West-coast shuffle. Big tech is thriving in the midst of the recession
The Economist [2020], "West-coast shuffle. Big tech is thriving in the midst of the recession", The Economist, London, 2 de mayo, https://www.economist.com/leaders/2020/05/02/big-tech-is-thriving-in-the...
Nunca antes la industria de la tecnología había sido tan importante como lo es ahora. Las cinco empresas más grandes de Silicon Valley representan ya 20% del índice bursátil S&P 500. Sin embargo, nadie sabía qué esperar de esta industria ante una crisis económica. En 2007, cuando empezó la última recesión, Facebook tenía apenas cuatro años, Amazon era veinte veces más pequeña de lo que es ahora y Apple ganaba más de vender computadoras que iPhones.
Si bien, esta industria está prosperando en medio de la recesión, pues la gente pasa más tiempo frente a las pantallas de sus dispositivos y trabaja desde casa, si miramos con cuidado, las cosas son un poco más complejas. La industria parece estar alejándose de los modelos de negocio de la década anterior (en los cuales ofrecían servicios gratuitos para los usuarios y los principales ingresos provenían de la venta de publicidad) y acercándose a una nueva época marcada por las suscripciones, el comercio electrónico y la infraestructura de negocios. Para The Economist el centro espiritual de la industria se ha comenzado a mover de San Francisco a Seattle.
Mientras que las empresas tradicionales están experimentando fuertes pérdidas, a las empresas de tecnología les va bien. Alphabet, la matriz de Google, por ejemplo, ha visto sus ventas aumentar 13% en el primer trimestre del año y sus ganancias alcanzaron 7 mil millones de dólares. Facebook, por su parte, ha visto a sus 3 mil millones de usuarios utilizar más la plataforma. Mientras que la empresa más valiosa del sector, Microsoft, registró ganancias por 10.8 mil millones de dólares para el mismo trimestre.
Sin embargo, hay cierta vulnerabilidad detrás de esos números. La publicidad, principal fuente de ingresos de Alphabet y Facebook, ha decaído. En marzo de 2020 los ingresos por publicidad de Google fueron 15% menores que los del mismo mes del año previo debido a que los pequeños negocios están gastando menos en los servicios de publicidad de estas compañías. Las ventas de teléfonos inteligentes, que dependen de las cadenas de tiendas comerciales, también han caído y, aunque aún no se han publicado los informes de Apple, Samsung y Qualcomm, estas empresas han advertido que sus ventas podrían bajar. La situación es más grave para las empresas que necesitan contacto humano, como Lyft, una empresa de transporte compartido, que anunció que despedirá a 17% de su fuerza de trabajo.
Por un lado, The Economist destaca las suscripciones, el comercio electrónico y la infraestructura para “trabajo remoto” como la nueva fuente de crecimiento. En ese sentido, Netflix incorporó 16 millones de nuevos suscriptores en el primer trimestre del año mientras que Spotify ha experimentado el mismo tipo de ganancias. Microsoft, por su lado, está aportando la infraestructura crucial para el “trabajo remoto”, lo mismo Amazon con su división de computación en la nube, AWS, y su división de comercio electrónico.
Hacia el norte
Las empresas que en esta nueva era no tienen una posición tan ventajosa como las anteriores están trabajando duro para enmendarlo. Facebook está trabajando a marchas forzadas en mejorar su servicio de videollamadas. Google está impulsando sus servicios de computación en la nube, mientras que Apple está rebajando sus teléfonos y promocionando su división de servicios. Sin embargo, por ahora, los ganadores son Microsoft y Amazon, ambos asentados en Seattle. Esta crisis ha mostrado la resiliencia de la industria, pero también ha cambiado su centro de poder.
Ford perderá 5 mil millones de dólares este trimestre, mientras que Boeing ha perdido 4.7 mil millones de dólares cada trimestre [en el texto de The Economist no se especifica desde cuándo].
La crisis ocasionada por la pandemia y la recesión que le acompaña está fortaleciendo las tendencias observadas en los últimos meses en la industria de la tecnología (servicios de computación en la nube, comercio electrónico, entre otros), obligando a modificar las estrategias de algunos de estos gigantes tecnológicos, mientras que favorece a otros. En ese sentido, podría ser un parteaguas para la industria. Por otra parte, debería preocupar a estos oligopolios ganadores que sus negocios, a pesar de las ganancias momentáneas, estarán limitados por la recesión económica que hará que cada vez una menor parte de la población tenga accesos a sus productos.