C.E.O. Pay Remains Stratospheric, Even at Companies Battered by Pandemic

Cita: 

Gelles, David [2021], "C.E.O. Pay Remains Stratospheric, Even at Companies Battered by Pandemic", The New York Times, New York, 24 de abril, https://www.nytimes.com/2021/04/24/business/ceos-pandemic-compensation.html

Fuente: 
Otra
Fecha de publicación: 
Sábado, Abril 24, 2021
Tema: 
Las compensaciones de los directores ejecutivos y trabajadores a través del tiempo y durante la pandemia de Covid-19
Idea principal: 

David Gelles es un reportero de la sección de negocios para The New York Times. También ha trabajado para el Financial Times.


La pandemia del coronavirus hundió al mundo en una crisis económica, aumentó la tasa de desempleo en Estados Unidos y dejó a millones de estadounidenses con dificultades para llegar a fin de mes. A pesar de esto, en muchas de las compañías más fuertemente afectadas por la crisis sanitaria, los ejecutivos a cargo recibieron pagos estratosféricos.

Las riquezas divergentes de los directores ejecutivos y trabajadores del día a día ilustran la gran división existente en un país afectado por una desigualdad económica marcada. Los ejecutivos amasan fortunas mientras que los trabajadores despedidos hacen fila en los bancos de comida.

La diferencia entre la compensación a ejecutivos y la paga a un trabajador promedio ha aumentado durante décadas. Los directores ejecutivos ahora ganan, en promedio, 320 veces más que un trabajador común, de acuerdo con el Instituto de Política Económica. En 1989, esa proporción fue de 61 a 1. De 1978 a 2019, la paga creció 14% para los trabajadores comunes; para los directores ejecutivos aumentó 1 167%.

La pandemia sólo agravó esta disparidad. Cientos de compañías otorgaron a sus líderes paquetes de compensación con montos mucho más altos que los ingresos que la mayoría de los estadounidenses recibirán en toda su vida. AT&T, T-Mobile, Tenet Healthcare, L Brands (dueño de Victoria’s Secret), entre muchas otras, fueron las empresas que recortaron su personal, pero al mismo tiempo aumentaron las compensaciones para sus directores ejecutivos. Docenas de compañías públicas ya han reportado que pagaron 25 millones de dólares o más sus directores ejecutivos en el último año.

Muchas compañías defienden sus planes de compensación. Incluso, en algunos casos, los directores ejecutivos se llevaron menos de lo que tenían derecho. La mayoría de los directivos reciben gran parte de su paga en acciones, las cuales pueden decrecer en valor y, a menudo, acumulan pérdidas durante varios años. El arreglo por el cual los ejecutivos reciben una parte de sus compensaciones en acciones intenta alinear la paga con el rendimiento de las acciones de la compañía: cuando el precio de las acciones aumenta, se supone, inversionistas y ejecutivos comparten las ganancias.

En muchas compañías, el precio de las acciones subía a pesar de la turbulencia en la economía y sin importar si la compañía presentaba utilidad o no. Desafiando a la lógica, el mercado de acciones ha subido por meses, más que compensando las pérdidas sufridas al principio de la pandemia. La resiliencia de los mercados y el sentimiento que los malos resultados por la pandemia fueron un fenómeno que afectó por igual a todas las empresas, no una consecuencia de malas decisiones de los ejecutivos, ayudaron a las compañías a justificar sus grandes planes de compensación.

Datos cruciales: 

1. En 2020 los directores ejecutivos ganaron, en promedio, 320 veces más que el trabajador promedio, de acuerdo con el Instituto de Política Económica. En 1989, esta proporción de fue de 61 a 1. De 1978 a 2019, la paga creció 14% para los trabajadores comunes; para los directores ejecutivos aumentó 1 167%.

Nexo con el tema que estudiamos: 

La disparidad en el ingreso entre ejecutivos y trabajadores promedio continúa perpetuando y agravando la desigualdad económica existente en la economía. Los planes de compensación para ejecutivos en los que se incluyen acciones de la misma compañía busquen que las decisiones y objetivos de los directivos se alineen con las metas de los inversionistas. Sin embargo, al ser públicas, estas acciones están atadas a lo que pase en el sistema financiero, que no siempre refleja fielmente lo que sucede en la economía real.