Chinese Spy Agency Rising to Challenge the C.I.A.
Wong, Edward [2023], "Chinese Spy Agency Rising to Challenge the C.I.A.", The New York Times, New York, 27 de diciembre, https://www.nytimes.com/2023/12/27/us/politics/china-cia-spy-mss.html
Edward Wong ha sido corresponsal sobre temas diplomáticos por 24 años desde Nueva York, Bagdad, Beijing y Washington.
Julian E. Barnes cubre los temas de las agencias estadounidenses de inteligencia y la seguridad internacional.
Muyi Xiao es reportera de investigaciones visuales que combina el reportaje tradicional con técnicas digitales forenses.
Chris Buckley, es el corresponsal en jefe sobre China, reportando sobre China y Taiwán desde Taipei, en temas de política, cambio social, seguridad y asuntos militares.
A partir de documentos obtenidos por el periódico The New York Times, se muestran las ambiciones del Ministerio de Seguridad del Estado (MSE) en China, para mejorar sus capacidades de espionaje. Los documentos fueron revisados por agentes estadounidenses que tienen conocimientos sobre el tema.
Integrantes del espionaje en China demandan que las tecnologías que utilizan tengan mejores desempeños. Por ejemplo, solicitan que además de mejorar las capacidades de las cámaras de vigilancia, se incorporen sistemas de inteligencia artificial que puedan generar los expedientes de las personas monitoreadas. La finalidad es mejorar la selección y seguimiento de los “blancos” de espionaje.
China ha asignado mayor presupuesto en el ámbito de la inteligencia, ha ampliado su reclutamiento así como el uso de nuevas tecnologías para competir con Estados Unidos por el liderazgo global. Se considera que el MSE chino está muy cerca de las capacidades de la Agencia Central de Inteligencia de Estados Unidos. Se ha instalado una competencia para obtener informaciones sobre los desarrollos tecnológicos de punta de ambas potencias.
Un rasgo distintivo de ese ministerio es que su mandato abarca tanto cuestiones nacionales como extranjeras. Entre otros asuntos relevantes, se detectaron varios espías actuando en China, mismos que fueron detenidos. El espionaje chino se expande en el extranjero, incluyendo el reclutamiento de un político de la extrema derecha belga y diversas acciones en territorio estadounidense. Un rasgo distintivo del espionaje chino es que los agentes prefieren no actuar en Estados Unidos y montan estructuras para actuar y reclutar desde otros países.
Uno de los ámbitos de reclutamiento más importantes es el de las universidades, en que el MSE contrata personal calificado. Esto es consistente con el objetivo del liderazgo chino de crear bases tecnológicas propias y cerrar las brechas que separan a China de Estados Unidos.
El China Institute of Contemporary International Relations es el principal espacio de investigación del MSE. Se identifican también dos complejos de espionaje del MSE, Xiyuan al noroeste de Beijing, especializado en operaciones en el extranjero, reclutamiento y gestión de informantes; y el de la provincia de Jiangsu cerca de Shangai, que escruta secretos de defensa estadounidenses y sus tecnologías.
Estados Unidos también ha creado instancias especializadas en dar seguimiento a China. Por ejemplo, la Agencia Central de Inteligencia (CIA, por su sigla en inglés) creó el China Mission Center donde se concentran informaciones acerca de China provenientes de todas las estaciones de espionaje. La CIA da seguimiento a las biotecnologías y los semiconductores; la CIA busca la opinión de académicos y empresarios para establecer los posibles campos de desarrollo tecnológico de China, dado que muchas empresas y centros de investigación han trabajado con contrapartes chinas.
El artículo concluye que uno de los problemas cruciales es la dificultad para dar seguimiento a las numerosas iniciativas que se producen en China, mediante métodos de espionaje que no son abarcantes (dato crucial 1).
1. Uno de los casos en que el espionaje estadounidense se retrasó fue la fabricación de un semiconductor de siete nanómetros por parte de la empresa líder china Semiconductor Manufacturing International Corporation. La inteligencia estadounidense no tuvo información de ese desarrollo, para el cual se evaluaba que China no tenía capacidades.
En el ámbito del espionaje convergen las cuestiones económicas, militares y políticas. La disputa por la hegemonía ha instalado una competencia cada vez más intensa entre los servicios de la llamada inteligencia de ambas potencias. NYT argumenta que China está muy cerca de las capacidades estadounidenses, en un argumento típico de los liberales, para apuntalar la necesidad de invertir más recursos en las actividades de seguridad y defensa.
Y más allá, lo relevante para las sociedades es el crecimiento acelerado de los medios de represión y de control social.