Electronics. Taiwan 2.0. The island’s electronics firms are in need of an upgrade
The Economist [2016], "Electronics. Taiwan 2.0. The island’s electronics firms are in need of an upgrade", The Economist, London, 26 de marzo, http://www.economist.com/news/business/21695529-islands-electronics-firm...
Japón está siendo examinada por su posible apertura a la inversión extranjera, prueba de ello es la oferta de Hon Hai, empresa taiwanesa, para tomar el control de Sharp, empresa japonesa en déficit.
Hon Hai ha realizado varias ofertas, de tener éxito y absorber tanto la marca como la tecnología de Sharp, la acrecentada empresa será capaz de ofrecer a sus clientes grandes, como Apple, una gama más amplia de piezas e incluso vender bienes de consumo innovadores.
El ministro de economía de Taiwán, John Deng, afirma que el acuerdo podría servir de modelo para otras empresas de electrónica que deseen ser más globales.
Antes, casi todas las empresas de electrónica se localizaban dentro del país, pero a partir de que China abrió sus fronteras hubo una relocalización, dando paso a la competencia. TSMC, empresa de semiconductores de Taiwán, es fuerte, pero sus principales fabricantes de pantallas, Innolux (controlada por Hon Hai) y AU Optronics, se enfrentan a la competencia de China Star optoelectrónica.
De todos los países que dependen de las compras de China, Taiwán es quien tiene más que perder en la industria electrónica. Corea del Sur también depende de China, con la diferencia de que sus empresas venden una mayor variedad de productos.
Muchas de las empresas de electrónica de Taiwán son pequeños enlaces anónimos en la cadena de suministro de otras compañías.
Comenzar a vender aparatos con sus propias marcas podría ofrecer a estas empresas mayores beneficios y así salir adelante. Sin embargo, la experiencia demuestra que es difícil hacer esto sin entrar en competencia con sus clientes más grandes, de los cuales dependen.
El presidente de Taiwán, Tsai Ing-wen, se ha comprometido a reformar la economía del país pasando de un modelo orientado hacia la eficiencia a uno impulsado por la innovación, reducir su dependencia con China, así como promover mayores vínculos tecnológicos con Estados Unidos y Japón. La gran interrogante es ¿cómo se logrará?
Las empresas electrónicas aportan en conjunto el 40% de las exportaciones de Taiwán y el 15% de su PIB.
Las exportaciones totales de Taiwán se van reduciendo 12% año tras año, mientras que las pantallas de visualización y otros "instrumentos ópticos" han caído 34%.
La competencia en temas de tecnología se encuentra fundada por la innovación, que a la vez depende del nivel de capital, o bien, el nivel de adquirir financiamiento. Las empresas japonesas de no contar con alguna de éstas, se encuentran en gran riesgo de ser absorbidas por su vecino del noroeste.