Worm hole. The first voyager to another star may be a worm or a tardigrade. Life in the fast lane

Cita: 

The Economist [2017], "Worm hole. The first voyager to another star may be a worm or a tardigrade. Life in the fast lane", The Economist, London, 4 de noviembre, https://www.economist.com/news/science-and-technology/21730862-life-fast...

Fuente: 
The Economist
Fecha de publicación: 
Sábado, Noviembre 4, 2017
Revista descriptores: 
Tema: 
Gusanos y osos de agua en viajes interestelares
Idea principal: 

El espacio es un lugar muy frío; por eso, cuando los científicos soviéticos decidieron mandar al primer ser vivo al espacio, eligieron a Laika, una perra callejera que había sobrevivido al frío invierno de Moscú. Ahora, el proyecto espacial es más ambicioso, no sólo porque se pretende llegar a un lugar más lejano, sino porque se espera que los seres enviados lleguen vivos. El plan es transportar vida a Alpha Centauri, un sistema solar con tres estrellas y al menos un planeta, que se encuentra relativamente cerca de la Tierra: a sólo cuatro años luz.

El Grupo Cosmológico Experimental de la Universidad de California en Santa Bárbara está diseñando el Proyecto Luz de la Estrella, dirigido por el doctor Philip Lubin, con financiamiento de la Agencia Espacial Estadounidense (NASA). Lo que se plantea en la propuesta es usar el haz de un poderoso láser para empujar flotas de naves espaciales livianas (del tamaño de un DVD) que viajen a un quinto de la velocidad de la luz para llegar a Alpha Centauri. Empero, a pesar de la rapidez del viaje, se calcula que éste podría durar cerca de 20 años.

De esta manera, considerando el tiempo del viaje y el tamaño de las naves, sería imposible transportar los insumos suficientes para mantener vivas incluso a criaturas minúsculas, a menos que éstas viajen en estado de animación suspendida [1]. Esto podría ser posible en al menos dos especies animales: los gusanos nematodos, Caenorhabditis elegans, y los tardígrados u “osos de agua”. Lo anterior debido a su habilidad para continuar con sus procesos vitales minutos después de salir de un estado de animación suspendida. De hecho, C. elegans puede estar congelado durante años y con un rápido proceso de descongelamiento en agua tibia puede moverse, comer y reproducirse como si nada hubiera pasado.

En el proyecto Biomas Terrestres en el Espacio, a cargo del doctor Joel Rothman, se han diseñado pequeñas naves monitoreadas en las que C. elegans puede ser congelado para posteriormente ser descongelado con plutonio. Algunos de los especímenes que están en el laboratorio de Rothman han estado congelados a -70°C durante 33 años o son descendientes de animales que orbitaron la tierra como parte del proyecto Columbia, los cuales sobrevivieron a la desintegración de la nave en 2003.

C. elegans no sólo es un animal ideal por su capacidad para sobrevivir a un estado de animación suspendida, sino también porque manifiesta una conducta compleja. Por ejemplo, puede distinguir olores agradables de los que no lo son y pueden ser entrenado para recorrer caminos en laberintos como lo hacen las ratas y las palomas. Además, estas conductas se mantienen incluso después de estar en suspensión animada durante décadas.

En el laboratorio del doctor Rothman también se está analizando a los tardígrados u osos de agua, quienes pueden permanecer en estado de suspensión animada por siglos (y quizá por milenios). Aunado a lo anterior, esta especie puede aguantar tanto radiaciones como temperaturas y presiones extremas (muy altas o muy bajas). Así, el equipo de Biomas Terrestres en el Espacio quiere aprender los efectos que los viajes cósmicos (frío, radiación y altas velocidades) pueden tener en el desarrollo de la vida. Algunas de las preguntas que guían sus investigaciones y que servirán para saber lo que podría suceder con criaturas más grandes (como los humanos) que hagan viajes interestelares son si los animales recordarán conductas aprendidas en la Tierra y si estos van a reproducirse, crecer y morir de maneras similares a como lo hacen en nuestro planeta.

A pesar de esto, hay algunas preocupaciones por la posibilidad de contaminar mundos alienígenas con el envío de estos seres. La jefa de la Oficina de Protección de la NASA, Catherine Conley, se opone al proyecto del doctor Rothman justamente por su temor a contaminar zonas espaciales. Sin embargo, es poco probable que estos animales infecten otros sectores, sobre todo porque si no encuentran alimento similar al que consumían en la Tierra morirán de inanición.

Además, si una nave entrara a otro planeta se crearía una explosión muy poderosa por la velocidad con la que impactaría, haciendo que tanto la nave como todo su contenido se convirtiera en plasma en nanosegundos. Sin embargo, la preocupación de la doctora Conley puede aplicar para otros seres como las bacterias, las cuales, en algunos casos, no necesitan alimentarse de otros seres vivos para sobrevivir.

Algunos investigadores consideran que este proyecto podría ser una forma de expandir la vida en el espacio. De esta manera, los seres humanos podrían no sólo jactarse de que lograron hacer viajes interestelares, sino de que poblaron y dominaron otros espacios que ahora nos parecen desconocidos.


1. Según el diccionario MacMillan, la animación suspendida es un estado similar a la muerte que se obtiene cuando se ralentizan los procesos vitales de los seres vivos. El frío extremo puede inducir a este estado (veáse: MacMillan Dictionary, “Suspended animation”, https://www.macmillandictionary.com/dictionary/british/suspended-animation).

Nexo con el tema que estudiamos: 

Los avances en las tecnologías que permiten la exploración del espacio exterior señalan que hemos entrado en el momento en que los capitalistas destinarán más y más recursos hasta encontrar las soluciones técnicas necesarias. El espacio exterior representa la mayor potencia renovadora para el capitalismo decadente.

Muchas veces se dice que la realidad ha superado con creces a la ficción. Sin embargo, los viajes interestelares, ampliamente representados en la literatura y cinematografía desde hace varios años, continuaban pareciendo sueños y anhelos lejanos por la inviabilidad de mandar seres vivos con los suministros necesarios para realizar viajes tan largos y en condiciones tan extremas.

No obstante, con las investigaciones del estado de animación suspendida, esta fantasía humana podría ser factible. Los avances tecno-científicos se realizan cada vez a pasos más acelerados y las propuestas e ideas que parecían estar exclusivamente en la imaginación de la humanidad ahora comienzan a hacerse realidad. Empero ¿cuáles son las consecuencias de esos progresos que enorgullecen tanto a los seres humanos?

Ya a finales de los años noventa, en 1969 para ser exacta, se publicó la obra de Michael Crichton intitulada “La amenaza andrómeda”, donde se planteaba lo que podría suceder si un microorganismo extraterrestre entrara a la Tierra en los satélites que regresan al planeta después de realizar una misión espacial. La presunción, al basarse en organismos diminutos, no se vincula con la entrada de seres macroscópicos que nos quieren exterminar, sino con la posibilidad de que se gestara un crisis biológica y por lo tanto una pandemia que amenazara la vida en la Tierra.

A pesar de que el proyecto Biomas Terrestres en el Espacio pretende enviar vida al espacio y no introducirla al planeta, las consecuencias tanto para los seres lanzados como para la ecología espacial son desconocidos y, probablemente, impredecibles. Lo anterior es justamente la preocupación de la doctora Conley; empero, parece que nada de esto importará si a la larga se generan beneficios para una pequeña elite, que se enriquecerá y controlará más ámbitos de la vida en nombre de la ciencia.

Esto podría no parecernos algo alarmante, sobre todo porque prevalece la idea científica de que los insectos y microorganismos no sufren dolor. Sin embargo, algo que desde mi perspectiva es realmente preocupante, es que se pueda controlar el estado de animación suspendida, porque esto implicaría un control insólito sobre la vida [1]. El dominio de los viajes interestelares podría abrir vías para permitir que el capitalismo supere la actual crisis civilizatoria dirigiendo sus problemas a otros espacios del universo: si la "naturaleza" es el límite absoluto del capital, la expansión de sus límites permitiría que las relaciones capitalistas continúen expandiéndose: aunque sus contradicciones se amplifiquen, el sistema ganará el elemento que más le hace falta: tiempo...


1. La segunda acepción de animación suspendida proporcionada por el diccionario MacMillan señala que ésta es “una situación en la que alguien siente que no está activa/o debido a que debe esperar a que algo pase”. Definición que parece indicar que hay una impotencia por no poder hacer algo hasta que una condición que es ajena a la personal se modifique.