The Business of Burps: Scientists Smell Profit in Cow Emissions
Satariano, Adam [2020], "The Business of Burps: Scientists Smell Profit in Cow Emissions", The New York Times, New York, 1 de mayo, https://www.nytimes.com/2020/05/01/business/cow-methane-climate-change.html
Adam Satariano, trabaja en el diario The New York Times como corresponsal en tecnología en europa, cubriendo sus políticas y desinformación. Además, fue corresponsal de Bloomberg por más de 10 años.
El texto presenta el caso de una vaca llamada Peaches, en la granja Brades del distrito de los lagos, en Reino Unido; sometida a un examen por la científico Deepashree Kand, quién empleó un dispositivo del tamaño de un escáner para medir la cantidad de metano al eructar la vaca. Tanto la científico como la empresa suiza en la que trabaja, Mootral, estudian como una dieta puede hacer que estos animales liberen menos metano por medio de sus gases, ya que de acuerdo a un compilado de información de la compañía de investigación Rhodium Group, las vacas son el sexto emisor de metano, por encima de Brasil, Japón y Alemania.
Pero un grupo de compañías y científicos están cerca de encontrar un respuesta ecológica y financiera, mediante un suplemento comestible que cambié la química digestiva de los animales. La compañía holandesa DSM, está desarrollando un suplemento químico con resultados esperanzadores, y otras compañías están empleando algas marinas; sin embargo, Mootral, es la que ha ido más lejos al mezclar ajo, cítricos y otros aditivos, lo que ha sorprendido a científicos al cortar la toxicidad de sus desechos (Dato Crucial 1).
Lo anterior es consistente con estudios realizados por Mootral, y se plantea seguir las pruebas en Estados Unidos y Europa, además, está siendo probado en granjas lecheras y cárnicas, como la empleada por Mcdonald's en Países bajos para desarrollar nuevas técnicas en su cadena de suministro. No obstante, aún hay cuestionamientos por resolverse, y esto debe ser constatado en climas diferentes.
Por otro lado el modelo de negocios de Mootral depende de convencer a compañías y granjeros conservadores para que adquieran créditos que después puedan vender en el mercado de carbono, el cuál es impredecible por no estar regulado; el texto señala que de afrontar los presentes retos podría lograrse uno de los caminos más rápidos y sencillos para cortar uno de las mayores fuentes de gases de efecto invernadero.
Un reto existencial
El texto muestra las características digestivas de la vaca como un milagro, al poder transformar casi lo que sea en leche y carne, mediante la fermentación de celulosa, almidón y azúcar; y se compara su proceso de fermentación en el que no hay oxígeno con los barriles de cerveza. Por ello, el biólogo molecular Olivier Ried, comenta que podrían vivir de madera. Sin embargo, liberan el gas metano mediante flatulencias y eructos, al no poder convertirlo en energía, tal proceso consume 12% de su energía.
Se comenta como un reto existencial lo anterior, debido al impacto medioambiental que representa la ganadería, algo que se ha intentado dar a conocer a las multitudes mediante campañas y documentales en Netflix. Por un otro lado, Joe Towers, quién trabaja en la granja Brades añade que los granjeros están listo para mostrar que no son tipos malos.
Huele a Flatulencia
En este apartado se mencionó a grandes rasgos el proceso que siguió para el desarrollo de la investigación y para el activo de Mootral, que se remonta a 2010, cuando el grupo de investigadores participó en un esfuerzo de la Unión Europea por desarrollar formas para reducir el metano del ganado. El grupo, al trabajar para una compañía llamada Neem Biotech, descubrió una reducción de metano en las vacas gracias a la alicina, el mismo componente que produce el olor del ajo, no obstante la compañía era pequeña y no encontró la forma de consolidar el negocio.
Por ello, Neem sería comprada por la companía Zaluvita en 2012, cuyo fundador Thomas Hafner pensó en aplicarlo en drogas para humanos, pero se encontró con el trabajo de investigación que ya había hecho Mootral. Sin embargo, Hafner vendió el negocio para suplementos en humanos dos años después en 150 millones de dólares, y para el mismo fin creó un grupo de trabajo para investigar su uso para las vacas.
El reto de Mootral fue encontrar la cantidad precisa de alicina para evitar efectos secundarios, que afecten el sabor de la leche y la digestión del animal. También, debido a volatilidad de la alicina, decidieron emplear bacterias de ovejas para que la mezcla funcionara para todo el ganado. Cada determinadas semanas cortaban el estómago de una oveja, para extraer su contenido, exprimirlo y obtener un líquido color verde. Provisto de diferentes tipos de bacterias, que interactúan de maneras aún desconocidas; así, el líquido es probado con gotas de los distintos extractos en muestras quimicas para ver la cantidad de metano que liberan.
Robert Sounders, científico de Mootral, señala que las plantas parecen ser sencillas pero al poder notar su complejidad es posible explotarlas para hacer productos, por ello, añade que no sólo se está empleando el ajo, sino que la química está en el centro de la investigación.
Beneficios del aliento a ajo
En 2017 Mootral decidió permitir que otros científicos mejorarán sus propias pruebas, por ello, científicos daneses y alemanes publicaron que la compañía había reducido 50% las emisiones de metano en sus pruebas de laboratorio; la primera prueba de la compañía en una granja demostró reducir las emisiones 38%, mientras que un estudio en California mostró una reducción de 20% en la carne de ganado. Incluso, los gobiernos de irlanda y Suiza están financiando las investigaciones de Mootral.
Entre los descubrimientos inesperados se encontró que las vacas producen una mayor cantidad de leche, posiblemente, al emplear una menor cantidad de energía en la expulsión de metano. El Profesor Breves, director del instituto fisiológico de veterinaria en la universidad de Hannover, señaló que el fue escéptico en un principio, ya que no recuerda haber visto otro componente que tuviera los mismos resultados sin efectos negativos. Contrario a lo anterior, el profesor Hanne Hansen, de la Universidad de Copenhagen y antiguo colaborador de Mootral, señala que son necesarios más estudios en diferentes climas para probar la eficacia, ya que lo que pasa en el laboratorio es distinto a lo que pasa en la vida real.
Conseguir financiadores durante la pandemia
Thomas Hafner reconoce los retos que enfrenta Mootral con la pandemia, ya que las negociaciones con dos inversores distintos por 6.5 millones de euros en marzo de 2020 se detuvieron, sin embargo, señala un giro esperanzador para la compañía dado a las presiones gubernamentales hacia las cadenas de restaurantes para mantener modelos sustentables (Dato crucial 3). Hafner a invertido más de 20 millones de dólares en el negocio, y añade que cuentan con un plan para salir de la situación, con el cual se piensa vender el suplemento por 50 euros al año por vaca, lo que aumentará sólo unos peniques el precio y podrá generarle ganancias por hasta 375 millones de euros.
Por medio de los créditos de carbono, como incentivo financiero, las empresas pueden compensar sus niveles de emisión de carbono o venderlos a otras compañías que los necesiten o que se hayan comprometido a su reducción como Mcdonalds, Microsoft o Shell. Incluso, el gerente de Verra, el mayor programa voluntario de compensación de carbono, expresó que Mootral será la primer compañía que podrá vender créditos para reducir el metano de vacas. De aprobarse, compañías tendrían que aplicarlo a su cadena de suministro.
No obstante, existen dos problemas, que el mercado de carbono sigue siendo voluntario para muchas industrias (Dato crucial 4). Y la pérdida de credibilidad por proyectos que no tienen un efecto medible en el cambio climatico. Hafner, tiene confianza en que los compromisos adquiridos por el Tratado de París sean demandados por los gobiernos, ya que en Europa, hubo un compromiso de reducir en 40% sus niveles de gases de efecto invernadero de 1990 a 2030.
El autor señala esto como una apuesta riesgosa, por la combinación entre el aumento de las clase medias en países como China y su consumo de carne, y la negación de gobiernos para imponer restricciones a industrias de agricultura y ganadería. Ante esto, David Antonioli, director de Verra, señalo que el problema del cambio climatico no se acaba con eso, ya que nada importará si continuamos comiendo como lo hacemos. Mientras hafner está frustrado, ya que según él, Mootral y sus competidores tienen distinta formas para ayudar a detener el aumento de los niveles del mar, pero que existen muchos obstáculos financieros y políticos.
Estrategia del programa citas
La granja Brades se ha enfrentado a malos tiempos, según el texto en 2015 estuvo cerca de cerrar por el colapso de los precios de la leche. Ante lo que en una muestra de desesperación, Edward Tower uno de sus miembros, concurso en el programa de citas "amor en el campo". A pesar de no vender leche, aún lleva un noviazgo de 3 años.
Sin embargo, el autor señala que Mootral>/cite> les dio vida, ya que la granja Brades ha encontrado su nicho en el mercado como vendedores de leche baja en carbono para cafeterias artesanales en Reino Unido. En marzo de 2020, la granja mezclo dos veces al día el suplemento con hierba, maíz y cultivo integral, el cual sólo constó en 1% del alimento. Finalmente, Edward Tower señaló que aplicarlo a 400 vacas no va cambiar el mundo, pero el ser los primeros es lo que hace grandiosa a la pequeña granja.
1. El texto muestra que el experimento a Peaches llevado en la granja Brades, mostró una emisión de entre 32 a 38 partes por millón, una reducción de 30% respecto a las mediciones sin el suplemento.
2. Thomas Hafner espera que de abrirse la economía en los siguientes meses de 2020, los suplementos para las vacas alcanzaran un número de 300 mil vacas para 2021 y un total de 7.5 millones para 2024.
3. Según el grupo de investigación Forest Trent, el mercado mundial de carbono constó en 2018 de 300 millones de dólares.
Las fronteras del capital van a encontrar su expansión en este nicho de mercado debido a las repercusiones que estas compensaciones y los productos que se creen a partir de estos estudios, no sólo para la reducción de emisiones de metano, sino además en la restructuración de las cadenas de suministro de compañías de comida rápida y otras que utilicen ganado. Lo que es otra de las complejidades que surgen por la crisis civilizatoria, ya que las crisis climática no se resolverá con reducciones a cuentagotas sino existe un cambio en los hábitos de consumo y de producción.