Antonio Heras: estudió sociología en la UNAM. Periodista, cuentista, poeta y novelista, la vocación poética de este escritor se manifiesta en cualquier género que explore, logrando textos cuya belleza literaria rompe la aspereza del ensayo, la crónica o la narrativa.

La mina Real de Ángeles del Grupo Frisco de Carlos Slim, en San Felipe, Baja California, detiene operaciones por incongruencias y desacuerdos con los trabajadores y arrendatarios.

Cientos de empleados acudieron a la Procuraduría Federal de la Defensa del Trabajador (Profedet) en Mexicali para levantar denuncias sobre despidos injustificados por parte del Grupo Frisco.

A todos se les notificó que habría suspensión de actividades en la mina, sin importar la antigüedad del trabajador. Algunos recibieron "renuncias voluntarias" condicionadas, mientras a los sindicalizados se les ofreció la "oportunidad" de continuar trabajando en Grupo Frisco, Aguascalientes. Sin embargo, sin apoyo extra de ningún tipo, ya sea en vivienda o trasporte, además de no hacer válido el tiempo que estuvieron trabajando en la mina Real de Ángeles.

Aunado a esto, los propietarios de las tierras han tenido conflicto con la mina, pues el contrato venció en octubre del 2019 y hay un desacuerdo en las nuevas cláusulas pues la mina desea mantener los mismos términos que el firmado en 1992, mientras que los arrendatarios buscan la mejora de condiciones en el ejido.

En su intento de negociación la empresa propuso una solución que fue rechazada por 214 ejidatarios, pues recibirían una cantidad mínima por sus tierras (Dato crucial 1). Esto, aunado a las denuncias de despido injustificado y las sanciones gubernamentales debido a las muertes que hubo en la mina, la llevaron a su cierre total.