Beatriz Olivera es licenciada y maestra en ingeniera industrial por la UNAM, doctorante en desarrollo rural por la UAM-X. También ha colaborado en diversas organizaciones como OXFAM y Greenpeace.

Carlos Tornel es candidato doctoral en geografía en la Universidad de Durham, Inglaterra. Sus principales líneas de investigación se concentran en el proceso de transición, justicia y soberanía energética.

Aleida Azamar es licenciada en economía por la Universidad Autónoma de México, maestra en estudios latinoamericanos por la Universidad Autónoma de Madrid, y doctora en economía internacional y desarrollo por la Universidad Complutense de Madrid. Sus líneas de investigación son extractivismo y minería en América Latina.

Este capítulo señala proyecciones para las energías renovables y los escenarios que la Comisión Federal de Electricidad (CFE) plantea para la movilidad eléctrica. Además, se muestra un panorama de la minería de minerales críticos brindando información cuantitativa sobre estos proyectos mineros. Por otra parte, se retoma entrevistas con personas involucradas en conflictos con los proyectos extractivistas. El objetivo de este capítulo es mostrar tanto los antagonismos socioecológicos asociados al avance de la transición energética como la identificación de los impactos que el impulso a dicha transición implica para México.

3.1 Estado actual de la transición energética

En México, las energías limpias se definen como aquellas con fuentes y procesos de generación de electricidad cuyos residuos y emisiones no superan determinados límites establecidos (Dato Crucial 1). Concretamente, se consideran como energías limpias la hidroeléctrica; nucleoeléctrica; eólica; la radiación solar; energía oceánica; geotérmica; las bioenergías definidas por la Ley de Promoción y Desarrollo de los Bioenergéticos; la energía generada por el aprovechamiento del metano y de otros gases generados en basureros, granjas y plantas de tratamiento de aguas residuales; el aprovechamiento de hidrógeno mediante su combustión o en celdas de combustible; la energía generada mediante el aprovechamiento de residuos sólidos, siempre y cuando no se generen dioxinas; la energía de centrales de cogeneración eficiente; la energía de ingenios azucareros que cumplen criterios de eficiencia; la generada por centrales térmicas con procesos de captura y almacenamiento de carbono.

De acuerdo con el Programa de Desarrollo del Sistema Eléctrico Nacional (PRODESEN), la capacidad de generación eléctrica existente está basada en su mayor parte en combustibles fósiles (Dato Crucial 2 y 3). La matriz energética de México es esencialmente fósil, y la contribución de la participación de las energías limpias solo aumenta muy ligeramente de 2018 a 2020 (Dato Crucial 4). De las fuentes de energía limpia renovable la mayor parte corresponde a la hidroeléctrica, seguida de la eólica (Dato Crucial 5).

México tiene la meta de llegar a una participación de energías limpias de por lo menos 35% en 2024, con metas intermedias de 25% en 2018 y 30% en 2021. Aunque en 2018 no se logró la meta de 25%, el objetivo marcado para 2021 sí se cumplió (Dato Crucial 6).

En su narrativa, el gobierno mexicano busca una transición energética soberana. Es decir que busca cambiar la matriz energética hacia una en la que haya más participación de las energías limpias y renovables al tiempo que se incrementa la seguridad y diversificación energética, el ahorro de energía y se reducen las emisiones de gases de efecto invernadero.

3.2 Movilidad eléctrica

Dos de los objetivos de la Estrategia Nacional de Movilidad Eléctrica de México son: disminuir la contaminación proveniente de vehículos de combustión interna con una meta de reducir las emisiones entre 3.5 y 5 millones de tCO2e; e incentivar habilidades y mecanismos de movilidad eléctrica en las 10 ciudades mexicanas con la peor calidad del aire mediante el programa Alianza de Ciudades para la Red de Movilidad Eléctrica.

Para 2034, se plantean 3 escenarios de vehículos eléctricos; en el mejor de los casos se proyecta la incorporación de 4.81 millones de vehículos eléctricos (Dato Crucial 7). Asimismo, se prevé que el aumento de los vehículos eléctricos evite bastantes emisiones de dióxido de carbono (Dato Crucial 8). El problema de dichas estimaciones es que no consideran proyecciones sobre la cantidad de minerales que serán necesarios para suministrar el aumento de autos eléctricos, ni cuántos y de dónde provendrán los minerales necesarios para cumplir las metas de participación de energía limpia renovable en México.

3.3 Proyectos mineros relacionados con la transición energética

En la investigación para este libro se encontraron más de mil proyectos relacionados con los minerales que actualmente se exploran o extraen en México y que tienen relación con las tecnologías para la transición energética (Datos Cruciales 9-12).

3.4 Estatus de los proyectos mineros

La mayor parte de los proyectos mineros analizados en este informe se encuentran en la fase de exploración, mientras que tan solo un pequeño porcentaje se encuentra en la etapa de producción (Dato Crucial 13). Debe tomarse en cuenta que aun cuando no se esté en producción (o incluso si los proyectos son postergados), las concesiones mineras no pierden su vigencia, pues la Ley Minera otorga las concesiones por cincuenta años con la posibilidad de prorrogarlas por cincuenta más.

3.5 Empresas mineras

En la investigación para este informe se contabilizaron las empresas que tienen proyectos con minerales que podrían ser usados para la transición energética. La mayor parte de las empresas con este tipo de proyectos son canadienses, seguidas de las estadounidenses (Dato Crucial 14). De hecho, el único proyecto de tierras raras en México, específicamente en el estado de Coahuila, es liderado por una empresa de capital canadiense (Dato Crucial 15).

3.6 El caso del litio en México

El litio es un elemento que, si bien no es muy abundante, tampoco es tan escaso. La cuestión es que dicho mineral solo se encuentra combinado con otros minerales, y de estas combinaciones solamente unas pocas formaciones mineralógicas tienen valor económico. Por ejemplo, la espodumena, ambligonita, lepidolita y la petalita (Dato Crucial 16).

Las combinaciones en las que se encuentra el litio se encuentran en pegamitas, que son depósitos de roca dura; salmueras de ambientes desérticos o asociadas a yacimientos de petróleo; en zonas de alteración hidrotemal por minerales; en evaporitas no marinas; yacimientos de boro, berilio, flúor y manganeso; en lagos con silicatos de magnesio; en zonas desérticas; en rocas sedimentarias ricas en hierro; e incluso en océanos.

Salmueras

La forma más rentable de extracción de litio es a partir de salmueras, y el tipo de salmueras que de forma más frecuente contiene litio son las salmueras continentales. De hecho, la mayor parte de la producción mundial de litio es a partir de éstas (Dato Crucial 17).

Pegmatitas o depósitos de roca dura

Son rocas formadas por magma cristalizado en el interior de la corteza terrestre que pueden contener diversos minerales como litio, estaño, entre otros. Esta forma concentra buena parte de los recursos mundiales de litio, y se extrae mediante minería de cielo abierto o subterránea (Dato Crucial 18).

Rocas sedimentarias que contienen litio

Se trata de depósitos de arcilla y de rocas evaporitas de zonas lacustres. En estos casos, el litio se encuentra en el mineral esmectita, cuyo tipo más común es la esméctica hectorita, la cual es rica en magnesio y litio (Dato Crucial 19).

Proyectos mineros de litio

Mediante los datos del Sistema Integral Sobre Economía Minera (SINEM) y del sitio Cartominmex, se identificaron 32 proyectos mineros de litio en México. De éstos, solo uno se encuentra en desarrollo y el resto en fase de exploración (Datos Cruciales 20 y 21).

De acuerdo con Geocomunes (2021) la mayoría de los proyectos mineros no tiene actividad, es decir que no han empezado la fase de exploración, y están controlados por empresas canadienses al borde de la quiebra. También señala que los marcos normativos mineros en América Latina suelen facilitar la especulación minera de la exploración del litio por parte de empresas mineras junior.

Las mineras junior son pequeñas empresas que identifican yacimientos, comienzan la exploración y buscan venderlos a empresas más grandes que realicen la explotación. Estas empresas obtienen financiamiento de capitales de riesgo en las principales bolsas de valores como la de Nueva York, no tienen ingresos productivos considerables ni minas en operación y dependen de la especulación para realizar su labor de exploración.

A continuación, se presentan algunos proyectos mineros de litio que han tenido más actividad en México.

Proyecto Sonora Lithium

Este proyecto de litio es el único que se encuentra en fase de producción, y se ubica en Bacadéhuachi, Sonora. La dueña del proyecto es Bacanora Lithium Plc, cuyo mayor accionista es la empresa china Ganfeg Lithium. El proyecto consiste en la construcción de una mina de tajo abierto la cual se estima podrá extraer miles de toneladas de carbonato de litio por año y tendrá una vida útil de más de dos siglos; y además de la mina se construirá una planta de procesamiento para obtener litio para baterías (Dato Crucial 22).

En 2021, Bacanora Lithium Plc compró terrenos para ubicar la planta de procesamiento de litio, y llegó a acuerdos con los ejidatarios locales para transitar por sus terrenos con una autopista temporal (Dato Crucial 23). También, esta empresa adquirió una deuda considerable y cuenta con varias concesiones para la realización del proyecto (Datos Cruciales 24 y 25).

El proyecto Sonora Lithium tiene el objetivo de abordar la creciente demanda de litio para autos eléctricos y almacenamiento de energía en el marco del impulso del gobierno estadounidense de políticas para autos eléctricos. Ganfeng es la principal productora de hidróxido de litio y compuestos de litio a nivel mundial. Ganfeng tiene recursos en todo el mundo y es la única empresa con la capacidad para, a escala comercial, extraer litio de la salmuera, el mineral y los materiales reciclados. Además, dicha empresa posee la tecnología para fabricar y reciclar baterías.

También es importante señalar que Bancanora Lithium tiene un acuerdo de inversión de capital y de compra de carbonato de litio con Hanwa, que es una empresa muy importante en la comercialización de productos químicos para baterías en Asia (Dato Crucial 27).

Proyecto Electra

Este proyecto abarca cuatro concesiones mineras de litio otorgadas en 2016 (Dato Crucial 28). Para iniciar el proyecto Electra la compañía que invirtió en éste fue Alix Resources Corporation, una minera junior canadiense. Dicha empresa realizó los primeros hallazgos sobre la posible cantidad de litio en la zona.

Alix, en asociación con Lithium Australia NL realizaron exploraciones y en 2017 iniciaron la fase de perforación. Alix cambió de nombre constantemente: en 2017 pasó a ser Infinite Lithium Corp, en 2020 Infinite Ore Corp y en 2022 Imagine Lithium Inc. Hasta 2021 Infinite Lithium Corp fue financiada por InnoEnergy, una empresa danesa dedicada a las inversiones y que a su vez es financiada por 131 inversionistas relacionados con el sector de las energías renovables como Bee Planet Factory.

Al finalizar 2021, el proyecto Electra fue adquirido por Rockland Recources y se estima que la producción de litio comience en 2023.

Proyectos de la empresa Silver Valley Metals en Zacatecas y San Luís Potosí

Silver Valley Metals Corp es una empresa canadiense que constantemente cambia de nombre, se ha llamado Organimax Nutrient Corp, Benton Capital Corp, entre otros más. La empresa se dedica a la exploración minera y sus principales proyectos son Ranger-Page Project en Idaho, Estados Unidos y Projects en Zacatecas y San Luis Potosí.

Silver Valley Metals Corp cuenta con una participación de 100% de un complejo de salares de litio y potasio con una vasta extensión en los que se ubican los proyectos la Salada, Santa Clara y Caliguey en los estados de Zacatecas y San Luís Potosí (Dato Crucial 29).

Las concesiones mineras de Silver Valley han tenido diversos propietarios como Priero Sutti, LitioMex, entre muchos otros. Además, entre 2012 y 2018 continuaron los trabajos de exploración en los salares de Santa Clara, Caliguey, Colorada, Saldivar, El Cristalillo, La Doncella, La Prietta, El Agrito, Hernandez, Laguna Larga, Las Casas, El Salitral, y Chapala, todos propiedad de Silver Valley.

Proyecto Illescas, San Juan, San Vicente y Zacatecas

Este proyecto pertenece a Zenith Minerals Limited, empresa que también ha cambiado numerosas veces de nombre. Esta compañía tiene varios proyectos de oro, cobre, zinc y de minerales para baterías. En 2017 esta empresa realizó trabajos de exploración en Zacatecas y encontró en sedimentos superficiales buenos indicadores de litio para su potencial explotación (Dato Crucial 31).

Proyectos Abundancia, Columpio y Pozo Hondo

Alien Metals Ltd, antes llamada Arian Silver, es la empresa de origen inglés dueña de estos proyectos que los adquirió mediante su filial mexicana Compañía Minera Estrella de Plata S.A. de C.V. En 2017, la empresa dijo que avanzaría en la exploración de litio, pero realmente no hay actividad en sus proyectos de litio. De hecho, en 2019 el diario La Jornada informó que la empresa dijo que la presencia de litio no era suficiente para ser económicamente redituable (Dato Crucial 32).

Proyecto Lithium Brine em Coahuila

Radius Gold es dueña de este proyecto. La empresa en 2016 adquirió el proyecto minero Salar Viesca en Coahuila, en el cual se habían encontrado presencia de litio. La empresa conserva la concesión para este proyecto y la última información adicional es de 2018, cuando la empresa señaló estar buscando inversoras para desarrollar una alianza para el proyecto (Dato Crucial 33).

Proyectos de la empresa Litio Mex

Entre 2019 y 2020 Litio Mex, propiedad del empresario Martin Sutti Courtade, adquirió varias concesiones mineras en Zacatecas y San Luis Potosí. Poco antes de fallecer Sutti, fue víctima de un secuestro y complot de una empresa española para quitarle sus títulos de las concesiones mineras de la principal reserva de litio en México en 2012. Los señalamientos de Sutti no se esclarecieron, pero hasta 2022 el proyecto de litio Salinas Lagoon está registrado a cargo de Litio Mex y Sutti Mining SL.

Proyecto Cero Prieto en Baja California

Este proyecto es de la empresa Pan American Lithium, quién en 2009 realizó un contrato para adquirir la mayor parte de las acciones de Escondidas Internacional SA de CV. Esta última empresa tenía como principal activo un acuerdo con la empresa CPI Internacional SA de CV para desarrollar el proyecto de procesamiento de litio y metales preciosos obtenidos de la salmuera geotérmica de Cierro Prieto.

El proyecto no ha tenido operaciones. En 2011, la empresa señaló que no tenía viabilidad económica y, entre 2013 y 2020, Pan American Lithium no pudo realizar operaciones debido a que fue sancionada por la Comisión de Valores de Estados Unidos por no presentar sus informes. La suspensión fue revocada en 2021, pero la empresa no ha generado ingresos por operaciones y depende de su capacidad de obtener financiamiento de capital adicional.

Proyecto Salar del Diablo

Parte del proyecto es propiedad de la empresa canadiense One Wold Lithium (OWL), la cual se dedica a la adquisición, exploración y desarrollo de recursos minerales en México. Su proyecto en Salar del Diablo consiste en buscar salmuera con litio para después asociarse con otra empresa o vender la propiedad (Dato Crucial 34). OWL señala que cerca de este salar hay un puerto marítimo localizado en San Felipe, Baja California, y se podría para exportar carbonato e hidróxido de litio.

En 2019, OWL contrató a Montgomery & Associates para un programa de perforaciones, está última en 2022 entregó un informe, pero no se han hecho públicos los resultados. Además, OWL reporta pérdidas significativas y está en riesgo de no poder financiar sus operaciones en 2022 (Dato Crucial 35).

De jaguares y metales: El caso de Sahuaripa Sonora

En el municipio de Sahuaripa, Sonora se encuentra la Reserva Jaguar del Norte, la cual sirve de refugio a jaguares y otras especies nativas de la región, y es considerada el último bastión de los jaguares del desierto (Dato Crucial 36). Pero en parte de los terrenos de esta reserva se ubica el proyecto Electra de la empresa Rockland Resources.

En Sonora, la actividad minera coincide con el hábitat del jaguar, el cual solo encuentra refugio en las partes más altas de la sierra cuya accidentada geografía dificulta las actividades mineras agroindustriales y turísticas. Mientras tanto, las personas que habitan Sahuaripa señalan que no se les ha informado nada de forma oficial, pero que la empresa ya ha comprado varios ranchos de la zona, abierto caminos para camiones, y que la propuesta, según las personas locales, es que será una mina de tajo abierto que extraerá lodo que será procesado en Guaymas, Sonora.

Una de las principales preocupaciones de las personas es que la actividad minera deteriorará la reserva del jaguar. De hecho, el biólogo Carlos Castillo señala que la zona tiene especies endémicas como el jaguar y oso negro, además de ser zona de migración de especies como el águila real y la guacamaya; pero la extracción de litio es totalmente antagónica arruinará todo el ecosistema e incluso eliminará especies que aún no se conocen.

En Sonora hay una crisis hídrica y la extracción de litio afectará y destruirá zonas captadoras de agua como lo son los bosques de la Sierra Madre Occidental. Por tanto, se exacerbarán los riesgos para el abastecimiento de agua de las comunidades.

Asimismo, hay que mencionar la contaminación por derrames de residuos mineros en 2014, que contaminaron los ríos Sonora y Bacanuchi; y el acaparamiento de agua en ciertas empresas como Grupo México (Dato Crucial 37). Además, el propio proceso de extracción de litio requiere enormes cantidades de agua que aumentarán el estrés de la cuenca del río yaqui, y la mínima contaminación de las fuentes de agua tendrá graves consecuencias para la salud de las comunidades.

Las Medidas de Impacto Ambiental son cruciales para reducir la cantidad de daño que causaran las zonas a explotar. Pero el gobierno mexicano designó una serie de medidas para que los proyectos considerados prioritarios o de interés nacional puedan agilizar sus trámites ambientales. Por tanto, hay considerables riesgos de que toda la actividad minera exacerbe sus impactos ambientales.

Desde funcionarios como Luis Quijano, antiguo jefe de la Unidad de Energías Renovables, se maneja la narrativa de lo que se busca es apostar a una especie de minería local de pequeña escala que sea sostenible y no conlleve la devastación ecológica.

3.7 Conflictos socioecológicos en México: la violencia contra defensores ambientales

Los conflictos socioambientales en México son una muestra de que uno de los rasgos intrínsecos del capitalismo y la economía globalizada es la ruptura metabólica causada por el insaciable aumento de la demanda de minerales y energía, que son utilizadas para sostener el crecimiento económico. La continuidad de dichas lógicas genera el avance de las fronteras extractivistas y profundiza las desigualdades del país.

Es evidente que el capitalismo, ya sea en su versión verde o fósil, demanda la continúa creación de zonas de sacrificio en las que las desigualdades, los conflictos socioambientales, y las más graves violaciones de derechos humanos son la norma (Dato Crucial 38 y 39).

Las brutales estadísticas de violencia contra defensoras ambientales evidencia que la expansión del extractivismo está asociada a mecanismos de violencia de diversos tipos. Aunque el avance de la frontera extractivista no siempre es igual, el despliegue de megaproyectos suele ir de la mano de la falta de transparencia, despojo, desplazamientos forzados, y una profunda desigualdad en la distribución de los impactos del megaproyecto.