Are China's state giants reformable? SASAC, the Chinese agency that oversees a hundred or so state-owned enterprises, sets out its case.

Cita: 

The Economist [2018], "Are China's state giants reformable? SASAC, the Chinese agency that oversees a hundred or so state-owned enterprises, sets out its case", The Economist, London, 1 de marzo, https://www.economist.com/news/business/21737536-sasac-chinese-agency-ov...

Fuente: 
The Economist
Fecha de publicación: 
Jueves, Marzo 1, 2018
Tema: 
Las empresas estatales en China, en contratendencia global han crecido y mantanido su protagonismo en la economìa.
Idea principal: 

Las Empresas de propiedad estatal o Empresas Estatales (EEs) siguen siendo el principal motor de la segunda economía mas grande del mundo, China. Representan el 40% en su Mercado de Valores, una tercera parte de las inversiones y dominan la industria pesada. Además que globalmente influyen en el precio de las commodities y están en proceso de expansión.

Las EEs también son relevantes debido a que son responsables de 45 centavos por cada dólar de deuda, por lo que son un factor determinante para la salud del sistema financiero chino. Y por otro lado, son una pieza crucial en las negociaciones entre China y Estados Unidos, por las fuertes presiones que occidente hace para la liberalización de la economía china, que desde su unión a la Organización Mundial de Comercio no ha cumplido las metas liberales.

La Comisión de Supervisión y Administración de Activos Estatales (SASAC por sus siglas en ingles), una agencia en el corazón de la industria estatal china, controla 100 de las mayores EEs. La impresión general que da SASAC es la de una organización que intenta modernizar las EEs pero en medio de una lucha por reconciliar objetivos aparentemente contradictorios, es decir, la dirección estatal de las empresas pero con una ambición privada por las ganancias empresariales.

A pesar de las reformas en la década del 2000 que prometían la renuncia del control estatal de las empresas, con la crisis de 2008 y el programa de estímulo del gobierno chino, la dirección fue a la contraria, las EEs se expandieron y con esto aumentaron su deuda. Y con su entrada al gobierno de China en 2012, Xi Jinping ha dado órdenes sobre las EEs y sobre las empresas privadas. Desde 2016, al menos 30 EEs que figuran en Hong Kong, han reformado sus constituciones para permitir al Partido Comunista Chino un rol formal en su gobierno.

Aunque SASAC no sea explicito, tiene tres objetivos contradictorios que cumplir: aumentar las ganancias y recortar la deuda; persuadir extranjeros de una mayor autonomía en las EEs; y consolidar el importante rol del Partido. Tanto SASAC como el Partido, estan involucrados e interesados en la intervencion de las EEs, el partido en dirigir la conducta de los directivos y SASAC en establecer sus límites estrategicos, es decir, ambos sin involucrarse en los resultados finales de las EEs

Una opción es imitar al Temasek de Singapur, una empresa independiente que se encarga de dirigir inversiones estratégicas que pretende maximizar los rendimientos a largo plazo con la menor intervención posible en el funcionamiento de la empresa. Sin embargo, SASAC explica que las 60 principales EEs son más grandes que las inversiones que maneja Temasek, y de existir un equivalente chino y además autónomo resultaría en una compañía demasiado grande y con mucho poder.

Entonces, existen intentos de SASAC por lograr esos objetivos pero sin muchas expectativas. El menos convincente es intentar cambiar la cultura de las EEs, para que estas puedan colocar los recursos como una empresa privada. Pero es imposible de verificar. Asimismo, hay propuestas por empresas mixtas; sin embargo, hay varias que ya cuentan con inversiones privadas pero poco han cambiado. También se ha presionado por “megafusiones” pero a pesar de que grandes EEs como la carbonera Shenhua Group, y la compaía energética China Guodian Group se hayan fusionado y logren aumentar beneficios y reducir la deuda, también crean enormes EEs con una influencia aún mayor.

Por otro lado están las ideas de SASAC que podrían hacer una diferencia. En industrias "competitivas" (como el carbón, acero, farmacéuticas y la construcción) permitirá que su participación caiga por debajo del 50%, indicio de voluntad de parte del Estado de ceder terreno. Además que CSAAE sugiere la expansión al exterior de las EEs mientras logren contener las tensiones políticas. Un ejemplo es ChemChina, que en 2016 compró la compañía química suiza Syngenta, por 46 mil millones de dólares. Ante las controversias causadas por la idea entre los suizos de que la empresa se dirigirá por los líderes del partido, ChemChina cedió un acuerdo poco común de autonomía, dejando la sede de la empresa en Basilea y con directores independientes.

La dificil tarea de SASAC para influir en los críticos radica en lograr que las EEs aumenten sus ganancias para demostrar que estas no deprimen los precios ni se les subsidia. A pesar de que sus ganancias han aumentado en 17% desde 2016, los rendimientos del capital aún son de 5%, la mitad que se espera para empresas privadas.

Datos cruciales: 

Las EEs representan 45 centavos por cada dólar de deuda china.

Las EEs participan con el 40% en su mercado de Valores, son una tercera parte de las inversiones y dominan la industria pesada.

ChemChina, en 2016 compró la compañía química suiza Syngenta, por 46 mil millones de dólares.

Nexo con el tema que estudiamos: 

Para las grandes empresas trasnacionales la propiedad estatal de las principales compañías chinas siguen siendo objeto de su interés. Este artículo refleja los intentos para presionar al Partido Comunista Chino para avanzar en la liberalización y privatización de su economía.

Es importante distinguir que aunque las empresas de propiedad estatal siguen teniendo un gran peso en la economía china (que ha aumentado tras la crisis de 2008 y con la llegada de Xi Jinping a la presidencia de ese país), el mayor dinamismo y el desarrollo de tecnología de punta son brindados por las empresas privadas de propiedad extranjera (corporaciones trasnacionales) y por las empresas privadas chinas. La estrategia del estado chino hacia cada uno de estos tipos de empresas es diferente; asimismo, su importancia cualitativa particular para el capitalismo chino es distinta y debe ser entendida con claridad.