El impulso de la economía china se reduce. Aporta 8% del consumo mundial pero entre 2011-2013 fue la economía que más contribuyó al crecimiento del consumo mundial. El gobierno chino puso obstáculos a empresas actuando en sectores como banca, servicios financieros e internet; esta política se extiende hacia la informática y la farmaceútica. Existe interés de trasnacionales por mantener operaciones en el mercado chino, a pesar de que el gobierno chino ha venido aumentando gradualmente las regulaciones salariales y ambientales. Las restricciones aplicadas provocaron un endurecimiento de la competencia entre las empresas trasnacionales que se quedaron en el mercado chino contra las nacionales de reciente creación que están surgiendo como competencia. Además, el propio consumidor chino se ha vuelto muy exigente en cuanto a lo que demandan y a su vez los rendimientos por acción de las trasnacionales se han desplomado en los últimos años. Un aspecto esencial de la competencia en China es atender la diversidad de su población, en cuanto a gustos, lenguas y patrones de consumo. En general, se trata de aumentar la productividad, mejorar la gobernanza y responder a los gustos locales a fin de poder mantenerse en la competencia.