Thanking big brother. China’s post-covid propaganda push

Cita: 

The Economist [2020], "Thanking big brother. China’s post-covid propaganda push", The Economist, London, 18 de abril, https://www.economist.com/china/2020/04/16/chinas-post-covid-propaganda-...

Fuente: 
The Economist
Fecha de publicación: 
Sábado, Abril 18, 2020
Tema: 
Las estrategias de China para posicionarse en el panorama internacional a raíz de la pandemia por Coronavirus
Idea principal: 

A raíz de la pandemia por el COVID-19, China ha emprendido la mayor operación de ayuda de emergencia en el extranjero desde 1949, cuando el Partido Comunista tomó el poder.
A través del suministro de equipo médico desde máscaras hasta ventiladores y personal de salud, China está tratando de pintar una nueva imagen de sí misma como modelo de control de la enfermedad y como salvador del mundo.

Hace apenas unas semanas, China era el país más golpeado por el Coronavirus. Ahora los medios estatales se encargan de anunciar cada donación por pequeña que sea. Por ejemplo, el 21 de marzo un tren de carga partió de la ciudad oriental de Yiwu con destino a Madrid con equipo con valor de 50 000 dólares, esta donación fue catalogada como un “nuevo punto de inflexión” en la construcción de un “camino de seda saludable”.

La atención del gobierno chino se ha volcado hacia el exterior después de lograr una reducción dramática en las infecciones dentro del país, casi todos sus casos reportados recientemente involucran viajeros del extranjero. Por ser el mayor productor de equipo médico, China está en buena posición para ayudar. En una pandemia, “ayudar a otros es ayudarse a sí mismo”, expresó una portavoz china.

La ayuda que brinda ahora China tiene prospectivas en el terreno político, ya que el gigante asiático está aumentando su poder en el extranjero y ahora que Estados Unidos está paralizado por el Coronavirus sus posibilidades para posicionarse como “influencia internacional” son aún más claras. En el ámbito doméstico, el Partido también puede esperar grandes ganancias, ya que las duras críticas que se le hacen pueden ser desviadas ante la pronta respuesta y efectividad para contener la propagación del virus. En este sentido, los medios estatales insisten en que China ha demostrado la “superioridad” del socialismo al estilo chino con su capacidad "única" de gestionar personas y recursos.

La imagen del presidente Xi Jinping como el gran estadista ha impregnado la propaganda del Partido. A menudo se emplean frases de él en la campaña emprendida para posicionar a China. Una de las frases que más ha causado controversia es aquella que llama a “construir una comunidad con un futuro compartido para la humanidad", que si bien podría parecer inocente, tiene un trasfondo de sujeción hacia China sin mostrar alguna reticencia.

La ayuda médica que China está proporcionando podría ayudar a fortalecer su “soft power”, comentan algunos analistas. Construir este poder ha sido uno de los objetivos del Partido desde hace más de una década; Xi Jinping ha invertido cantidades importantes en proyectos como los Institutos Confucio, donde se enseñan el idioma y cultura chinas fuera del país. Durante la pandemia, los medios estatales de China y los diplomáticos del país han estado utilizando Twitter y Facebook (que están bloqueados en China) para promover los esfuerzos caritativos de China.

La campaña de propaganda ha sido ayudada por la virtual ausencia de Estados Unidos del escenario mundial durante la pandemia, en parte debido a la falta de interés de Trump en el liderazgo global, y por el daño causado por el COVID-19 en el país. Estados Unidos incluso ha dejado de enviar ayuda al extranjero porque son necesarios en el país y los artículos sanitarios han empezado a escasear. Por esta situación hay una creciente opinión en gran parte del mundo que Estados Unidos se está cuidando a sí mismo, sin importar las repercusiones en otros países.

A pesar de lo anterior China no la tiene fácil. No ayuda que, a pesar de toda su propaganda sobre la generosidad china, el valor de las donaciones de China esté muy eclipsado por el de sus ventas de equipo médico (ocasionalmente de baja calidad, alegan los compradores). Puede ser que China no haya elaborado una estrategia de ayuda, con un sentido claro de qué países deben apuntar como prioridad y cuánto se debe regalar. De hecho, le ha regalado a las empresas estatales y privadas esta tarea.

Recompensa de los empresarios

Jack Ma, el multimillonario cofundador de Alibaba junto con la fundación caritativa de la misma empresa ha enviado cargas de ventiladores, kits de protección y pruebas de COVID-19 para su distribución en los 54 países africanos.
Huawei por su parte, ha donado equipo médico que suma más de 700 000 insumos entre máscaras, gafas y guantes a hospitales en Nueva York. La compañía también ha donado millones de máscaras a países que están considerando el ingreso de la red 5G de Huawei, incluidos Canadá y los Países Bajos.

En algunas partes de Europa, la ayuda de China puede haber ganado admiradores. En la capital de Serbia, Belgrado, apareció una gran cartelera de agradecimiento al "hermano mayor Xi", pagada por un tabloide serbio progubernamental. De acuerdo con Lucrezia Poggetti quien encabeza a un grupo de expertos en Berlín, el descontento público con la Unión Europea y la desconfianza con los Estados Unidos de Trump han funcionado en favor de China.

Para muchos en Occidente la campaña de propaganda de China suena cínica, explotadora y olvidadiza de la ayuda que Occidente brindó a China en su momento de necesidad. Para muchos en Occidente la campaña de propaganda de China suena cínica, explotadora y olvidadiza de la ayuda que Occidente brindó a China en su momento de necesidad. A principios de febrero, Estados Unidos y Europa enviaron 30 toneladas de suministros médicos (gran parte de los cuales fueron donados de forma privada).

En los países pobres, la caridad de China puede ser más efectiva. En África, los envíos se necesitan con urgencia; pero Estados Unidos sigue siendo un donante mucho más grande en el continente y en las Naciones Unidas (Véase dato crucial 3). Otros hechos relevantes que han mermado la popularidad de China en el continente africano han sido los recientes desalojos de algunos africanos de sus residencias en la ciudad de Guangzhou, en el sur de China. Las imágenes de los africanos obligados a dormir en las calles han sido ampliamente compartidas por las redes sociales en sus países de origen. The Daily Nation, un periódico keniano, acusó a China de "traición".

En países en desarrollo es probable que China gane tanto apoyo al brindar ayuda económica como ayuda médica. El 15 de abril el G-20 que incluye a China, acordó permitir que los países en desarrollo suspendan los pagos de la deuda a sus miembros por el resto del año. En los últimos años China ha adoptado un esquema de pago más flexible hacia sus deudores, no sin la intención de mantener y aumentar su influencia política, por ejemplo, el año pasado, según los informes, China canceló 78 millones de dólares adeudados por Camerún. Un mes después, Camerún retiró a su candidato (y a la elección de la Unión Africana) para director general de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación, un organismo de las Naciones Unidas, que despeja el camino para que el candidato de China consiga el puesto.

Durante la pandemia China ha continuado con la flexibilización de su política externa y con el camino del “soft power”, sin embargo es cierto que las embajadas chinas y el gobierno de Beijing, han explotado de indignación cuando se le señala de encubrir la pandemia.

No se tiene certeza del plan de los líderes chinos para dar forma al orden mundial. Los objetivos de China son a menudo en defensa propia, para protegerse de las críticas y los desafíos a sus reclamos territoriales. Sin embargo, China intenta persuadir a otros para que adopten su peculiar visión de los derechos humanos. Descarta las libertades individuales, da prioridad al desarrollo económico y piensa que los gobiernos deberían vigilar internet como lo deseen.

El hecho de que China pueda aprovechar la pandemia para fortalecer su poder global dependerá de la política y las economías de China y Estados Unidos después del COVID-19. A medida que el mundo emerge de la crisis, es probable que la atención de Occidente se centre más en el manejo temprano del brote por parte de China, la confiabilidad de los datos proporcionados y en la vulnerabilidad de Occidente al control de China de las cadenas de suministro vitales como la de la industria médica.Tales problemas podrían alimentar las inquietudes sobre la influencia global de China y dificultar que China dé forma al mundo a su gusto.

Si gana las elecciones presidenciales de Estados Unidos en noviembre, Joe Biden puede reafirmar una visión liberal del orden mundial, incluido el apoyo a las instituciones multilaterales y las alianzas regionales que han sido menospreciadas y descuidadas por Trump.

Por ahora, a medida que Estados Unidos se tambalea, China parece ser un líder confiable en el mejor de los casos.

Datos cruciales: 

1. Entre el 1 de marzo y el 4 de abril de 2020, China exportó suministros médicos a nivel mundial con valor de 1,45 mil millones de dólares.

2. La popularidad de China en Europa está creciendo considerablemente. En una encuesta realizada por un canal de televisión italiano, 36% de 800 entrevistados señaló que le gustaría tener a China de aliada principal fuera de Europa.

3. En 2019, China dio 368 millones de dólares al presupuesto general de la Organización de las Naciones Unidas, lo que equivale al 55% de la contribución de Estados Unidos.

4. En África, China es el mayor acreedor bilateral, ya que ha prestado más de 140 mil millones de dólares desde 2000.

Nexo con el tema que estudiamos: 

China ha dejado claro que quiere contender por la hegemonía mundial. A raíz de la pandemia del COVID-19 y el exitoso camino que tomó para contener el virus, aunado a las generosas donaciones médicas que ha realizado a todo el mundo es claro que existe una estrategia para salir victoriosa. Sin embargo, China aún depende de la posición estadounidense, la cual es cada vez más incierta a causa del gran número de infectados en el país. De cualquier forma, es interesante analizar los mecanismos por los cuales el gigante asiático se está consolidando como un referente “positivo” a nivel mundial.