¿El final de las estaciones?

Cita: 

Bordera, Juan y Antonio Turiel [2023], "¿El final de las estaciones?", ctxt. Contexto y Acción, 5 de noviembre, https://ctxt.es/es/20231101/Firmas/44507/Juan-Bordera-Antonio-Turiel-cri...

Fuente: 
Otra
Fecha de publicación: 
Domingo, Noviembre 5, 2023
Tema: 
La inestabilidad del sistema climático en el Antropoceno.
Idea principal: 

    Juan Bordera es guionista, periodista y activista en Extinction Rebellion y València en Transició. Es coautor del libro El otoño de la civilización.

    Antonio Turiel es científico y divulgador. Estudió la licenciatura de Física y Matemáticas y tiene un doctorado en Física Teórica por la Universidad Autónoma de Madrid.


    El avance de la tecnología se ha visto como una solución para todos los problemas de la sociedad, sin embargo, la velocidad con la que avanza está impactando en el medio ambiente. Además, la búsqueda del crecimiento y del “progreso” implica la utilización de múltiples recursos finitos que están siendo explotados, al mismo tiempo que se degrada el ambiente, favoreciendo al cambio climático y los fenómenos extremos.

    La situación del clima del planeta es de todo menos corriente

    Durante 2023 se han presentado diversos fenómenos meteorológicos en el planeta. Uno de ellos fue la tormenta Daniel que afectó a Libia, provocando inundaciones, la muerte de aproximadamente 10 mil personas y cientos de desaparecidos. Además, también provocó fuertes lluvias en Grecia, lo que causó que una cuarta parte de las tierras de cultivo quedarán inutilizables para los siguientes años.

    Antártida también está enfrentando las consecuencias del cambio climático. Se estima que en esta región el hielo marino faltante corresponde con el tamaño de Argentina. El caso de Antártida Occidental es más alarmante, ya que ha entrado en un colapso irreversible, es decir, aunque se detuvieran las emisiones no sería suficiente para detener el colapso, por lo que solo queda esperar en que tiempo el nivel del mar aumentará los 5 metros que se tienen previstos.

    Sumado a eso, la selva con mayor importancia para el planeta, el Amazonas, también está enfrentando un posible colapso, puesto que está en camino a una transición a sabana que afectaría a la dinámica de la Tierra.

    Es así que todos estos acontecimientos no son lineales ni completamente predecibles por los modelos. Tal es el caso del aumento de la temperatura, ya que es posible que en 2023 se sobrepase el límite establecido de 1.5°C. Las olas de calor, las tormentas y huracanes –como Daniel y Otis– también son prueba de los cambios que tiene el planeta, así como de un posible acercamiento a los puntos de inflexión climáticos.

    Entre los factores que influyen en estos fenómenos se encuentra inevitablemente el calentamiento global, el cual se ve favorecido por las emisiones de los gases de efecto invernadero. Además, la energía que entra al planeta no es la misma que se libera, de manera que se almacena más energía en el planeta (dato crucial 1).

    Además, fenómenos naturales como El Niño (calentamiento de las aguas del Pacífico), también han influido en los impactos que han acontecido durante 2023; sin embargo, al ser un fenómeno natural no se le puede responsabilizar de los impactos extremos, sino que estos son resultados de las emisiones que liberan los humanos. Otro aspecto que influye es la disminución de aerosoles en la atmósfera, ya que estos actúan como un medio para bloquear la radiación, al tiempo que favorecen la formación de nubes (dato crucial 2).

    Si bien, la combinación de los factores mencionados influye en los fenómenos climáticos, un aspecto que influye sobre manera son los cambios en las corrientes oceánicas y atmosféricas. Las corrientes atmosféricas (que se refieren a los vientos) influyen en la dinámica de las corrientes oceánicas. El calentamiento global afecta en el flujo del viento a altas temperaturas en la atmósfera, lo que a su vez impacta negativamente en el movimiento de las corrientes oceánicas.

    De igual manera, la circulación de vuelco meridional del Atlántico (AMOC, por su sigla en inglés) está siendo afectada por la acumulación de agua dulce del derretimiento del hielo ártico, que impide la correcta circulación de la corriente. Este fenómeno provoca que el calor se concentre en la superficie oceánica, provocando una especie de círculo vicioso, ya que al calentarse la superficie del océano se está favoreciendo al derretimiento de los polos.

    La lenta circulación de AMOC también afecta a la zona de convergencia intertropical, que es donde convergen las masas de aire cálido y húmedo de la zona norte y sur, una zona que regula las lluvias en partes de Sudamérica, África y Asia. De manera que, al ser afectada esta zona, se provocaría un desplazamiento de las lluvias más al sur. Esto impactaría en los principales bosques que capturan carbono, debido a que ante la ausencia de lluvia, los bosques poco a poco comenzarían a degradarse y morir, lo que conllevaría a liberar el carbono en lugar de secuestrarlo.

    El Niño, cada vez más explosivo

    El Niño es un fenómeno climático natural que provoca un calentamiento en el océano Pacífico, tiene una duración de un año, pero se intensifica en diciembre. Una vez que finaliza la época de El Niño, comienza el fenómeno de La Niña, que es un periodo frío o normal pero intensificado. En los últimos años, el ciclo de El Niño y La Niña se han alterado, provocando que sean más intensos.

    De esta manera, la temperatura más elevada en el océano ha provocado que Antártida llegue a un punto en el que el hielo se está derritiendo de manera más acelerada. El derretimiento del hielo provoca un menor albedo, es decir, que hay menos superficie para reflejar la energía, por lo que el calor se concentra en el océano, favoreciendo al derretimiento de los glaciares. Este fenómeno del derretimiento en Antártida comenzó a ser más intenso de 2015 a 2016, un ciclo en el que El Niño se presentó de manera intensa. Aunado a esto, durante 2023 se han registrado niveles bajos de hielo en Antártida (dato crucial 3).

    Los bajos niveles de hielo pueden indicar que se está llegando a un punto de inflexión en Antártida, lo que provocaría una desestabilización en los sistemas que regulan al plantea. Esta desestabilización provocaría un efecto de retroalimentación en otros sistemas.

    El año 2023 ha sido afectado por diversos factores, tanto antropogénicos como naturales, que han provocado una desestabilización en el planeta. Por el aspecto de factores naturales, se espera que en 2025 cuando finalice el periodo de El Niño, las condiciones climáticas mejoren de cierta manera. Sin embargo, estas condiciones pueden continuar por todos los factores antropogénicos y naturales que lleguen en el futuro, hasta llegar a un umbral crítico (dato crucial 4).

    Los efectos que se van a presentar como resultado de la acumulación de factores antropogénicos y naturales van a ser a corto, mediano y largo plazo. A corto plazo se van a observar cambios en los fenómenos climáticos naturales como El Niño y La Niña. A mediano plazo se esperan afectaciones en la AMOC. En el largo plazo el escenario más crítico es el cambio a una Tierra Invernadero, es decir, un cambio total en las condiciones del sistema terrestre.

    Finalmente, los autores concluyen que la inestabilidad del planeta y de las condiciones climáticas es evidente, las estaciones estables ya no los son más. Es por lo que sugieren a tomar acciones ahora, puesto que es la única solución para amortiguar el cambio que se prevé como resultado de la combinación de factores naturales, antropogénicos y de un sistema de crecimiento económico que consideraba a los recursos como infinitos.

Datos cruciales: 

    1. La figura 1 muestra el desequilibrio energético de la Tierra. En el pasado, las pequeñas variaciones en el balance, que eran incluso menores a las variaciones de los últimos tres años, fueron capaces de provocar el deshielo y el cambio de ciclo glacial a interglacial.

    2. La reducción de los aerosoles se debe en parte a la regulación marítima que limita la contaminación por barcos, esto influye a que, sin los aerosoles, el calentamiento aumente entre 30 y 50%.

    3. La figura 2 muestra la extensión de hielo en Antártida en diferentes periodos de tiempo. Es posible observar como en 2023 se ha registrado la extensión más baja de hielo en comparación con los demás periodos.

    4. La figura 3 muestra cómo ha cambiado la estabilidad y la temperatura del planeta a través del Holoceno y Antropoceno.

Nexo con el tema que estudiamos: 
    Evidentemente el planeta y las condiciones climáticas están cambiando a gran velocidad. El clima varía de una semana o incluso de un día a otro, lo que nos dice como nuestras acciones combinadas con los factores naturales están alterando la dinámica natural de la Tierra. Las naciones y las corporaciones deben tomar acciones para combatir los efectos negativos de las actividades humanas y así disminuir o por lo menos tratar de minimizar y ralentizar los impactos extremos en las poblaciones más vulnerables.