Political links. The price of friendship

Cita: 

The Economist [2022], "Political links. The price of friendship", The Economist, London, 28 de mayo, https://www.economist.com/special-report/2022/05/20/the-price-of-friendship

Fuente: 
The Economist
Fecha de publicación: 
Sábado, Mayo 28, 2022
Tema: 
Dependencia africana hacia China
Idea principal: 

Yaw Osafo Maafo, ministro de Ghana, se dirigió a sus connacionales en un discurso de 2019 pronunciado en Washington, DC. En ese evento, se le preguntó por qué una mujer china arrestada por extracción ilegal de oro fue enviada de regreso a China en lugar de ser procesada en Ghana. Su respuesta se convirtió en un escándalo: el ministro de Ghana dijo que su gobierno tiene una buena relación con China y que llevar a juicio a esa mujer no iba a resolver los problemas económicos.

Para los regímenes autoritarios, el patrocinio chino y los lazos con la élite política pueden ser fuentes de fortaleza. En Tanzania, un miembro del partido gobernante orgullosamente llama a su país la “puerta de entrada” de China a África. En lugares como Ghana y Kenia, el Partido Comunista Chino ha pasado años cultivando lazos no solo con el partido gobernante, sino también con cualquier rival que tenga la oportunidad de ganar el poder.

Funcionarios señalan que China es más hábil que occidente en ayudar a los políticos a mantenerse en el poder, especialmente financiando proyectos de infraestructura. Esto es más obvio en Estados con un partido único; no obstante, los líderes democráticos también comparten esa opinión. Sin embargo, las encuestas sugieren que "los africanos ordinarios" están menos convencidos, (Dato crucial 1).

Los comentarios del ministro de Ghana sobre no enjuiciar a la mujer china insinúan algunas de las razones del descontento ciudadano. Empresarios chinos extraen oro ilegalmente e incluso contratan ghaneses como fuerza de trabajo. Las empresas estatales chinas industrializaron la extracción de metales al importar excavadoras, al cavar la tierra y al contaminar ríos. Algunos mineros chinos están armados y existen informes ocasionales de tiroteos. Sin embargo, los mineros chinos rara vez son arrestados o encarcelados en ese país.

En 2019, otra mujer procedente de China fue enviada de regreso a su país sin ser procesada por despojar ilegalmente de la madera palisandro a Ghana. En tales casos, los ambientalistas dicen que los empresarios chinos violan las leyes con impunidad, aprovechándose de las regulaciones débiles del país.

Sin embargo, los ghaneses podrían preocuparse más por la extracción de oro y la sobrepesca chinas si su economía no sufriera de una alta inflación y una moneda que se deprecia. Así, para los partidos gobernantes, un impulso de la inversión china es políticamente útil.

A los defensores de la democracia les preocupa que, aunque la influencia política y financiera de China puede ayudar a ganar las elecciones, debilita la democracia. Muchos piensan que el dinero de China corrompe a los políticos y socava las normas democráticas al no contar con las estrictas condiciones de la ayuda occidental.

China está cada vez más dispuesta a hacer sus propias demandas políticas: durante la pandemia, se instó a los líderes políticos africanos a declarar públicamente su gratitud por la entrega de vacunas y equipos de protección personal.

Además, China amenaza con represalias contra cualquier gobierno que critique su historial de derechos humanos y busca aliados para hacer que el orden global sea más amigable con el país asiático.

La relación China-África explica el apoyo brindado por los países africanos en la Organización de Naciones Unidas (ONU), (Dato crucial 2). Sin embargo, las élites de los países alineados con China corren el riesgo de volverse demasiado dependiente del "dinero chino".

Esto es un recordatorio de la influencia china sobre los países africanos. Si China puede ayudar a ciertos políticos a ganar elecciones en África construyendo carreteras, también puede costarles las elecciones si los proyectos de infraestructura no se llevan a cabo.

Datos cruciales: 

1. En una encuesta realizada para The Economist, se encontró mayorías en siete países que pensaban que su país se beneficiaba de la relación China-África, pero en menor medida que China. En Ghana, 62% de los encuestados estuvo de acuerdo con lo anterior.

2. Ghana registró la segunda proporción más alta de encuestados que dijeron que su país no se benefició en absoluto de la relación con China, con 25% (frente a 35% en el Congo).

3. En promedio, un aumento del 10% en la alineación del voto con China en la Asamblea General de la ONU produjo un aumento del 276% en ayuda y crédito. Si los países aumentaran su alineación a China al nivel de Sudán (93%), el rendimiento aumentaría aún más: la alineación de Camerún se quintuplicaría con creces, mientras la de Ghana llegaría a 81%.

Nexo con el tema que estudiamos: 

Actualmente hay una competencia mundial por el “control” de África, por una parte, occidente busca acercarse a través de la generación de vínculos recíprocos y no dependencias. Por otra parte, China lo está haciendo de una manera más directa y brusca, lo que ha generado que los partidos gobernantes se relajen y sean más permisivos por la gran ayuda que reciben, convirtiéndose en grandes dependientes del dinero chino.