How to feed the planet. The global food supply chain is passing a severe test

Cita: 

The Economist [2020], "How to feed the planet. The global food supply chain is passing a severe test", The Economist, London, 9 de mayo,https://www.economist.com/leaders/2020/05/09/the-global-food-supply-chai...

Fuente: 
The Economist
Fecha de publicación: 
Sábado, Mayo 9, 2020
Tema: 
El mercado de alimentos no se detiene ni por la pandemia del Coronavirus
Idea principal: 

El confinamiento por la pandemia de Coronavirus no ha detenido la cadena de suministro global de alimentos, la realidad es que esta industria se está adaptando rápidamente a los cambios y el sistema está lejos de ser perfecto: a medida que los ingresos colapsan, más personas pasan hambre.

La red alimentaria está pasando una prueba severa, incluso desde antes del comienzo de la pandemia, por lo tanto es crucial que, durante y después de esta, los gobiernos no caigan en una campaña de autosuficiencia equivocada.

La estrella no reconocida de la logística del siglo XXI es el sistema alimentario global el cual se sostiene a pesar de los gobiernos, no por ellos, y aunque su papel ha disminuido, a veces todavía fijan los precios y controlan la distribución. Esto, además de la variación del clima y de otros factores hacen que este sistema no sea infalible, por ejemplo, en 2007-08, tuvo lugar la mayor crisis de alimentos desde la década de los 70 del siglo pasado, motivada por las malas cosechas y los mayores costos de la energía. Como consecuencia, los precios de los alimentos subieron, causando pánico y disturbios por la escasez.

Si bien lo que permea ahora es un clima de incertidumbre, lo cierto es que hasta el momento el sistema ha logrado adaptarse: se ha mantenido el suministro de cereales, ayudado por cosechas recientes y existencias muy altas y las empresas navieras y los puertos continúan moviendo alimentos a granel. En términos generales en lo que va del año, los precios han bajado.

No todo son buenas noticias. A medida que la industria se ha globalizado, se ha vuelto más concentrada, creando cuellos de botella. Es así, que mientras el riesgo esté presente los políticos actuarán en consecuencia, trayendo consigo un empeoramiento de la situación.

No se trata solo de que los gobiernos deban mantenerse firmes y mantener el sistema alimentario mundial abierto a los negocios, sino de asegurar el ingreso para evitar engrosar las filas de la pobreza. Así, mismo se necesita hacer que el sistema sea más transparente, rastreable y responsable.
Es urgente que los gobiernos empiecen a entender los alimentos como un problema de seguridad nacional para desarrollar estrategias que permitan asegurar a todas y todos un acceso digno.
Se requiere una nueva revolución de la productividad, que involucre todo, desde invernaderos de alta tecnología cerca de las ciudades hasta robots de recolección de frutas. Eso requerirá toda la agilidad e ingenio que puedan reunir los mercados, y enormes sumas de capital. Esta noche, cuando recojas tus palillos o tu cuchillo y tenedor, recuerda tanto a los que tienen hambre como al sistema que alimenta al mundo.

Datos cruciales: 

1. El valor de la cadena de suministro global de alimentos se estima en 8 billones de dólares, Lo que representa el 10% del PIB mundial.

2. La oferta mundial de alimentos casi se ha triplicado desde 1970, ya que la población se ha duplicado a 7 700 millones. Al mismo tiempo, el número de personas que viven pobreza alimentaria ha caído del 36% de la población al 11%.

3. Los gobiernos suelen ser proteccionistas en la materia: los aranceles agrícolas de la Unión Europea son cuatro veces superiores a los de sus importaciones no agrícolas. Y una docena de grandes exportadores, incluidos países como Estados Unidos, India, Rusia y Vietnam y empresas comerciales como Cargill y Cofco dominan el mercado de alimentos básicos como el trigo y el arroz.

4. Mientras que a causa de la pandemia los ingresos de establecimientos de comida rápida como McDonald’s han disminuido en un 70% en Europa, la capacidad de comercio electrónico de comestibles de Amazon ha aumentado en un 60% y Walmart ha contratado a 150,000 personas.

5. La mano de obra que se necesitará para abastecer el mercado mundial de alimentos se estima en más de 1 millón de trabajadores migrantes de México, el norte de África y el este de Europa.

6. A medida que la economía se contrae y los ingresos colapsan, el número de personas que enfrentan una escasez aguda de alimentos podría aumentar: del 1.7% de la población mundial al 3.4%, según la ONU.

7. En los próximos 30 años, el suministro alimentario debe aumentar en aproximadamente un 50% para satisfacer las necesidades de una población más rica y en crecimiento, incluso cuando la huella de carbono del sistema necesita al menos reducirse a la mitad.

Nexo con el tema que estudiamos: 

Una de las facetas más lamentables de la crisis civilizatoria es el posible colapso del sistema alimentario mundial motivado en parte por el cambio climático y en parte por la misma industria que explota ad infinitum a los seres humanos que trabajan la tierra y a esta misma.
Es necesario realizar análisis más a profundidad acerca de las implicaciones económicas y sociales de la industria alimentaria e integrar en ellos una nueva perspectiva que conjugue los intereses de los gobiernos y del capital privado.