Harry Dempsey es el corresponsal de materias primas del Financial Times. Anteriormente fue reportero de la industria del FT y antes de eso reportero de noticias de última hora. Vivió y trabajó en Japón durante casi cinco años, incluidos dos años como investigador asociado en el principal grupo de expertos independiente con sede en Tokio.

José Cotterill es corresponsal en África del Sur de The New York Times.

En las colinas de Erongo, al sureste de África se encuentra Uis, una provincia grande pero poco habitada cuya riqueza mineral se basa en piedras preciosas. Sin embargo, hace poco comenzó a ser foco de atención de países más fuertes económicamente gracias a la cantidad de litio que se encontró en una de sus minas.

El litio es un metal alcalino primordial para la fabricación de baterías de automóviles; de manera que, por años se ha buscado encontrar un suministro confiable.

En Namibia, ya se han iniciado proyectos de plantas para su extracción. Andrada, una planta piloto comenzará a producir sus primeros lotes de litio a finales de junio. Se encuentra a menos de 300km de Walvis Bay, un importante puerto regional, lo que es beneficioso para su exportación. Además, gracias a que la mina anteriormente era de estaño y tantalio, metales útiles para la transición energética, tendrá un valor significativo a nivel mundial.

Pero no es la única planta que se está poniendo en marcha. En marzo de 2023 comenzó a producir la primera planta de litio de propiedad china, Arcadia en Zimbabue (dato crucial 1).

La disputa por el acceso a minerales críticos está en auge, este tipo de minerales (cobalto, litio y los metales de tierras raras, por mencionar algunos) son cruciales para la transición energética. Y África está posicionándose como dominante en la extracción de muchos de estos minerales.

Xinfeng, una empresa china ha extraído decenas de miles de toneladas de minerales de litio y lo ha exportado a China desde Erongo. Huayou Cobalt también comenzó una inversión minera en Erongo.

El auge de la batería

El litio es fundamental para la fabricación de baterías de vehículos eléctricos gracias a su alto potencial electroquímico. Debido al avance tecnológico en cuanto a la transición energética, la demanda de litio ha ido incrementando, se espera que el nivel actual aumente 5 veces para 2030 (dato crucial 2).

Unión Europea y gran parte de Estados Unidos buscan dejar de vender automóviles de gasolina y diésel para 2035, por lo que encontrar depósitos de litio y poder producir vehículos eléctricos de manera constante, es crucial. Con esta idea latente, fabricantes de automóviles como General Motors han comenzado a invertir en minas.

África podría convertirse en el principal productor de litio del mundo (dato crucial 3); sin embargo, no todo en ese escenario era beneficioso. Si bien Andrada significa un incremento en los mercados de capitales, la capitalización sigue estando por debajo de los 100 millones de libras esterlinas, por lo que hay que mantener los costos de producción minera bajos antes de comenzar con el litio.

Mientras Estados Unidos y Unión Europea se han enfocado en asociarse con África, China solo ha comprado minas en territorio africano, pero todas las refinerías han sido construidas en China. En cuanto a convertir el metal en materia prima para baterías, el país asiático tiene total ventaja (dato crucial 4).

La gráfica muestra el territorio africano como “propiedad” china. Siendo China el principal cliente de minerales africanos.

La ofensiva del encanto

Los principales desafíos para este proceso son la corrupción, las diferencias políticas y la falta de infraestructura.

Ha habido difamaciones de soborno para obtener las concesiones de AVZ, la zona minera con el depósito de litio más grande de África, de parte de Zijin Mining a un intermediario para conseguir cierto beneficio sobre las concesiones de la mina.

En Zimbabue también se han presentado problemas con lo variable de la política y el presente auge del litio. En diciembre se prohibió la exportación de litio en bruto para evitar la minería informal.

En su mayoría, los proyectos de litio se encuentran lejos de los puertos por lo que Andrada tiene esa ventaja. En Manano el metal es trasladado 630 km para llegar a la frontera con Zambia en donde se forman camiones cargados de cobre y cobalto.

Los gobiernos de los países africanos preferirían refinar los minerales extraídos de sus tierras en su propio territorio, en lugar de enviarlos al extranjero, por lo que Tom Alweendo, ministro de minería de Namibia, comenzó el proceso de prohibición de las exportaciones mineras en bruto.

Una carrera contra el tiempo

La inversión en estaño de Andrada ha generado empleos, recepción de teléfonos móviles y el manejo de capital en efectivo. Por lo que se espera que la expropiación de litio genere mucho más.

Los grupos mineros occidentales ofrecen buenos salarios y trabajos estables, pero los de origen chino, en busca de optimizar tiempos, contratan más rápido.

Si bien el litio es abundante, el trabajo en la mina es complicado y en muchos casos los inversionistas buscan ciudar de sus inversiones. Los precios del litio han sido variados en los últimos años, en 2022 alcanzó un máximo de 80 mil dólares la tonelada y desde entonces ha bajado a 55 mil dólares.

Frente a la volatilidad de los precios del litio y las dificultades que implica su extracción, se estima que la opción más viable es desarrollar sustitutos como la batería de iones de sodio. Ya hay científicos trabajando en ello, por lo que algunos inversionistas prefieren enfocarse en metales que tengan usos múltiples como el cobre que, a pesar de ser sustituido por aluminio en algunos sentidos, todavía se usa en muchas otras áreas.

Pero los grupos mineros africanos confían que, para que una nueva tecnología de baterías llegue a suplir el uso de litio, va a pasar mucho tiempo. Mientras tanto, se enfocan en quién obtendrá las concesiones de las minas.