Charles Lieber, presidente del departamento de química de la Universidad de Harvard, es un laureado científico, que incluso ha sido considerado para recibir el Premio Nobel, y cuyas investigaciones forman parte del proyecto de Elon Musk para implementar nanotecnología en el cerebro humano. En 2013, Lieber visitó la Universidad Tecnológica de Wuhan (UTW) para fundar un laboratorio de nanotecnología, que se dijo era un proyecto conjunto entre la UTW y Harvard. Sin embargo, Harvard no tuvo conocimiento de la existencia de dicho laboratorio hasta principios de 2015; esta universidad tampoco supo que Lieber recibía de la UTW un salario mensual 50 000 dólares, como parte del programa Mil Talentos, diseñado para repatriar científicos chinos y atraer científicos extranjeros a China.

El 28 de enero, Lieber fue arrestado por el FBI por haber negado a las autoridades norteamericanas su participación en dicho programa, mientras espera una audiencia programada para el 30 de enero. Otros dos científicos de nacionalidad china que se encontraban en Boston realizando investigaciones también fueron imputados. Uno de ellos es teniente en el Ejército chino y ha sido acusado de fraude de visa, conspiración y declaraciones falsas, y actualmente está en China, mientras el otro fue arrestado por cargos de contrabando, supuestamente tras intentar llevar a China materiales robados de un hospital.

Las autoridades norteamericanas esperan que el arresto de Lieber haga que los investigadores y los institutos de investigación enfríen un poco los acuerdos de investigación entre los dos países, pues la administración Trump considera que los investigadores han pecado de inocentes mientras China roba los resultados de las investigaciones. Una de las preocupaciones de las autoridades norteamericanas es el establecimiento en China de laboratorios “sombra” o "espejo", conducidos por los beneficiarios del programa chino de Cien Talentos, de forma paralela a sus investigaciones en Estados Unidos. El laboratorio de Lieber en Wuhan es considerado por las autoridades uno de ellos. En el caso presentado contra Lieber se lo acusa de haber entrado al programa Mil Talentos del gobierno chino desde 2012 para desarrollar el laboratorio de Wuhan, reclutar talento, publicar artículos en revistas científicas de renombre, asesorar estudiantes de doctorado y albergar conferencias en nombre de UTW. A cambio recibió, según las autoridades, una compensación de 1.74 millones de dólares, además del sueldo mensual de 50,000 dólares. En 2013, según la acusación presentada, firmó un contrato para recibir en Harvard a investigadores de la UTW durante dos meses al año. Cuando Lieber fue confrontado por funcionarios de Harvard por la existencia de ese laboratorio, Lieber declaro que la UTW estaba utilizando el nombre y logo de Harvard sin su consentimiento.

En 2018, Lieber declaró a investigadores del Departamento de Defensa de Estado Unidos que no había recibido invitación para participar en el programa Mil Talentos. Sin embargo, el FBI interceptó varios correos electrónicos de Lieber que describen la forma en que recibía dinero en una cuenta bancaria en China, dinero que luego retiraba en efectivo en sus visitas a dicho país oriental. El acuerdo con Lieber representó para la UTW prestigio y el desarrollo especialistas en el campo de la nanotecnología. De acuerdo al contrato que supuestamente firmó Lieber, el laboratorio se dedicaba a desarrollar “nano-cables a base de litio para baterías de iones”. Sin embargo, las investigaciones actuales de Lieber giraban en torno al desarrollo de tecnología de “implantes neuronales”, que Elon Musk está buscando desarrollar. El propio Musk en un artículo sobre esto cita a Lieber y a los científicos chinos que trabajaron con él en su laboratorio de Harvard.

Aunque no está claro qué clase de ventajas pudieron capitalizar las investigaciones chinas a partir del acuerdo con Lieber, pues el resultado de estas investigaciones suele publicarse de forma abierta, la administración Trump está convencida que el programa de Mil Talentos representa algún tipo de espionaje económico que no está dispuesta a tolerar.