The Original Long Islanders Fight to Save Their Land From a Rising Sea
Sengupta, Somini y Shola Lawal [2020], "The Original Long Islanders Fight to Save Their Land From a Rising Sea", The New York Times, New York, 5 de marzo, https://www.nytimes.com/2020/03/05/climate/shinnecock-long-island-climat...
Somini Sengupta, reportera internacional para The New York Times, cuenta las historias de las comunidades y lugares más vulnerables por el cambio climático. Reconocida con el premio George Polk a corresponsal extranjera.
Shola Lawal, reportera a partir de 2020 de The New York Times, con estudios en Harvard Kennedy School.
El texto comienza haciendo referencia a los indios Shinnecock, un pueblo que se expandía sobre la franja Este (Estados Unidos), pero que ahora ha sido confinado a un terreno de 1.5 millas cuadradas al borde de una bahía en la que alrededor de 500 miembros fueron reconocidos federalmente. Pero debido al cambio climático el pueblo Shinnecock lucha contra el crecimiento de los océanos que amenaza con llevarse sus tierras. Sin embargo, el pueblo está empleando todo lo que está a su disposición para calmar la marea desde arena dragada, pastos marinos y de playa, hasta conchas de ostras y dunas, además de restaurar una larga y delgada playa en el borde de la bahía Shinnecock.
Los autores describen esto como una batalla para siempre y debido al paso acelerado del cambio climático que calienta y expande los océanos, los Shinnecock tendrán que traer más arena y sembrar más pasto para la primavera de 2020. Además Shavonne Smith, director del departamento ambiental del pueblo, quiere aumentar el arrecife de ostras con el fin de disipar la energía del oleaje; a lo que agrega que no es el tipo de asunto en que se pueda trabajar en contra de la naturaleza sino con ella.
No obstante ha tomado casi 4 años restaurar un estrecho de 3 mil 200 pies en la playa, lo que el pueblo Shinnecock hace en su tierra representa lo que expertos de adaptación climática le llaman soluciones basadas en la naturaleza. Distintos de estos esfuerzos se realizan en otros lados, por ejemplo en Nueva York se está restaurando el arrecife de ostras para proteger Manhattan de las mareas de las tormentas. Sin embargo, es incierto hasta que punto estas medidas logran ralentizar riesgos climáticos, debido a que no depende de la naturaleza sino en que tan rápido el mundo reduce las emisiones de gases de efecto invernadero y se maneje el aumento de los niveles del mar.
Los autores añaden que el panorama para las playas es sombrío, debido a que un estudio publicado en marzo de 2020 en la revista Nature Climate Change encontró que más de la mitad de las playas en el mundo están en peligro de desaparecer al terminar el siglo XXI. Por lo pronto el experimento del pueblo Shinnecock ha tenido éxito en salvar sus tierras del mar, a lo que Dorothy Peteet, paleoclimatóloga en el observatorio de la tierra Lamont-Doherty de la universidad de Columbia, agrega que la pregunta es hasta cuando esto funcionará ya que todo depende de que tan rápido avance el mar.
Desde otra perspectiva dice Eric Schultz, jefe de la mesa de síndicos de Southampton, que oficiales tratan de persuadir a residentes para no construir muros marítimos, esto, porque al proteger los hogares en la costa de Southampton del mar causan que la playa sea arrastrada. La playa Shinnecock a cambiado con el tiempo, los autores explican la transformación del ecosistema mediante 2 eventos: primero, un huracán en 1938 que se llevó un pedazo de la isla que se encuentra frente a la playa y provocó que la fuerza del océano llegara a la bahía, lo que hizo que los arboles alrededor de la orilla murieran; segundo, por el huracán Sandy en 2012 el cual arrastró piedras, llevó agua al cementerio, inundó el sótano del pastor Mike Smith e incluso llegó al patio del residente Seneca Bowen, transformando la playa que era parte de su patio en un pantano.
Para el director del programa marino del programa Cornell de extensión cooperativa, Chris Pikerel, Sandy mostró lo que vendrá en la época del cambio climático, y añade que el nivel del agua en combinación con tormentas como Sandy pueden alterar el ritmo natural y causar catástrofes naturales. De acuerdo con el United States Geological Survey los humedales en el estado de Nueva York protegidos por islas se han erosionado 20 pulgadas por año entre 1880 y 2015. Mientras que las costas frente a los océanos se erosionan mas rápido, un reporte de adaptación climática del pueblo Shinnecock estima un aumento del nivel del mar entre 2.1 y 4. 4 pies; además, se esperaran inundaciones crónicas de más de 6 pies o más dependiendo de la velocidad del aumento del mar. No obstante, el huracán Sandy dejó la oportunidad al pueblo Shinnecock de usar el dinero federal de construcción para salvar su tierra.
Por ello en 2016 colocaron 30 mil yardas cubicas de arena dragada, bolsas biodegradables llenas de ostras en filas para calmar la marea y limpiar el agua en el proceso. Mientras Pickerell y sus colegas plantaron distintos tipos de semillas: de pasto marino en la Bahía, spartina en el área pantanosa, y un pasto de playa nativo llamado Ammophila breviligulata para resguardar la arena. Además una fila de rocas fue colocada antes de la linea de la marea alta para proteger el follaje de spartina de las corrientes del suroeste que recorren la Bahía en verano.
En 2020 el pasto ha florecido y las dunas se mantienen, Viola Cause, gerente de recursos naturales del departamento ambiental Shinnecock, señala los árboles de saúco, sasafrás y roble que crecen detrás de las dunas, debajo de los cuales yacen tumbas que los Shinnecock desean preservar. Sin embargo, los autores agregan que el acontecer de la naturaleza ha hecho que parte de la spartina sea comida por patos, por lo que será necesario plantar más, así como en cierto momento traer más arena.
Por otro lado Viola explica que han logrado hacer retroceder el agua, aminorar su fuerza y permitir a las plantas hacer lo que deben para volver a la vida. Viola añade que sólo han tratado de utilizar lo que les fue dado por la naturaleza. Lo anterior, mientras se encontraba parada en playa Cuffey durante la marea alta, en donde antes del proyecto el agua le cubría hasta las rodillas. También hace referencia a cómo la playa antes estaba salpicada de distintos signos de vida, y culmina expresando el deseo de la comunidad Shinnecock por preservar el agua limpia, la playa y la tierra para las futuras generaciones.
Vousdoukas, Michalis, et al. [2020], "Sandy coastlines under threat of erosion", Nature Climate Change, 10(3): 260–263, 2 de marzo, https://doi.org/10.1038/s41558-020-0697-0
Las acciones llevada a cabo por el pueblo Shinnecock que son catalogadas por especialistas en adaptación climática como soluciones basadas en la naturaleza, son un ejemplo de lucha frente a la destrucción del ambiente que promueven el uso de otras soluciones que no agudizan el problema del cambio climático a pesar de la crisis civilizatoria que padecemos.