Introducción

El Departmento de Homeland Security (DHS, por sus siglas en inglés) de Estados Unidos fue creado en 2002 con el objetivo de proteger a la población de amenazas vistas y no vistas, sus acciones obedecen desde ataques terroristas hasta desastres naturales, incluyendo la pandemia de COVID-19.

El sexto reporte del Panel Intergubernamental del Cambio Climático ha dejado claro que los impactos del cambio climático sobre la seguridad nacional e internacional son vastos. Atendiendo la Orden ejecutiva 14008 (Cómo hacer frente a la Crisis climática en casa y en el extranjero del 27 de enero de 2021), el DHS presenta por primera vez el Marco de trabajo estratégico para abordar el cambio climático, y así promover la construcción de resiliencia en todas las comunidades a lo largo del país.

Los impactos del cambio climático representan una amenaza para la seguridad y la prosperidad de Estados Unidos, el calentamiento inducido por el humano ha conducido a cambios en el ambiente que en el futuro continuarán presentándose, como el aumento de las temperaturas de los océanos, el derretimiento del hielo en los mismos, olas de calor, sequías, incendios, tormentas tropicales e inundaciones. Dichos acontecimientos afectan desproporcionalmente a las comunidades más vulnerables.

Resumen

El DHS establece un marco de trabajo dirigido a seguir apoyando y coordinando toda la seguridad nacional para hacer frente a los impactos del cambio climático. El Departamento propone objetivos, principios y líneas de esfuerzo para contrarrestar los efectos del cambio climático en el país y sumarse al esfuerzo mundial para mitigarlo, mediante la preparación y pronóstico para los riesgos futuros y las oportunidades creadas por los desafíos del mañana.

El marco de trabajo del Departamento se divide en tres secciones, 1) fines estratégicos para afrontar el reto del cambio climático, 2) principios rectores y 3) líneas de esfuerzo.

A manera de conclusión, el marco de trabajo del DHS pretende mitigar los impactos inmediatos del cambio climático sobre el territorio estadounidense, al mismo tiempo que perseguirá soluciones de largo plazo que apoyen a todas las comunidades de la nación, promoviendo los esfuerzos para aumentar equitativamente la resiliencia nacional, ello exige la habilidad del DHS para adaptarse a los cambios en los riesgos del cambio climático resultantes de la competencia estratégica, las tendencias demográficas, el envejecimiento de la infraestructura y la tecnología emergente.

El DHS establece la siguiente terminología para el presente marco de trabajo.

-Resiliencia climática: capacidad de anticiparse, prepararse y adaptarse a las condiciones cambiantes y resistir, responder y recuperarse rápidamente de las perturbaciones, los retos y los riesgos relacionados con el clima mediante la adaptabilidad, la innovación y la preparación.

-Adaptación del cambio climático: ajuste de los sistemas naturales o humanos a un entorno nuevo o cambiante.

-Mitigación del cambio climático: reducir las emisiones y estabilizar los niveles de gases de efecto invernadero que atrapan el calor en la atmósfera.

-Actividades nacionales sobre el cambio climático: modificar las estrategias, los planes y los programas del DHS para aumentar la resiliencia nacional, hacer frente a las amenazas nuevas o ampliadas relacionadas con el clima para el territorio nacional y animar al pueblo estadounidense y a las entidades de Estados Unidos, incluidos los gobiernos estatales, locales, tribales y territoriales (SLTT), a adaptarse a las condiciones ambientales nuevas o cambiantes que plantea el cambio climático.

El desafío del cambio climático

Actualmente el medioambiente registra el periodo más caliente de la civilización moderna. La Evaluación nacional del clima de 2018 identificó que la temperatura promedio anual global para la tierra y el océano aumentó aproximadamente 1.8°C de 1901 a 2016, 0.65°C del incremento corresponde al periodo de 1986 a 2015. El reporte del Panel Intergubernamental del Cambio Climático (IPCC, por sus siglas en inglés) de las Naciones Unidas emitido el 9 de agosto de 2021, determinó que el calentamiento global está aumentando más rápido de lo esperado por los científicos, incluso algunos daños del cambio climático podrían ser irreversibles.

Aunque los aumentos en la temperatura parecen ser marginales, pequeños incrementos generan efectos devastadores, fenómenos como el aumento de las temperaturas del océano, el desterramiento del hielo del mar, aumento del nivel de mar, olas de calor, inundaciones y la acidificación de los océanos se volverán más frecuentes en el futuro a pesar de emprender acciones de mitigación a tiempo.

Desde 1980, en Estados Unidos los desastres naturales han sido equivalentes a 298 miles de millones de dólares; se estima que entre 1980 y 2020 ocurren en promedio anual 7.1 eventos, y entre 2016 y 2020 la cifra aumentó a 16.2 eventos por año. En las últimas cuatro décadas los desastres naturales han causado 14 mil 492 muertes. El cambio climático además de impulsar catástrofes a gran escala en el camino generará un aumento de los factores de estrés crónico (inundaciones y sequias). Por ejemplo, entre mayo y abril de 2020 las costas estadounidenses sufrieron el doble de inundaciones que hace 20 años, 14 de estas comunidades a lo largo del sudeste atlántico y de las costas del golfo vieron aumentar las inundaciones entre 400 y 1100% del 2000 al presente.

Por otro lado, el derretimiento de hielo en el Ártico ha comenzado a incentivar la competencia geoestratégica por los recursos nacionales como el agua, el petróleo y los minerales, ello representa una amenaza para la seguridad nacional. A medida que el cambio climático interactúa con otros determinantes los riesgos sobre el territorio se modifican.

“El impacto corrosivo de estas tendencias hará que las naciones sean cada vez más vulnerables a la inestabilidad interna, con amplias implicaciones para la seguridad regional y fronteriza y los intereses básicos de la seguridad nacional (p.9)”. Los países revisionistas tratarán de explotar la inestabilidad provocada por el cambio climático para interrumpir el orden migratorio, podrían experimentarse crisis fronterizas en la frontera de Estados Unidos con México y Alaska.

Fines estratégicos para afrontar el reto del cambio climático

Para mitigar los impactos del cambio climático, el DHS se compromete con la sociedad a: salvaguardar el territorio nacional de las catástrofes actuales y previstas provocadas por el cambio climático, informar a los estadounidenses para que puedan adaptarse a los riesgos actuales y previstos, aumentar la resiliencia nacional, modelar una resiliencia sostenible en el largo plazo, fomentar los esfuerzos de resiliencia, adaptación y recuperación que aborden las disparidades asociadas, como las basadas en la raza y el nivel de ingresos, perseguir la justicia medioambiental y crear oportunidades para todos los estadounidenses.

Principios rectores

“Los tres principios rectores de este Marco son condiciones previas para el éxito en el esfuerzo colectivo para hacer frente al cambio climático, y se incorporarán a la planificación y la toma de decisiones en todos los niveles de la organización (p.10)”.

Previsión. La previsión estratégica es una herramienta para enfrentar la incertidumbre y complejidad, mediante la incorporación de ciencia del clima a la planeación y actividades del DHS. Ello permitirá al DHS prepararse para un futuro que difiera drásticamente del pasado y presente debido al cambio climático.

Unidad de esfuerzo. La comprensión, mitigación y adaptación al cambio climático y sus impactos requiere de la cooperación en cada nivel del gobierno y la sociedad. El DHS promoverá la cooperación con otras agencias para acceder a la mejor ciencia del clima, apoyar una solución del problema interdisciplinaria y hacer mejor uso del tiempo y recursos limitados.

Innovación. Para atender los cambios constantes de los riesgos del cambio climático, el DHS pretende construir una cultura de innovación, reuniendo los esfuerzos del sector público y privado. El desarrollo de nuevas maneras de mitigar los impactos del cambio climático por ambos sectores permitirá a la nación crear una cultura de innovación empoderada por una previsión estratégica, fortaleciendo principalmente la innovación del sector privado para aumentar la mitigación, residencia y adaptación.

Líneas de esfuerzo

Cada una de las siguientes líneas de esfuerzo contribuye a la totalidad de los fines estratégicos y construye colectivamente la resiliencia climática:
-Capacitar a las personas y a las comunidades para aumentar la resiliencia climática.
-Prepararse para responder a los aumentos de las emergencias provocadas por el clima.
-Incorporar la previsión y la ciencia del clima en la estrategia, la política, los programas y los presupuestos.
-Invertir en un DHS sostenible y resistente.
-Desarrollar una fuerza de trabajo del DHS informada sobre el cambio climático.

Línea de esfuerzo 1: Capacitar a los individuos y a las comunidades para construir resiliencia climática

“La resiliencia no es el resultado de un solo programa gubernamental, sino de millones de decisiones tomadas por individuos, propietarios de viviendas, empresas y gobiernos locales. El DHS promoverá la información, educación, divulgación y orientación a través de su red única de relaciones con SLTT, para incentivar las opciones que aumenten la resiliencia, fomenten la justicia ambiental y mitiguen el cambio climático (p.11).”

Una de las principales funciones del DHS será la provisión de fuentes de información confiables y la orientación de la gestión del riesgo para el sector público y privado ya que una mejor información permite a las comunidades tomar decisiones de inversión transformadoras.

Mientras todas las comunidades en Estados Unidos serán afectadas por el cambio climático, cada comunidad tiene su propio conjunto de retos, por ello el DHS atenderá los impactos desproporcionadamente adversos sobre la salud humana y el ambiente en comunidades minoritarias y con nivel de ingresos bajo.

La creación de infraestructura aumenta la probabilidad de mitigar o adaptar a la población a los impactos del cambio climático, el programa Building Resilient Infrastructure and Communities tiene como objetivo cambiar el enfoque federal del gasto en desastres naturales hacia la inversión proactiva y apoyada por la investigación en la resiliencia de la comunidad, la creación de infraestructura pretende ser financiada tanto por el sector público como privado, de manera que se promueva la innovación y la resistencia comunitaria, y así reducir la dependencia de la energía eléctrica. En comunidades marginadas, una infraestructura mejorada permitirá no sólo preservar dichas comunidades sino también prosperar.

El DHS cuenta con autoridades reguladoras que podrían incentivar opciones que mitiguen el cambio climático, como la resiliencia y la adaptación, así como integrar la equidad y la justicia ambiental en los esfuerzos de resiliencia.

Línea de esfuerzo 2: Crear una preparación para responder al aumento de las emergencias provocadas por el clima

“Incluso con medidas agresivas para mitigar el cambio climático, Estados Unidos y otros países del mundo experimentarán crecientes climas extremos y estrés ambiental en las próximas décadas […] el DHS y sus componentes evaluarán, se prepararán y responderán al aumento de los desastres naturales generados por el cambio climático, será mediante la disminución de las brechas de capacidad y aumento de la solidez de los modelos personales y de emergencia que el DHS, junto con la sociedad desarrollarán soluciones a largo plazo (p.13)”.

Desastres naturales como las “inundaciones molestas” son más intensas pero menos crónicas, por lo tanto se requiere de una respuesta diferente. El DHS se compromete a buscar nuevas formas de emplear a las autoridades existentes en colaboración con otras agencias federales para prepararse y responder a crisis que quedan fuera de la actual definición de desastre o emergencia de la Ley Stafford.

El DHS también mejorará el análisis de datos para capturar el verdadero costo y frecuencia de las respuestas ante el impacto del cambio climático, cálculos como el retorno de la inversión permitirán al Estado otorgar mayor información sobre la inversión y presupuesto necesarios para mitigar el cambio climático.

En la tarea de mitigación del cambio climático, el DHS fomentará la participación de la industria, la academia y el público para crear e implementar soluciones a los desafíos urgentes, que van desde seguridad hasta intercambio de información pública.

El DHS divulgará los últimos avances científicos y buscará nuevas tecnologías para mejorar la preparación, la respuesta y la recuperación, y para traducir el conocimiento e innovación en herramientas para uso cotidiano de las comunidades.

Línea de esfuerzo 3: Incorporar la previsión y la ciencia del clima en estrategia, política, programas y presupuestos

“El cambio climático interactuará con la competencia estratégica, los cambios demográficos y las tecnologías emergentes para crear nuevos riesgos y oportunidades, al mismo tiempo que aumenta la complejidad de los desafíos existentes de la seguridad nacional de Estados Unidos (p.14).”

Por ejemplo, el Ártico se ha convertido en un espacio de competencia estratégica con China y Rusia, esto es evidencia de que los impactos del cambio climático se extienden mucho más allá de la degradación del medioambiente. El cambio climático tiene implicaciones para la seguridad de las fronteras y el modo de vida de Estados Unidos.

El DHS se prepara para atender estos desafíos mediante la aplicación de la ciencia del clima, la previsión estratégica, los programas y los presupuestos; y de la mano de otros niveles de gobierno, el mundo académico y el extranjero.

Por lo anterior, el DHS priorizará la investigación y desarrollo académicos y científicos que profundicen en la comprensión de los riesgos y oportunidades que el cambio climático genera, el objetivo es buscar soluciones que mitiguen el cambio climático o protejan a la nación de sus impactos.

La prospectiva estratégica, basada en datos, planificación y modelación de escenarios, permitirá al DHS identificar tendencias mundiales a impactos relevantes, fortalecer la conexión entre el proceso de presupuesto y política para construir una estrategia de mitigación de largo plazo y plantear soluciones creativas que puedan incluir a nuevas autoridades o políticas.

Línea de esfuerzo 4: Invertir en un DHS sostenible y resistente

El cambio climático también afecta el personal, los activos y las operaciones del DHS, por lo que para continuar sirviendo a la sociedad estadounidense, el DHS se asegurará de que sus propias operaciones, activos y personas sean resistentes al impacto del cambio climático. Por un lado el DHS trabajará arduamente para reducir la huella de carbono, Por otro lado como la tercera agencia más grande del gobierno federal, el DHS tiene la oportunidad de realizar inversiones de mercado en edificios eficientes en energía y adquirir vehículos eléctricos del gobierno.

A través del CAP, el DHS se compromete a reducir significativamente sus emisiones de gases de efecto invernadero, en esta estrategia resulta importante incorporar la resiliencia a las operaciones del DHS para dar continuidad a las políticas de mitigación del cambio climático.

Los impactos del cambio climático ponen en riesgo a los agentes, oficiales, caninos y caballos del DHS, al enfrentarse a olas de calor, incendios forestales y tormentas extremas. El aumento de la temperatura mejora las condiciones de vida de los mosquitos, pulgas y garrapatas, al ser organismos que difunden la enfermedad de Lyme y el virus del Nilo occidental y cuyos huéspedes al estar en contacto frecuente con humanos, aumentan los riesgos de una pandemia por enfermedad zoonótica.

Por lo tanto, es fundamental considerar la salud y seguridad de los propios trabajadores del DHS en las prácticas de gestión de riesgos.

Línea de esfuerzo 5: Desarrollar una fuerza de trabajo del DHS informada sobre el cambio de componentes

Los desafíos y oportunidades que presenta el cambio climático requieren que el DHS profundice el conocimiento científico, agencias científicas como la NASA, la Administración Nacional del océano y la atmósfera, así como programas de investigación del cambio climático global de Estados Unidos desarrollarán un marco de trabajo común que traduzca hallazgos científicos en impactos para mitigar el cambio climático en las comunidades de todo el país.

“Vamos a adaptar el apoyo que el DHS recibe de los centros de investigación y desarrollo financiados por el Gobierno federal para llenar las brechas de conocimiento (p.16)”. El DHS en el corto plazo explorará la conformación de becas y consejos asesores para reclutar expertos en materia y científicos en cambio climático, mitigación y adaptación, mientras que en el largo plazo el DHS explorará la creación de nuevas autoridades de contratación y programas para retener el talento del cambio climático a través de acciones tanto del Departamento como del Congreso.

Conclusión e implementación

El presente Marco de trabajo representa el compromiso y previsión firme del DHS, a través de sus cinco líneas de esfuerzo y principios rectores, de salvaguardar la patria de los impactos inmediatos del cambio climático, al mismo tiempo que busca soluciones a largo plazo y que apoyen la resiliencia, la protección y la prosperidad de las comunidades de todo el país.

A medida que se disponga de nueva información, emanada de los esfuerzos del análisis de riesgos climáticos del Departamento de Defensa, ésta será integrada a las políticas, estrategias y programas del DHS.