Alejandro Alegría es reportero de La Jornada, maestro en Estudios sobre comunicación y medios de la UNAM.

España es el segundo país con la mayor participación de inversión extranjera directa (IED), sin embargo, de acuerdo con el informe Internacionalización empresarial ¿a cualquier precio?, elaborado por la especialista Julia Martí Comas, la entrada de capital a México se ha traducido en “consecuencias catastróficas para los territorios donde se ubican”. A raíz de la reforma energética, diversas empresas del sector han aumentado su presencia en México como Iberdrola (dato crucial 1), Gamesa, Ingeteam, acompañadas de otras empresas del sector financiero (BBVA) y de construcción (Ingenor, Tecnalia, Elecnor, etc.). Destaca el caso del corredor eólico del Itsmo de Tehuantepec (dato crucial 2) donde opera Iberdrola, firma que invirtió en la construcción del parque La Venta, que pertenece a la Comisión Federal de Electricidad.

Por otro lado, el informe menciona que con la reforme energética se produjo la “progresiva pérdida del control público de un sector estratégico, como es la electricidad” (dato crucial 3). La instalación de los parques condujo a la privatización de tierras ejidales y comunales mediante el despojo y el beneficio de unos pocos particulares, los cuales firmaron los contratos de arrendamiento. Los pagos de arrendamiento son realmente bajos, van desde 10 dólares mensuales hasta 16 mil pesos anuales, lo cual es muy poco, aún así quejas de los pobladores por retrasos en los pagos y emisión de contratos (dato crucial 4). Asimismo, los trabajadores han protestado por los salarios que reciben.

Por si fuera poco, 21 parques eólicos generan energía para empresas como Coca-Cola, Walmart, Bimbo y Cemex que operan bajo un esquema subsidiado de autoabastecimiento, aunado a que las firmas de generación privada no pagan impuestos municipales.

Por otro lado, también existen daños ambientales ya que, por ejemplo, la Unión de Científicos Comprometidos con la Sociedad consideró que, debido al impacto a la flora y la fauna, el parque Eólica del Sur debió ser rechazado. De igual forma, el megaparque solar en San Luis de la Paz, operada por Enel Green Power, utiliza tecnología antigranizo para reducir las lluvias, lo que ha llevado a alteraciones climáticas como desertificación, que perjudican la actividad agropecuaria.