The threat of rising sea levels. China's new Great Wall

Cita: 

The Economist [2023], "The threat of rising sea levels. China's new Great Wall", The Economist, London, 10 de junio, https://www.economist.com/china/2023/06/05/chinas-new-great-wall

Fuente: 
The Economist
Fecha de publicación: 
Sábado, Junio 10, 2023
Tema: 
La llamada excelente planificación de largo plazo del Partido Comunista Chino no ha visto que ciudades como Shanghai o Tianjin se inundarán hacia 2050
Idea principal: 

Los efectos de las apuestas chinas por la apertura al libre comercio, la inversión extranjera y una planificación en el largo plazo que presume el Partido Comunista Chino, son cristalizadas en los imponentes rascacielos y los bulliciosos puertos que yacen en las ciudades de Guangzhou, Shenzhen y Shanghai. No obstante, dicha planificación parece no haber tomado en cuenta que en dichas ciudades costeras el aumento del nivel del mar podría acarrear grandes problemas (datos cruciales 1 y 2).

En esta ocasión The Economist analiza el problema del aumento del nivel del mar en las ciudades costeras de China y qué es lo que el gobierno está haciendo actualmente para hacer frente a los fenómenos meteorológicos extremos ocasionados por el cambio climático.

Es importante considerar que el nivel del mar no sube de manera sincrónica alrededor del mundo, es decir, los mares se calientan y se expanden en ritmos diferentes. En tal sentido, la posición geográfica de China (el Pacífico Occidental), la hace altamente vulnerable a los tifones cada año. Si se suma el problema del calentamiento de los océanos, el aumento del nivel del mar traerá como consecuencia mareas más violentas cuando se produzcan los tifones.

Todo parece indicar que el crecimiento económico en China pasará la factura. Las grandes construcciones eliminaron murallas naturales para las zonas costeras y succionaron litros de agua subterránea para poder levantar los rascacielos.

Las consecuencias ya se empezaron a sentir, tal es el caso del hundimiento de las ciudades de Shenzen (74 mm al año) y Tianjin; o bien, el aumento del nivel del mar que ha provocado que la costa china retroceda decenas de metros y dañe edificios e infraestructura. Aunado a eso, la salinización de la tierra amenaza a los cultivos y el agua potable. Pero no menos importante, se espera que las inundaciones aumenten lo que provoca daños económicos y ponga en peligro a la población.

En este sentido, aunque en el tema de mortandad, la cifras se hayan reducido gracias a las políticas de evacuación, las estrategias para hacer frente a inundaciones se han quedado cortas y ante esto, los medios de comunicación no pueden exhibir la magnitud de los daños por la censura del Partido Comunista Chino (datos cruciales 3 y 4).

Los organismos internaciones han tratado de persuadir al gobierno chino sobre los peligros del aumento del nivel del mar en sus costas, no obstante, la reacción del gobierno de Xi JinPing sigue siendo hostil (dato crucial 5). Inclusive sectores del gobierno central en China han pedido que se evalué dicho impacto sobre la planificación urbana basado en los peores escenarios, pero actualmente se siguen construyendo rascacielos y no hay respuesta clara en este tema (dato crucial 6).

Se destaca que la gestión del agua subterránea y la protección de humedales y manglares en las costas, han sido mejor trabajados, pero no se tienen avances similares respecto de las tierras costeras (dato crucial 7).

Para su protección, lo único con lo que cuentan las ciudades costeras de China es un sistema de diques que se encuentran en malas condiciones y no cumplen las normas oficiales; por ello, se estima que no durarán mucho (datos cruciales 8 y 9). Ante esto, el gobierno ya está construyendo 430 km en diques, pero esa gran muralla tendrá mayores costos económicos y técnicos en la medida que siga incrementando el nivel del mar, por lo que fiarse de esas barreras, no es una garantía. En tal marco, se ha sugerido y discutido que en Shanghai se construya una fortaleza similar a la del río Támesis en Londres.

El escenario ideal sería que el gobierno trazara nuevos proyectos de ingeniería para proteger las ciudades costeras de China (es indispensable y tienen que materializarse en tiempo récord antes de que ocurra una catástrofe); si el gobierno parece estar muy confiado, la población está peor, ya que ven el tema del aumento del nivel del mar demasiado lejano y por lo tanto intangible.

Así, tanto el gobierno chino como su población están sesgados por el crecimiento económico sin precedentes en sus ciudades, piensan que las catástrofes ligadas al aumento del nivel del mar no sucederán, o bien, que el PCC tendrá algún as bajo la manga. Por ejemplo, la ciudad de Shanzou, que ha pasado por dos catástrofes relacionadas con tifones e ineficiencia de los diques, normaliza estos problemas al contrastarlos con los frutos de la bonanza económica (datos cruciales 10 y 11).

Datos cruciales: 

1) En 2100, entre 43-57 millones de chinos podrían vivir por debajo de la línea de pleamar, y otros 60 millones se verían amenazados por inundaciones costeras anuales, de acuerdo con los pronósticos de la ONG estadounidense Climate Central.

2) De acuerdo con el informe del Comité Británico sobre Cambio Climático y el Grupo de Expertos sobre Cambio Climático en China, en 2050, 32 billones de yuanes del Producto Interno Bruto —PIB— (cerca de 10% del total previsto por China) podrían ser vulnerables a las inundaciones costeras en el peor de los casos si las emisiones de gases de efecto invernadero continúan.

3) De acuerdo con la aseguradora Munich Re, en 2022 las inundaciones en las provincias costeras de Guangdong, Guangxi y Fujuan causaron daños por valor de 5 mil millones de dólares, de los cuales solo 6% estaba asegurado.

4) En 2021, después de que las lluvias devastaran la ciudad central de Zhengzhou, los medios de comunicación extranjeros que cubrían las inundaciones fueron acosados y se ocultó la magnitud de los daños.

5) En 2021, un grupo de extranjeros que intentaba vigilar la contaminación marina fue acusado de recopilar datos para espías internacionales.

6) En la ciudad portuaria de Shantou, conocida por los feroces tifones que la afectan, se ha terminado recientemente un estadio de 22 mil localidades junto al mar. Esta colosal instalación se encuentra rodeada de obras que se convertirán en parques industriales y edificios residenciales.

7) Los reclamos sobre tierras afectadas que añadieron más de 7 500 km cuadrados de tierras costeras bajas entre 1985-2010, se aprueban con menos frecuencia.

8) Así funciona el sistema de diques en China: las ciudades más pequeñas tienen muros resistentes a las inundaciones de uno en 100 años, las que históricamente tenían un 1% de probabilidades de producirse en un año determinado. Las grandes ciudades deben tener una protección contra inundaciones de uno en 200 años. Shanghai tiene la particularidad de construir en sus distritos centrales una protección de uno en mil años. Si se compara con Países Bajos, los planificadores exigen una protección de uno en 10.000 años para las ciudades costeras.

9) Un informe del 2019 por el Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático de la ONU predice que en 2050 podrían producirse inundaciones de uno en 100 años cada uno, debido a la subida del nivel del mar.

10) En Shantou la gente conoce bien los peligros del mar. En 1969, más de 500 soldados y estudiantes se ahogaron al derrumbarse un dique durante una tormenta mientras intentaban proteger las tierras de cultivo que se habían inundado. Nuevamente los diques volvieron a fallar en 2013 matando a diez personas. A principios de 2023 el gobierno de la ciudad admitió la ineficiencia de sus defensas.

11) El PIB per cápita de Shantou ha crecido 430% en los últimos 20 años.

12) La infografía muestra una proyección hacia 2050 sobre la afectación a las ciudades costeras en China a causa del incremento del nivel del mar. En tal sentido, se observa que las ciudades más afectadas serán Shanghai y Tianjin.

Nexo con el tema que estudiamos: 

El incremento del nivel del mar a causa del cambio climático no es un problema que solo afecte a China sino a todos los países que tienen salida al mar. No obstante, tomar como ejemplo el caso chino puede ayudar a construir alternativas o establecer semejanzas, tales como la falta de empatía de la población ante un tema que creen es demasiado lejano. En este caso, se trate de un gobierno democrático o autoritario, se observa que no distan mucho sobre la laxitud en cuanto a objetivos climáticos y la tendencia por dar preferencia al gran capital.

Debido a su carácter progresivo, que avanza "lentamente", el aumento del nivel del mar no es considerado como potencial riesgo existencial. Quizá el agravamiento de las afectaciones resultado de las mega-tormentas conlleve a mejorar las políticas de adaptación frente al aumento del nivel del mar, así como a enfocar las acciones en la reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero.