The climate disaster is here

Cita: 

Milman, Oliver [2021], "The climate disaster is here", The Guardian, London, 14 de octubre, https://www.theguardian.com/environment/ng-interactive/2021/oct/14/clima...

Fuente: 
Otra
Fecha de publicación: 
Jueves, Octubre 14, 2021
Tema: 
Las consecuencias del cambio climático ya son evidentes alrededor del mundo. Sequías, inundaciones, olas de calor e incendios son cada vez más comunes.
Idea principal: 

Oliver Milman es un periodista estadounidense para The Guardian interesado en temas medioambientales y del Antropoceno, autor del libro The Insect Crisis.


Que la temperatura media global aumente 1.5 o incluso 2°C parece poca cosa, sin embargo, esto desatará irreversibles catástrofes climáticas. Desde la era preindustrial el mundo ya se ha calentado 1.2°C, lo que ocasiona que el océano absorba gran parte de este calor (dato crucial 1). Sabemos que este calentamiento tan acelerado se debe a la quema de combustibles fósiles, desde 1970 la temperatura global ha aumentado más rápido que en cualquier otro periodo comparable. Por esta razón, en el Acuerdo de París de 2015 cerca de 200 países acordaron tomar medidas para limitar el aumento de la temperatura global por debajo de 2°C, incluso 1.5°C los países más comprometidos que comprenden que este medio grado hará la diferencia para países como Maldivas.

Olas de calor

Incluso con el calentamiento actual ya existen consecuencias desastrosas. En 2021 hubo inundaciones terribles en China y Alemania, incendios sin precedentes en Canadá, California y Grecia, y lluvia en vez de nevada en Groenlandia por primera vez. Después de que debido a la pandemia de Covid las emisiones de gases de efecto invernadero habían disminuido, en 2021 volvieron a aumentar, lo que indica que se llegará a los 1.5°C en esta década. En este escenario, las olas de calor aumentarán entre más aumente la temperatura afectando cada vez a más población en el mundo (dato crucial 2). De igual forma, los ecosistemas también sufrirán terribles consecuencias, como los arrecifes de coral (dato crucial 3).

Inundaciones

En la próxima década, las precipitaciones en el hemisferio norte se volverán mucho más severas, mientras que en el hemisferio sur aumentarán las sequías (dato crucial 4). Por otro lado, el clima más cálido ocasiona que la atmósfera albergue más agua, lo que se traduce en precipitaciones extremas. Enormes inundaciones se han vuelto regulares en ciertas partes del mundo, como en China, Alemania, el río Mississippi y Sudán. Sin embargo, la cantidad de agua terrestre disponible para abastecer a la población ha disminuido en los últimos 20 años (dato crucial 5).

Con un aumento de 3°C en la temperatura se espera que las costas de Miami, Shanghái y Bangladesh se conviertan en ecosistemas marinos debido al aumento del nivel del mar por el derretimiento de los glaciares.

Incendios

En la próxima década los incendios aumentarán en todo el mundo, pero especialmente en el hemisferio sur. En este sentido, con un calentamiento de 3°C, todo Norteamérica y Europa estarán en mayor riesgo de sufrir incendios forestales. Sin embargo, los incendios ocurridos en 2019-2020 en Australia, conocidos como Black Summer, serán “normales” con este aumento en la temperatura.

Pérdida de cultivos

El clima impredecible, con demasiada o muy poca lluvia, disminuye la cantidad y calidad de los cultivos. A nivel mundial, los eventos de sequía en los cultivos que ocurrían una vez cada década se duplicarán cuando se alcancen los 2°C. Para finales de este siglo un tercio de la producción mundial de alimentos estará en riesgo. En este sentido, prácticamente todos los aspectos de la crisis climática afectan a la producción de alimentos, por ejemplo, la irrigación de cultivos se ve comprometida por la disminución del agua subterránea o por el derretimiento de las capas de hielo. También las olas de calor, las inundaciones y las tormentas comprometen los cultivos.

A pesar de los rápidos avances en las energías renovables, los países siguen atados a los combustibles fósiles subsidiando petróleo, carbón y gas (dato crucial 6). A finales de 2021 ya se quemó 86% de las “reservas” de carbono que nos permitirán mantenernos por debajo de los 1.5°C. En este sentido, el mundo tendría que reducir las emisiones a la mitad para 2050 antes de agotar completamente las reservas. Asimismo, se considera que al superar 2.7°C gran parte del mundo se volverá inhabitable, por lo que se deben tomar medias cuanto antes, ya que reducir las emisiones hoy es mejor que hacerlo mañana y aunque las acciones están siendo demasiado lentas aún se puede actuar.

Datos cruciales: 

1. Los océanos absorben el calor equivalente a cinco bombas atómicas de Hiroshima cada segundo.

2. Con un aumento en la temperatura de 1.5°C, 14% de la población sufrirá una ola de calor cada cinco años, aumentando a un tercio si la temperatura supera 2°C. Asimismo, 4.9 millones de personas morirán debido al calor extremo.

3. Con un aumento en la temperatura de 2°C, 99% de los arrecifes de coral se disolverán y se perderá gran cantidad de hábitat para plantas y animales vertebrados.

4. Se estima que alrededor de 216 millones de personas se verán forzadas a dejar sus hogares para 2050 debido a olas de calor, sequías e inundaciones, si no se toman medidas radicales.

5. Se estima que en las próximas tres décadas cinco mil millones de personas no cuenten con un suministro de agua potable adecuado.

6. La industria de los combustibles fósiles subsidia 11 millones de dólares cada minuto.

Nexo con el tema que estudiamos: 

Es evidente que el cambio climático está provocando desastres en todo el mundo, los escenarios futuros ante el aumento de la temperatura global son alarmantes, tanto así que es evidente que a este ritmo nos dirigimos hacia la inminente destrucción del medioambiente y de la humanidad como la conocemos. Para tratar de evitar este terrible futuro, se habla de una transición hacia formas de energía más limpias mediante tecnologías que extiendan las fronteras del capital. Sin embargo, los combustibles fósiles siguen siendo la opción número uno y los intereses económicos de ciertas naciones y empresas no parecen dar señales de cambios de fondo en las formas de producción.