'Prosperidad compartida': el plan de China para que los millonarios compartan sus riquezas
Buckley, Chris, Alexandra Stevenson y Cao Li [2021], "'Prosperidad compartida': el plan de China para que los millonarios compartan sus riquezas", The New York Times, New York, 8 de septiembre, https://www.nytimes.com/es/2021/09/08/espanol/prosperidad-comun-china.html
Chris Buckley es el principal reportero sobre China para el New York Times; vivió ahí por más de 30 años. Alexandra Stevenson es una corresponsal de negocios del New York Times que vive en Hong Kong. Cao Li es una reportera de negocios para el New York Times que vive en Hong Kong.
El Partido Comunista de China está buscando extender su prosperidad a todos los sectores de la población al presionar a negocios y empresarios para que ayuden a reducir la brecha de riqueza que podría convertirse en un peligro para el país y para la confianza pública en el gobierno. Las autoridades chinas prometen que la educación, la vivienda y la atención médica serán menos costosas; también han ofrecido ampliar la disponibilidad de una variedad de servicios fuera de las grandes urbes e ingresos más altos para los trabajadores, con lo que se garantizaría que más personas se unan a la clase media.
Los compromisos hechos dentro del gobierno chino respaldan la perspectiva de que China cuenta con la prosperidad suficiente para acercarse a la repartición de la riqueza, viejo ideal del Partido Comunista. Con un crecimiento económico más moderado respecto del observado en años anteriores, muchas personas piensan que la movilidad social está disminuyendo, con trabajos profesionales bien pagados cada vez más escasos y jornadas laborales cada vez más extensas. Esto hace pensar a las familias chinas que no pueden darse el lujo de una familia más grande, lo que puede agravar una crisis demográfica. Xi Jinping piensa que esto, en caso de empeorar, puede amenazar el futuro del Partido Comunista.
El Partido Comunista y el propio Xi Jinping –quien está interesado en un probable tercer periodo como secretario general del Partido–, quieren demostrar que se están escuchando las quejas y que se puede generar progreso social, mientras Estados Unidos se encuentra estancado en la desigualdad. Cristopher Johnson, ex analista de política china para el gobierno estadounidense, piensa que Xi considera que hacer algo por la desigualdad de ingresos y la brecha de la riqueza es fundamental en su lucha por los discursos globales contra Estados Unidos y Occidente en general.
Este nuevo énfasis también tiene razones económicas, dado que el 1% más rico de China posee casi 31% de la riqueza del país, comparado en 21% en el 2000. De acuerdo con el Partido Comunista, repartir la riqueza de manera más equitativa hará que más personas tengan el poder adquisitivo suficiente para impulsar la economía y así también reducir la dependencia del país del capital y el conocimiento de Occidente, asentando así las bases de una nueva etapa de crecimiento.
Aun con el poder del Partido Comunista, algunos cambios como los impuestos a la propiedad y a las herencias pueden generar problemas porque muchos miembros de las élites tienen vínculos con el poder político, además de generar disgusto entre los chinos que compraron una casa como principal vehículo de inversión. Muchos funcionarios del partido proponen cambios graduales y buscan tranquilizar a los empresarios respecto a sus riquezas. Sin embargo, los comentarios que piden la repartición de la riqueza han sido bastante compartidos en los medios de comunicación del partido en las últimas semanas, lo que da a entender que existe apoyo para las medidas de mayor alcance. Xi ha intentado no alzar de más la expectativas de una transformación inmediata, señalando que el país debe tener un progreso sustancial a fin de lograr la prosperidad compartida en el año 2035, después de haber eliminado la pobreza rural extrema en 2020.
Zhejiang, provincia en la costa este de China, fue elegida para establecer zonas de demostración de la prosperidad compartida. Hace poco, el gobierno de esa provincia publicó un plan donde se proponen los objetivos generales para lograr esa prosperidad. Se planea que para 2025, el ingreso disponible promedio por persona sea de alrededor de 11 500 dólares, un incremento de 40% comparado con el nivel actual. La provincia podría promover contratos colectivos para que los empleados tengan un mayor peso en las negociaciones salariales, así como también políticas para darles a los trabajadores parte de las utilidades de las empresas. La provincia de Zhejiang también quiere reducir el costo del cuidado infantil y la vivienda para ayudar a sus residentes. El plan antes mencionado, también busca que se regulen los “ingresos excesivos” y que se amplíe la caridad. El gobierno de la provincia de Zhejiang intenta mostrar que la visión de Xi Jinping sobre compartir la riqueza y generar prosperidad compartida no afectará a los negocios privados.
Zhejiang, donde Xi Jinping fue jefe provincial del partido entre 2002 y 2006, es el hogar de algunas de las empresas privadas más exitosas de China, como Alibaba. De hecho, uno de cada seis de los multimillonarios del país es de ahí. Las empresas y empresarios han buscado demostrar que están alineados con las metas del gobierno chino. Jack Ma, cofundador de Alibaba y una de las personas más ricas de China, dijo que era “responsabilidad y deber” de los empresarios luchar por la prosperidad compartida. Alibaba anunció que invertirá 15 500 millones de dólares en proyectos para compartir la riqueza, y que contemplan la atención médica rural y el seguro para los trabajadores de reparto. Tencent dijo que también destinaría 15 500 millones de dólares para programas de ayuda social. Por su parte, Wang Xing, fundador de Meituan, aplicación de entrega de alimentos que ha sido objeto de una investigación antimonopolio, transfirió más de 2 000 millones de dólares de sus acciones a su fundación filantrópica.
1. El 1% más rico de China posee casi 31% de la riqueza del país, comparado en 21% en el 2000.
China busca combatir uno de los grandes desafíos y consecuencias del capitalismo, la desigualdad del ingreso y la riqueza, esto en busca de mejorar la vida de sus habitantes que cada vez enfrentan más adversidades en el sistema económico actual. Xi Jinping, el dirigente del Partido Comunista chino piensa que esto es vital, no sólo para el desarrollo y la estabilidad social de China, sino también para la lucha de discursos contra Estados Unidos y Occidente.