2023: Expect a financial crash followed by major energy-related changes

Cita: 

Tverberg, Gail [2023], "2023: Expect a financial crash followed by major energy-related changes", Our Finite World, 9 de enero, https://ourfiniteworld.com/2023/01/09/__trashed/

Fuente: 
Otra
Fecha de publicación: 
Lunes, Enero 9, 2023
Tema: 
Perspectivas sobre la probable crisis financiera de 2023
Idea principal: 

Gail Tverberg es una actuaria estadounidense jubilada, trabajó en CNA Financial Corporation. Sus temas de interés se relacionan con las problemáticas de un mundo finito, y suele escribir sobre el fin del petróleo, gas, la escasez de agua y el cambio climático.

La economía se encamina al colapso financiero. En 2018 la economía global llegó a su límite de crecimiento como consecuencia del aumento poblacional y de rendimientos decrecientes en la extracción de recursos. La manipulación financiera y la pandemia de la Covid19 ocultaron el problema; pero la problemática regresa con más fuerza (Dato Crucial 1).

Entre 1981 y 2022 la economía se benefició del constante aumento de la deuda, las bajas tasas de interés, y una constante flexibilización cuantitativa. Mediante este juego financiero se ocultó que desde 1970 la extracción de combustibles fósiles es cada vez más costosa. Ahora, los bancos centrales intentan deshacerse de los excesos del sistema mediante altas tasas de interés y ajustes cuantitativos.

Las recesiones del pasado se superaron aumentando el suministro energético; pero la actual depresión no podrá solucionarse de esta forma. De hecho, la economía mundial solamente podrá encontrar cierta estabilidad eliminando algunos de los usos menos esenciales de la energía. Por ejemplo, una de las herramientas para aumentar la eficiencia de la economía es la regionalización. Si el comercio de los países se centrase entre vecinos cercanos, se reduciría el consumo mundial de energía y la economía funcionaria sin cambios tan drásticos. Otra herramienta para eliminar los excesos del sistema es reducir la ventaja comercial de Estados Unidos sustentada en el dólar como moneda de reserva mundial.

Es probable que durante 2023 se produzca una crisis financiera y se empiecen a eliminar las partes menos esenciales de la economía. El objetivo de este texto es explicar la forma en que se visualiza el panorama.

[1] El alto apalancamiento de la economía mundial actual no puede sostener tasas de interés más altas ni el ajuste cuantitativo

Elevar las tasas de interés disminuye el valor de los bonos y los estados financieros que usan estos bonos, como planes de pensión, no otorgarían rendimientos adecuados. En consecuencia, los gobiernos podrían tener que rescatar a más de una organización financiera. Asimismo, el financiamiento de préstamos se vuelve más costoso; por lo que aumenta los gastos para adquirir bienes de alto valor, como una casa. Pero, al mismo tiempo una deuda más costosa disminuye el precio de los activos; y, esta combinación incrementa el incumplimiento del pago de deuda.

La política monetaria del endurecimiento cuantitativo dificulta la capacidad para comprar bienes en el mercado internacional y provoca interrupciones en los mercados financieros. Además, es probable que en el corto plazo se agreguen más tensiones al sistema financiero. Por ejemplo, el fin del programa de Biden para retrasar el pago de la deuda de estudiantes, los problemas de China con los préstamos a sus promotores inmobiliarios, así como la petición al FMI por parte de varios países de condonar su deuda, entre otros fenómenos actuales.

Es muy probable que en un escenario con niveles de deuda más altos que en 2008 la crisis financiera sea mucho más grave.

[2] El mundo ya se dirige hacia una gran recesión. Es probable que esta situación comience en 2023

El Índice Global de Compras al Productor (PMI, por sus siglas en inglés) ha señalado de forma reiterada la caída y contracción de diversos sectores económicos (Dato Crucial 2). En Estados Unidos la situación económica no parece tan mala; pero un mundo en el que solamente a Estados Unidos le va relativamente bien, resulta insostenible. Estados Unidos necesita comprar materias primas, y vender productos terminados a otros países. Por tanto, es muy probable que la recesión se prolongue.

[3] El fondo del problema que el mundo comienza a experimentar es el exceso y el colapso, relacionados con el aumento de la población y rendimientos decrecientes en la extracción de recursos

La extracción de combustibles fósiles parece llegar a su límite, y las energías renovables no logran sustituirlos. El consumo de energía por persona alcanzó su máximo nivel en 2018 (Dato Crucial 1); desde entonces mantener el mismo consumo energético ha implicado pagar precios inaccesibles para muchas personas.

Pero la economía necesita consumir energía, sí disminuye su consumo energético comienza a desestabilizarse, y para sostenerse tendría que empezar a disminuir continuamente su tamaño. Si realmente el suministro energético está llegando a su límite y es la causa de la actual inflación, la economía empezará a reducir permanentemente el consumo de energía de todos sus procesos productivos. Es probable que estos cambios comiencen a la par de la próxima crisis financiera.

[4] Una gran crisis financiera en 2023 puede reducir el poder adquisitivo de muchas personas

La discontinuidad en las finanzas afectará a muchas instituciones financieras, desde bancos hasta planes de retiro. Si el problema se extiende demasiado los estados podrían ser incapaces de rescatar a todas las instituciones. En este escenario el poder adquisitivo de las personas se vería afectado pues los bancos podrían imponer límites para el retiro de sus cuentas, o, quizás, el valor de sus acciones disminuya. Incluso en caso de que los gobiernos decidan emitir mucho dinero posiblemente se desate una hiperinflación; en consecuencia, habrá pocos bienes disponibles para comprar.

[5] Mucha gente cree que la caída de la producción elevará el precio del petróleo. Pero si el verdadero problema es que el mundo ha llegado al límite de la extracción de combustibles, puede que la cuestión sea una demanda inadecuada y precios a la baja

Si con la crisis financiera las personas tienen que reducir gastos, habrá menos demanda y los precios podrían bajar. De hecho, cuando los niveles de consumo han caído, los precios del petróleo han sido bajos; y, con precios demasiado bajos las petroleras reducen la producción.

Otro problema importante en un escenario que se encamina al límite de la extracción de combustibles es la desigualdad salarial. Si se intensifica la pobreza y las personas reducen su consumo de elementos básicos que requieren de importantes cantidades de energía, como los alimentos o el transporte, los precios del petróleo y otros combustibles podrían caer por debajo de los mínimos necesarios para obtener rentabilidad.

[6] Si los precios del petróleo caen demasiado, es posible que la producción de gas, petróleo y carbón disminuya en 2023

Cuando los precios de los combustibles disminuyen también lo hace la producción de éstos. Además, los líderes políticos buscarán mantener bajo el precio de la energía, para evitar la inflación causada por el aumento del precio de los combustibles.

[7] Sin energía suficiente para todos habrá más conflictos

Es posible que surjan diversos conflictos. Los trabajadores peor pagados podrían manifestarse debido a la desigualdad salarial. También, los conflictos podrían manifestarse con una polarización política incluso al interior de los partidos políticos, y en caso de que los partidos se dividan se dificultaran las negociaciones y la administración gubernamental. Finalmente, los conflictos podrían materializarse en disputas entre países, como el conflicto Rusia-Ucrania; pero, en un escenario con menos energía disponible otras formas de conflicto serán más relevantes, como el sabotaje del sistema eléctrico, entre otras artimañas.

[8] Después de la discontinuidad, la economía estará menos conectada y más regionalizada. Rusia y China se alinearán, y Estados Unidos será otro polo de influencia

El transporte de mercancías y personas consume buena parte del petróleo. En un contexto con menos petróleo tendrán que reducirse las distancias de traslado; en consecuencia, habrá una tendencia a la regionalización. De hecho, China y Rusia están llegando a acuerdos en este sentido, pues tienen proyectos de largo plazo para proporcionar gas ruso a China y fortalecer los lazos militares. Por su parte, Estados Unidos se está concentrando más en los proyectos localizados en países americanos.

Es probable que China-Rusia y Estados Unidos se consoliden como los dos polos a los que se alineen el resto de países más cercanos a ellos. Los países más lejanos a estos dos polos, y que no tienen productos terminados de interés comercial, tendrán dificultades para encontrar aliados comerciales, y sus economías podrían contraerse más rápido.

[9] En un mundo regionalizado el dólar estadounidense perdería su papel como moneda de reserva mundial

En 2023 el dólar podría empezar a perder su papel como moneda de reserva mundial. El comercio entre China y Rusia podría empezar a realizarse en yuanes, sin recurrir a los fondos estadounidenses. Aunque es probable que el dólar mantenga su papel en las transacciones entre países americanos, especialmente cuando estas transacciones se relacionen con el sector energético.

El dólar como moneda de reserva mundial le ha permitido a Estados Unidos importar mucho más de lo que exporta (Dato Crucial 3). Si el dólar dejara de jugar dicho papel, la brecha entre las importaciones y exportaciones estadounidenses tendría que reducirse.

[10] En un mundo no globalizado todo tipo de producción disminuirá, especialmente la manufactura fuera del sudeste asiático, región que actualmente concentra buena parte de toda la producción

El escenario productivo más positivo es para China e India pues tienen la mayor capacidad de producción, y podrán seguir produciendo bienes y servicios con el acceso al petróleo ruso y de Medio Oriente. En caso de que su producción no logré satisfacer la demanda mundial, es probable que sus exportaciones se concentren en los países de su región geográfica.

En el otro extremo se encuentran Estados Unidos y Europa, pues tienen poca capacidad de fabricar bienes. Europa y Estados Unidos trasladaron al sudeste asiático sus operaciones fabriles, y ahora carecen de la capacidad y recursos necesarios para proyectos de energías limpias (Dato Crucial 4). De hecho, para Estados Unidos seria complicado e incluso imposible aumentar la manufactura de cualquier cosa, pues tendría que reunir materiales, echar a andar fábricas y capacitar trabajadores.

[11] Después de la crisis financiera es probable que sea frecuente la escasez de productos

La producción de bienes y servicios disminuirá por diversas razones. En primer lugar, una economía no globalizada impide acceder una amplia variedad de materias primas; por tanto, la cantidad y el tipo de bienes que se pueden producir será menor. En segundo lugar, los problemas financieros podrían disminuir la demanda, y por tanto, habrán precios bajos que no estimulan el aumento de la producción. Además, con una producción a la baja los países más lejanos quedarán excluidos de la distribución de ciertos bienes.

Si la economía mundial se reorienta al mercado local, Estados Unidos y Europa tendrán problemas para abastecerse de productos tecnodigitales, muebles, electrodomésticos, y refacciones de autos; pues la fabricación de este tipo de productos se concentra en el sudeste asiático.

[12] Hay muchas otras formas en que la organización de la economía podría contraerse para volverse una estructura disipativa más eficiente

Otros mecanismos mediante los cuales la economía podría reducirse consisten en recortes tanto en instituciones financieras centradas en el ahorro, como en programas sociales centrados en apoyar a las personas que no participan activamente del mercado laboral (Dato Crucial 5). Con esto, la población podría empezar a disminuir debido a la falta de alimentos y la mala atención médica; en consecuencia, incrementarían las limitaciones del suministro energético.

Además, en una situación en la que las empresas no pueden operar debido a la falta de energía y recursos, las contribuciones fiscales disminuirían; en consecuencia, gobiernos y organizaciones intergubernamentales enfrentarían serios y muy complicados problemas.

[13] Conclusión

Es probable que ocurra una crisis financiera en 2023. Esta crisis puede causar cambios mucho más profundos que la del 2008. Se pueden implementar algunas medidas de mitigación; como incrementar la durabilidad de las cosas, aumentar el reciclaje, potenciar la industria local, y reducir las distancias de transporte; por tanto, es probable que continue la tendencia a la regionalización, y la disminución del papel del dólar como moneda de reserva mundial.

Datos cruciales: 

1.- Gráfica de consumo energético per cápita:

2.- En octubre de 2022 la producción de servicios tuvo su peor desempeño desde mediados de 2020, asimismo la producción manufacturera tuvo la tasa de caída más pronunciada desde junio de 2020. Los subíndices del Indice Global de Compras muestran que los negocios se contrajeron al ritmo más rápido desde junio de 2020, y el entorno de demanda débil continuó respaldado por la disminución del comercio mundial.

El índice de nuevos pedidos de exportación del PMI señala que durante ocho meses consecutivos se han reducido las exportaciones mundiales. Asimismo, las presiones inflacionarias no disminuyeron en octubre de 2022, a pesar de que el costo de los recursos y costos de producción se encontraban en el punto mínimo en 19 meses.

3.- En 2021 las importaciones estadounidenses, fueron de 2.85 billones de dólares, mientras que las exportaciones, sin contar el sector de servicios, representaron 1.76 billones de dólares, es decir que hay una brecha de 1.09 billones. Considerando las exportaciones de servicios la brecha es de 845 000 millones de dólares.

4.-

5.- La dinámica económica podría forzar recortes en:

- Bancos, compañías de seguros, programas de pensiones
- El apalancamiento financiero de todo tipo.
- Programas gubernamentales que otorgan dinero a quienes no participan del mercado de trabajo como pensiones, seguro de desempleo, entre otros.
- Programas de educación superior.
- Programas de atención médica, especialmente para quienes tiene posibilidades de volver a trabajar.

Trabajo de Fuentes: 

Eaton, Collin [2023], “Exxon, Chevron Focus on Oil Projects in the Americas” The Wall Streer Jornal, New York, 4 de Enero, https://www.wsj.com/articles/exxon-chevron-focus-on-oil-projects-in-the-....

Tverberg, Gail [2022], " Ramping Up Renewables Can’t Provide Enough Heat Energy in Winter", Our Finite World, 20 septiembre, https://ourfiniteworld.com/2022/09/20/ramping-up-renewables-cant-provide....

Tverberg, Gail [2022], " Today’s Energy Crisis Is Very Different from the Energy Crisis of 2005", Our Finite World, 17 de noviembre, https://ourfiniteworld.com/2022/11/17/todays-energy-crisis-is-very-diffe...

Nexo con el tema que estudiamos: 

El panorama que dibuja el texto apunta a una reducción de la dinámica económica globalizada, pero sin un cambio sustantivo, y con un grave empeoramiento de las condiciones de vida para las mayorías que no tenemos una relación positiva con el mercado.