral y en contra de atentados militares.