David Sanger es corresponsal de seguridad nacional y de la Casa Blanca de The New York Times, en donde lleva 38 años colaborando. Es autor de libros como "El arma perfecta: la guerra, el sabotaje y el miedo en la era cibernética".

El gobierno de Estados Unidos sufrió un ciberataque el domingo 9 de mayo de 2021 que impidió el transporte de gasolina y combustible por un gasoducto que transporta la mitad de estos líquidos a la costa este. Este ataque detonó la alerta y planteó nuevos retos y acciones para el gobierno estadounidense, como la posibilidad de emitir una orden ejecutiva de fortalecimiento de la ciberseguridad.

Esta orden crearía un estándar de seguridad con parámetros sumamente restrictivos para todas las agencias federales, así como para las contratistas que desarrollen software para el gobierno federal. La violación de estas nuevas normas llevaría a las empresas a la posibilidad de ya no vender sus productos al gobierno federal, lo que pondría en peligro su supervivencia en el mercado.

Estas medidas buscan frenar los ataques de randsomware, como los que que tomaron el control de la red de la empresa Colonial Pipelines entre el 6 y 7 de mayo. No obstante, también tiene la intención de prevenir ataques desde diversas compañías como SolarWinds, un desarrollador de software cuya seguridad ha sido violada fácilmente por la agencia de inteligencia rusa.

La orden, que se espera que se emita en los próximos días o semanas, también establecerá una pequeña "junta de revisión de incidentes de ciberseguridad", que tendrá como base la Junta Nacional de Seguridad en el Transporte.