Nuevo León: desabasto por mala gestión hídrica. Primera y segunda partes
Saldívar, Américo [2022], "Nuevo León: desabasto por mala gestión hídrica. Primera y segunda partes", La Jornada, 21 y 22 de junio, https://www.jornada.com.mx/2022/06/21/opinion/012a1pol y https://www.jornada.com.mx/2022/06/22/opinion/012a1pol
Américo Saldívar es consultor en economía de los recursos naturales y desarrollo sustentable. Forma parte de la división de estudios de posgrado de la Facultad de Economía de la UNAM.
Primera Parte
Como respuesta a la severa sequía y desabasto de agua en el estado de Nuevo León el gobierno de la entidad en conjunto con el Sistema Operador de Agua y Drenaje diseñaron el Plan Maestro para garantizar el agua en Nuevo León hasta 2050 (PM).
El PM no toma en cuenta temas como el cambio climático, la mala gestión y regulación hídrica, ni el desarrollo sustentable. Además, el PM lejos de plantear una solución sustentable promete más de las mismas lógicas que están generando los problemas de escasez.
La sustentabilidad involucra distintas dimensiones como la temporalidad de varias generaciones, la calidad de vida, y variables cuantitativas sobre el recurso. Además, elementos éticos, demográficos, institucionales y políticos también son centrales. El hecho es que, bajo estas premisas de la sustentabilidad, el manejo del agua en Nuevo León no es sustentable.
El problema de la sequía está más relacionado con la acción de los gobiernos, de la sociedad y los consumidores, que con un inconveniente fenómeno natural. La mala asignación de recursos como el agua y la tierra, el crecimiento demográfico y de las actividades productivas que demandan más agua que la capacidad de recarga de la cuenca hidrológica, y la apropiación privada del agua son elementos centrales que están provocando la sequía y escasez de agua.
El PM no busca una solución dentro de su propia zona hidrológica, que es la del río Bravo. La propuesta del PM es incrementar el abasto y suministro de agua entre uno y tres metros cúbicos mediante la extracción de agua de fuentes externas a la cuenca hidrológica del lugar, en algunos casos sumamente distantes como la cuenca del río Pánuco que se encuentra a 500 kilómetros.
El gran problema con la solución que plantea el PM es que parte de paradigmas de crecimiento infinito pensando que los recursos naturales son infinitos. Las supuestas soluciones de este tipo sólo garantizan desastres. Una solución real al problema debe partir del hecho de que debido a la contaminación y el cambio climático el agua ya no es un recurso renovable, y debe proponer una nueva cultura del agua que incluya un buen manejo de la cuenca y del ciclo hidrológico.
Segunda Parte.
La demanda de recursos hídricos en México ha aumentado y con ello también crecieron las intervenciones sobre cuencas hídricas y el agua. En vez de regular el consumo y establecer tarifas sustentables, se ha decidido ignorar los límites naturales y ofertar agua sin atender a la disponibilidad de agua ni a la capacidad de recarga de los mantos freáticos.
Aunque la oferta y suministro de agua en sí mismo no es malo, durante décadas Conagua y organismos operadores han aumentado el abasto de agua como si fuera infinita. La crisis hídrica que atraviesa Nuevo León en 2022 es consecuencia de años del manejo irresponsable de las cuencas hidrológicas.
El agua en su laberinto neoleonés
El PM ignora completamente los limites ecológicos y medioambientales. El gran ausente del PM es la protección y reforestación del Parque Nacional Cumbres de Monterrey. Dicho Parque es la principal fuente y cosecha de agua de la metrópoli, aporta más de 60% del agua superficial de Monterrey, alimenta las represas del Cerro Prieto y el Cuchillo, además de contribuir en la infiltración para recargar los mantos freáticos.
En Nuevo León, la escasez de agua es desigual. Mientras la sobreexplotación del recurso permite su disponibilidad para enormes ranchos ganaderos y para regar campos de golf, los marginados tienen que recurrir a la ordeña ilegal de tuberías de agua. El aumento de 2 metros cúbicos en el suministro de agua que se propone el PM puede conseguirse con una mínima reducción del suministro para los grandes usuarios como refresqueras, cerveceras y el agua de riego.
Para enfrentar el problema del agua es necesario cambiar las formas de vida para que estén acordes con la disponibilidad de agua. Sin duda hay que buscar tarifas escalonadas para mayores consumos, pues en Monterrey los grandes consumidores de agua pagan de 5 a 6 centavos el litro, pero lo esencial es actuar de forma coherente con los ciclos hídricos y su disponibilidad.
1.- El PM pretende incrementar el abasto y suministro para la población entre uno y tres metros cúbicos; recurriendo, entre otras medidas emergentes, a fuentes fuera de la propia cuenca.
2.- El Parque Nacional Cumbres de Monterrey aporta más de 60% de la disponibilidad de agua superficial de Monterrey.
3.- Con un efectivo control de fugas y reducciones en el consumo de los grandes usuarios del orden de 10-15%, se podría contar con una disponibilidad adicional de más de 2 metros cúbicos por segundo.
4.- Las tarifas del consumo de agua en Monterrey son 2 a 4 centavos por litro para el consumo domestico y de 5 a 6 centavos para los concesionarios.
Dourojeanni, C. Axel [2012], La gestión del agua en los límites de la disponibilidad, Santiago de Chile, Gerencia de Agua & Medio Ambiente-Fundación Chile.
La crisis de agua en Nuevo León es ejemplo de la devastación medioambiental que provocan las grandes corporaciones en su insaciable demanda por recursos, en este caso el agua. Además, muestra una relación cómplice entre Estado y corporaciones que se mantiene pues la solución que se plantea no busca imponer limites al consumo de las grandes corporaciones; si no que profundiza la sobreexplotación del agua, y a su vez el desastre ecológico, para seguir satisfaciendo la demanda de sus grandes usuarios.