En su primer reporte de ingresos de 2016, Apple señaló la primera caída en sus ingresos desde 2003, horas después del anuncio, sus acciones cayeron 8% (46 mil millones de dólares).

La explicación del declive está en la caída de las ventas de iPhone, el producto que más ingresos reporta a Apple, así como en la falta de atractivo de los otros productos. Las ventas de iPhone fueron 18% menores en comparación con 2015 y se espera que caigan más, a menos que las nuevas características del iPhone 7 superen ampliamente las de los modelos anteriores. Otros productos, como los iPads, han perdido interés o no han sido tan exitosos, como el Apple Watch. Además, los teléfonos inteligentes siguen realizando la mayoría de las actividades que un dispositivo electrónico hace, como dar direcciones, por lo que productos como el Apple Watch, cuyo precio rebasa los 300 dólares, no tienen gran demanda.

Apple está incursionando en otros negocios, pero aún no logra consolidarse. Por ejemplo, en los autos eléctricos, en la televisión y en la realidad aumentada.

El reto para Apple es vender otro producto cuya popularidad, y ventas, se asemejen a las del iPhone.