Un desastre climático en cámara lenta: la propagación de tierras estériles

Cita: 

Nicas, Jack [2021], "Un desastre climático en cámara lenta: la propagación de tierras estériles", The New York Times, New York, 4 de diciembre, https://www.nytimes.com/es/2021/12/04/espanol/brasil-desertificacion.html

Fuente: 
Otra
Fecha de publicación: 
Sábado, Diciembre 4, 2021
Tema: 
La desertificación amenaza el noroeste de Brasil
Idea principal: 

Jack Nicas es el jefe de la oficina de Brasil de The New York Times, que cubre Brasil, Argentina, Chile, Paraguay y Uruguay. Tiene su sede en Río de Janeiro.


Al noreste de Brasil, familias que vivían de la tierra desde hace más de 150 años con cultivos de algodón, frijol y un río que desembocaba en una cascada, ahora temen por sus vidas porque el aumento de la temperatura está acabando con sus condiciones de subsistencia. Gran parte de la región se está secando y convirtiendo en un desierto como consecuencia del cambio climático y de la tala de árboles para la extensión de tierras ganaderas.

La desertificación se ha presentado como la consecuencia de la combinación de las altas temperaturas con cada vez menos lluvias, un aumento de la deforestación y exceso de labranza dejando la tierra seca. Impidiendo que puedan volver a cultivarse alimentos y que la gente obtenga sus medios de subsistencia de la tierra. Esta es la situación que amenaza la zona noreste de Brasil, región conocida ahora por sus sequías y pobreza.

El último informe de Naciones Unidas sobre cambio climático advierte de los graves impactos que se están presentando en la región. La pérdida de la fertilidad del suelo y la disminución de agua señalan la emergencia de una situación que podría no tener retorno.

Por su parte, la presidencia continúa anulando las regulaciones ambientales, dirigiendo el aumento de la deforestación en Brasil y, a la par, privilegiando los intereses de los mineros y ganaderos. Jair Bolsonaro no ha señalado ningún interés en revertir el daño que se está extendiendo al noroeste del país.

En la región de Seridó las sequías frecuentes fueron aprovechadas para levantar la industria de la cerámica. Para una zona que anteriormente dependía de las cosechas y el ganado, la cerámica se encontró como alternativa cuando los depósitos y los ríos se evaporaban. Ahora la permanencia de esas condiciones ha limitado la disponibilidad del agua, la leña y el barro indispensables para la elaboración de las tejas.

El desarrollo de esta industria ha contribuido al detrimento de la región. La producción de tejas y cerámica ha aumentado con los años, provocando la extracción de grandes cantidades de agua, el aumento de la deforestación y la desertificación del suelo. Su impacto podría ser irreversible, ya que el barro que se extrae es crucial para mantener el equilibrio adecuado de nutrientes y humedad en las tierras circundantes.

Los efectos y las consecuencias se conocen, pero la producción no se detiene. Sólo va aumentando el número de familias que se arrepienten por vender su barro al darse cuenta que sus tierras quedaron estériles. Sin embargo, también son limitadas las opciones que tienen porque las temporadas de sequía cada vez son más largas.

Datos cruciales: 

1. La desertificación es un desastre natural que se desarrolla en cámara lenta en diversas zonas donde residen alrededor de 500 millones de personas, desde el norte de China y el norte de África hasta regiones lejanas de Rusia y el suroeste de Estados Unidos.

2. La zona noreste de Brasil, en la que se ubican las tierras áridas con mayor densidad poblacional del mundo, con alrededor de 453 millones de habitantes, es de las más expuestas al riesgo de la desertificación. La región vivió la sequía más larga de su historia de 2012 hasta 2017.

3. En agosto de 2021, el informe más reciente de Naciones Unidas sobre cambio climático reveló que el noreste de Brasil enfrenta temperaturas cada vez más elevadas, una disminución marcada de aguas subterráneas, y sequías más frecuentes e intensas. Imágenes satelitales y pruebas de campo muestran que 13% de la tierra ya perdió su fertilidad, mientras que casi todo el resto de la región está en riesgo.

4. En noviembre de 2021, datos gubernamentales de Brasil revelaron que la deforestación de la Amazonía está en su peor nivel desde otro momento crítico hace 15 años.

5. Aldrin Pérez, científico del gobierno brasileño que monitorea la desertificación, explicó que un centímetro de suelo tarda 300 años en depositarse, mientras que las empresas cerámicas toman de 91 a 152 centímetros de suelo cada vez que extraen el barro.

Nexo con el tema que estudiamos: 

La pobreza se exacerba a medida que los efectos del cambio climático se extienden y los gobiernos prefieren atender sus negocios con las grandes empresas. La situación en Brasil se recrudece porque la eliminación de regulaciones ambientales está acelerando la degradación medioambiental en la región, aumentando la deforestación y prolongando las sequías. La adaptación al cambio climático cada vez es más difícil porque los problemas se intensifican a la par de las carencias.