Welcome to ChatCCP. Can Xi Jinping control AI without crushing it?

Cita: 

The Economist [2023], "Welcome to ChatCCP. Can Xi Jinping control AI without crushing it?", The Economist, London, 22 de abril, https://www.economist.com/china/2023/04/18/can-xi-jinping-control-ai-wit...

Fuente: 
The Economist
Fecha de publicación: 
Sábado, Abril 22, 2023
Tema: 
Las regulaciones del estado chino sobre la inteligencia artificial generativa pueden socavar con la innovación
Idea principal: 

La fiebre por la Inteligencia artificial (IA) generativa también se ha propagado a China junto con los riesgos existenciales que derivarían de uso (dato crucial 1). No obstante, el caso chino es diferente al de Occidente puesto que se trata de una nación donde la represión a la libertad de expresión impera en todos los medios de comunicación masiva y en la sociedad. De esta manera, puede que la utilización de chatbots como ChatGPT vayan en contra de los ideales del Partido Comunista Chino (PCC). Se teme que el PCC en su necesidad por la regulación y la vigilancia termine socavando las innovaciones en la IA.

Para las firmas tecnológicas chinas, innovar en IA representa una nueva oportunidad para generar ganancias (como sucedió con la llegada del internet o los teléfonos inteligentes) luego de los efectos negativos del veto estadounidense hacia la exportación de productos de alta tecnología chinos como los semiconductores.

Pero el PCC también teme por la amenaza que representa la IA para su forma de gobernar. Es por eso que el 11 de abril de 2023 trazaron una serie de reglas para regular la IA que corren a cargo de la Administración del Ciberespacio de China (CAC, por sus siglas en inglés). Lo que se estipula es lo siguiente:

• Las empresas deben presentar una evaluación de seguridad al estado antes de utilizar productos relacionados con IA generativa.

• Las empresas son responsables del contenido que se genere.

• La IA generativa no debe subvertir el poder estatal, incitar a la secesión, dañar la unidad nacional ni perturbar el orden económico o social.

También existen reglas que son aplicadas desde 2022 relacionadas con este tema, tal es el caso de la prohibición de contenido audiovisual generado por IA sin etiquetas claras de origen.

Así, el enfoque chino hacia la regulación de productos derivados de IA generativa se cataloga como fragmentario y reaccionario. En este sentido, cuando llegó el internet a China, el gobierno estableció un gran contrafuegos para bloquear todo contenido de la web proveniente del extranjero y que supusiera una amenaza para los ideales del PCC, así logro crear un internet que sirviera para sus propios fines.

En el caso de la IA generativa y los chatbots, resulta difícil vislumbrar la creación de este tipo de tecnología —que aún tiende ha generar respuestas erróneas— en China puesto que iría en contra de las políticas restrictivas de su gobierno. Ante esto, algunos expertos creen que no todas las reglas serán aplicadas al pie de la letra por el CAC porque incluso dentro del nuevo reglamento existe cierto margen de tolerancia. Es menester mencionar que en ciudades como Shanghai, la regulación local es aún más flexible e infracciones menores no son castigadas.

Pero aunque la regulación pueda pasar ciertas faltas, el carácter arbitrario del presidente chino Xi Jinping muestra que cuando algo no le gusta, lo cambia; en este marco, el CAC tiene que seguir las ordenes del presidente (dato crucial 2). Si esto no representa un problema, la disponibilidad de datos sí, ya que ahora las empresas tienen que pedir permiso al gobierno para disponer de los datos de la población (dato crucial 3). En resumen, el desarrollo de la IA generativa en China no solo tiene que lidiar con las nuevas regulaciones, sino que también tiene que obedecer a las antiguas por lo que esto podría significar un replanteamiento de la industria de la IA generativa en general.

Gelatina nueva, clavos nuevos

El plan original del PCC entorno a la IA de hace seis años era alcanzar un alto grado de innovaciones para 2025 y dominar dicha industria para 2030. En este sentido, el progreso a sido mixto debido a que a no a todas las empresas les ha ido mal por el tema de las regulaciones, tal es el caso de ByteDance (matriz china de TikTok), los autos autónomos o el reconocimiento de imágenes asistido por IA. Por el contrario, el panorama para la IA generativa arroja dos posiciones: algunos creen que obstaculizará la innovaciones y otros consideran que el ingenio chino lo superara como sucedió con internet.

La actual regulación de la IA china sería una de las mejores si se le compara con otros lugares y por tanto podría de influir entonces en el debate sobre las regulaciones de dicha tecnología. Ciertamente, bajo la lógica de China, internet no es un lugar para la libertad de expresión, una idea que se contrapone con la visión occidental que podría generar choques a futuro sobre los fines y riesgos que derivan de la IA.

Datos cruciales: 

1) Alibaba, Baidu, Huawei y SenseTime han hecho alarde de sus modelos de inteligencia artificial (IA) generativa al asegurar que pueden generar imágenes, fungir como asistentes de voz y ser motores de búsqueda. Sus apuestas por crear un chatbot similar a ChatGPT se han cristalizado bajo los nombres de Ernie Bot (Baidu), SenseChat (SenseTime) y Tongyi Qianwen (Alibaba).

2) En los último años, las empresas de campos como el comercio electrónico, las redes sociales y los videojuegos han tenido que replantearse sus modelos de negocio. En 2021, el estado chino calificó a los videojuegos como “opio espiritual” y pidieron a las empresas de videojuegos dejar de concentrarse en el resultado final y reducir el deseo de jugar de los niños.

3) En 2022, la Administración del Ciberespacio de China (CAC) multó a la empresa Didi Global (empresa de viajes compartidos) con el equivalente a 1 200 millones de dólares por recopilar ilegalmente y mal usar los datos de los usuarios.

Nexo con el tema que estudiamos: 
El capitalismo de vigilancia del Partido comunista chino muestra un sentido contrario a lo que sucede en Occidente con las corporaciones transnacionales puesto que en China las empresas están para apegarse y servir al estado mientras que del otro lado, los gobiernos han dejado que la acción corporativa impere en colusión o por encima de los intereses del estado.

Bajo cualquier lógica, ni el control absoluto del gobierno chino ni el extractivismo abrumador de las corporaciones de Occidente parecen las mejores vías para conseguir una verdadera descentralización para el mundo digital y de las tecnologías avanzadas.