Of rice and men. A circular tale of changing food preferences. West Africans are eating more like Asians. Asians are eating more like Americans. And the richest Americans…

Cita: 

The Economist [2017], "Of rice and men. A circular tale of changing food preferences. West Africans are eating more like Asians. Asians are eating more like Americans. And the richest Americans…", The Economist, London, 11 de marzo, http://www.economist.com/news/international/21718508-west-africans-are-e...

Fuente: 
The Economist
Fecha de publicación: 
Sábado, Marzo 11, 2017
Tema: 
Cambios en los hábitos de consumo de granos en la actualidad
Idea principal: 

Entre los años setenta y noventa del siglo XX, los estadounidenses basaron su dieta en el trigo, debido en gran medida a que estaban tratando de evitar el colesterol. Posteriormente se popularizaron las dietas bajas en carbohidratos. Entre 1997 y 2015 el consumo de harina en los Estados Unidos se redujo de 67 kg per cápita a 60 kg.

Todo el mundo está tratando de comer más como comen las personas ricas. En África, Aboud Kobena ha estado sembrando arroz en Tiassalé, Costa de Marfil, desde 1991. Se queja de que actualmente el precio es muy inferior al que había hace una década, la gente se ha vuelto perezosa y el trabajo es más costoso. El problema, según el señor Kobena es que ahora todo el mundo está sembrando arroz.

Debido a la guerra y el mal gobierno, África se perdió la revolución verde que impulsó la producción agrícola en Asia a partir de 1960. Según Harold Roy-Macauley, el jefe de Africa Rice, las condiciones de cultivo en África son distintas a las de Asia y muy variadas en todo el continente.

Entre 2000 y 2014 la producción de arroz en el oeste de África pasó de 7.1 millones de toneladas a 16.8 millones de toneladas. En Costa de Marfil la cosecha de arroz se triplicó durante este periodo. El arroz se está volviendo un alimento básico de esta región.

En los países más pobres de Asia como Bangladesh y Camboya, un plato de arroz sigue siendo un signo de abundancia y la gente continúa comiendo más de él. Sin embargo, en los países ricos, el consumo de arroz está pasando de moda. Cifras del Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA) sugieren que el consumo de arroz per cápita ha caído desde el año 2000 en China, Indonesia y Corea del Sur. Mientras que en los puestos de carretera en el sudeste de Asia todavía se puede comer arroz, en los centros comerciales de lujo está dominando el consumo de trigo.

Joseph Lee, dueño de La BreadTable, una panadería de Singapur, apuesta por el crecimiento de la demanda en el turismo y la migración. “Mientras más personas comenzaron a viajar, más querían encontrar pan europeo cuando llegaran a casa”.

El trigo ahora tiene nuevos competidores, especialmente en barrios ricos de Estados Unidos. Café Gratitude es un restaurant gourmet vegetariano en Venice Beach, un barrio de Los Ángeles muy consciente de la salud alimenticia. En este restaurant se sirve escanda y kamut, que son dos tipos de trigo, y acompañamientos como arroz integral y quinoa. Tales granos tienden a comercializarse como “granos antiguos”, que se supone son más saludables que el arroz viejo y simple y el trigo.

Esta moda se está extendiendo más allá de la cocina californiana. En 2015 General Mills, una gran compañía de alimentos estadounidense, presentó un cereal llamado “Cheerios + granos antiguos”, que contiene kamut, avena, quinoa y escanda. Rozoni ha creado una pasta con amaranto, mijo, quinoa, sorgo y tef.

Es muy pronto para decir si los granos antiguos son más que una moda. A pesar de que su producción ha aumentado, siguen siendo cultivos triviales en comparación con el arroz, el trigo o el maíz.

Son los consumidores lo que en última instancia conducen a cambios en las dietas, y parece que los consumidores han adquirido cierto gusto por la novedad. Los alimentos envasados son cada vez más populares incluso en los países africanos y asiáticos pobres.

Datos cruciales: 

Una gráfica muestra la producción de granos (mijo, sorgo y arroz) en el oeste de África desde el 2000 hasta 2014. Sólo en el caso del arroz hubo un aumento de producción, contrario a lo que sucedió con el mijo y sorgo, que decayeron a partir de 2008.

Alrededor de 90% del arroz de todo el mundo se consume en Asia y 60% del mismo en China, India e Indonesia.

Los países del sudeste asiático consumirán 23.4 millones de toneladas de trigo en 2016-17. En el sur de Asia se espera que el consumo aumente de 121 millones a 139 millones de toneladas en el mismo período.

Un mapa muestra la proyección del consumo de trigo en Asia durante 2016-17. Las cifras son kg por persona.

Nexo con el tema que estudiamos: 

La crisis capitalista actual no sólo es económica, sino también alimentaria, humanitaria y ambiental. Esta configuración la convierte en la crisis más grave que ha sucedido hasta ahora.

En este contexto, la producción de alimentos es un dominio estratégico al satisfacer una necesidad básica de la población. El argumento liberal quiere situar el cambio de patrones de consumo en la demanda, pero no debemos olvidar la importancia de que las grandes empresas se involucren en la producción de los "nuevos" alimentos para que la moda se convierta en paradigma. En un mundo donde supuestamente tenemos la libertad de elegir, se nos imponen modas y patrones de consumo principalmente por medio de la publicidad y la información, y uno de los ámbitos en donde más sucede esta situación es en la forma en que nos alimentamos.