¿Es posible que un país remplace su riqueza petrolera con árboles?

Cita: 

Searcey, Dionne [2022], "¿Es posible que un país remplace su riqueza petrolera con árboles?", The New York Times, 4 de noviembre, https://www.nytimes.com/es/2022/11/04/espanol/cambio-climatico-petroleo....

Fuente: 
Otra
Fecha de publicación: 
Viernes, Noviembre 4, 2022
Tema: 
Sustitución del petróleo con la tala de árboles
Idea principal: 

Dionne Searcey forma parte del equipo que ganó el Premio Pulitzer 2020 de periodismo internacional y es autora del libro In Pursuit of Disobedient Women.


La nación de Gabón considerada el “Edén de África”, durante décadas ha dependido del petróleo para impulsar su economía. Sin embargo, saben que su petróleo no durará, por lo que recurrieron al otro recurso abundante, una enorme selva tropical en la cuenca para ayudar a compensar la economía una vez que se acabe el petróleo.

Gabón permite plantaciones de aceite de palma en ciertas áreas y está convirtiendo la selva tropical en madera contrachapada. Sin embargo, ha adoptado reglas estrictas diseñadas para mantener la gran mayoría de sus árboles en pie. Su objetivo es lograr un equilibrio entre las necesidades de una sola nación y las de un mundo que enfrenta una crisis climática.

Gabón prohibió las exportaciones de madera en bruto y creó un complejo industrial con exenciones fiscales para atraer a empresas de muebles, fabricantes de madera contrachapada y otros para construir fábricas y crear puestos de trabajo. Las reglas limitan la tala a solo dos árboles por hectárea cada 25 años. El enfoque de Gabón parece estar funcionando, y otros países ya están copiando aspectos de su plan, lo que lo convierte en un modelo potencial para la protección de la selva tropical.

Los bosques de Gabón siguen estando entre los que más carbono absorben del mundo. Sin embargo, la selva enfrenta graves riesgos. Las investigaciones muestran que la República Democrática del Congo ha estado perdiendo más selva virgen que cualquier otro país. Y en 2022, Congo sorprendió con planes para subastar bloques de gas y petróleo, algunos de los cuales se superponen con turberas tropicales que absorben dióxido de carbono. El presidente del Congo, Félix Tshisekedi, dijo que los ingresos serán una forma de que su país “tenga un mejor control de su destino”.

En muchos sentidos, Gabón es un laboratorio ideal para la conservación. Tiene una población pequeña pero creciente de poco más de 2 millones de personas. Y el bosque cubre casi 90% de su tierra. El país ha sido gobernado durante décadas por una familia que valora los bosques y la biodiversidad. Fue el ex presidente Omar Bongo quien generó entusiasmo por la conservación.

Mientras tanto, la producción de petróleo de Gabón estaba disminuyendo a medida que maduraban sus campos petroleros. Durante años, el petróleo había proporcionado riqueza. Una élite, incluida la familia Bongo, se benefició enormemente. Varios miembros de la familia han sido investigados por corrupción.

Los precios del petróleo estaban cayendo y el hijo de Bongo sabía que sus ingresos no sustentarían a la nación para siempre. Pidió a los asesores que lo ayudaran a desarrollar la economía y proteger el medio ambiente. El plan resultante refrenó la tala, puso fin a la exportación de troncos en bruto y se propuso crear puestos de trabajo mediante la transformación de los árboles de Gabón.

Los funcionarios también establecieron una estación de investigación satelital para crear una base de datos de las áreas más degradadas de Gabón. Parte de la tierra degradada y la sabana se asignó luego a la agricultura industrial, incluido el aceite de palma. La deforestación y la tala ilegal han disminuido. Y el énfasis ambiental ha tenido otros beneficios.

El número de elefantes de bosque en Gabón ha aumentado significativamente: de 60 000 en 1990 a 95 000 en 2021. Los elefantes son un signo de un bosque próspero, dijo el ministro de ambiente, porque reducir la caza furtiva significa que otras actividades delictivas también son menos probables.

Doce años después de establecer su zona económica para las industrias madereras, Gabón se ha convertido en el mayor productor de chapas tropicales de África y entre los más grandes del mundo. El complejo emplea a 6 000 trabajadores gaboneses, una cifra que se espera que crezca. En general, la industria maderera ahora proporciona 30 000 puestos de trabajo, más del 7% de la fuerza laboral del país.

Desde que alcanzó su punto máximo en 1997, la producción de petróleo de Gabón ha disminuido en más de un tercio. El petróleo ahora representa 38.5% de la economía, según el Fondo Monetario Internacional. Para 2025, el país tiene como objetivo reducir eso a 20%. Mientras tanto, tiene planes para impulsar la producción tanto de petróleo como de gas.

“Seguiremos consumiendo gasolina y diésel durante muchos años, hasta que los países más ricos hagan más para ayudar a las naciones más pobres a financiar la transición energética", dijo el presidente Bongo. Los activistas han acusado a las empresas de no modernizar la infraestructura antigua, lo que provoca derrames. Y a pesar de las promesas de eliminar la quema, todavía está permitida internacionalmente.

El ministro de ambiente quiere que el mundo experimente Gabón, sus sabanas, manglares y bosques, y piensa que podría convertirse en la próxima Costa Rica, atrayendo a los viajeros globales. Algunas de sus ideas para el turismo involucran "cápsulas terrestres" para ver los famosos hipopótamos de Gabón. Esos planes aún no se han materializado, pero por ahora, el bosque esta tranquilo.

Nexo con el tema que estudiamos: 

Con la inminente y próxima decadencia de la existencia de petróleo, muchos países desarrollados como en vías de desarrollo están optando por cambios que involucren energías limpias y renovables, como una forma de luchar contra la destrucción del medio ambiente. Gabón está apostando por los árboles como el sustituto del petróleo a largo plazo.