The world's factory. China's prodigious exporters have some new tricks
The Economist [2020], "The world's factory. China's prodigious exporters have some new tricks", The Economist, London, 27 de junio, https://www.economist.com/finance-and-economics/2020/06/27/chinas-prodig...
El texto muestra lo que fue la feria de Cantón, un evento comercial realizado en China, que se llevó a cabo en línea del 14 al 24 de junio de 2020 por la pandemia de Covid-19. Dicho evento congregó a 25 mil fabricantes que mostraron sus productos; el semanario inglés señala que en dicho evento se mostró el poderío manufacturero chino.
Se mostraron diversos productos desde bicicletas motorizadas y carros eléctricos, hasta máquinas de café. A pesar de que la transmisión y el uso del inglés fue "amateur", la influencia del evento fue poderoso y se hizo gala del lugar de China como centro manufacturero mundial (Dato crucial 1).
The Economist señala que China cuenta con dos grandes ventajas en este rubro: la primera, su base industrial tiene una profundidad incomparable y se vuelve más competitiva (Dato crucial 2); la segunda, su mercado interno. Por ello, se menciona que las compañías estadounidenses quieren que Trump presione a China pero sólo para que estas puedan entrar al mercado chino. Incluso, la guerra económica con Washington, no ha evitado que el valor de las fusiones y adquisiciones extranjeras llegué a su nivel más alto en la década.
A pesar de que el confinamiento global ha afectado a las compañías chinas, al caer sus exportaciones 8% los primeros 5 meses de 2020, se han visto menos afectadas que otras compañías del resto del mundo gracias al éxito en contener la pandemia (Dato crucial 3).
El semanario inglés arguye que algunos países están al tanto de la destreza manufacturera china, por lo que ante la posibilidad de cierres, enumera 3 razones por las que hay una mayor oportunidad de que se acepten las ofertas de India y Taiwán sobre préstamos, tierras y otros beneficios para atraer inversores a sus territorios: primero, por el ascenso de China en las cadenas de valor, que ha hecho que muchas empresas de gama baja se trasladen al sueste asiático; segundo, las tensiones de la guerra comercial con Washington ha hecho que compañías busquen diversificar su suministro; tercero, el peligro de depender de las importaciones de un sólo país, que se hizo evidente durante la pandemia.
Además, hay evidencia de que grandes compañías están planeando llevar su producción fuera de China (Dato crucial 4). The Economist culmina señalando que este proceso no será inmediato; sin embargo, los negocios chinos se han adaptado muy bien ante los cambios, y expone el caso de Take Sowind una compañía de productos de limpieza caseros presente en la feria de cantón, cuyos productos se han vendido por miles en Estados Unidos y Europa. Ivy, vendedora de la empresa que presentó el producto en la feria, expresó "toma tiempo acostumbrarse a una nueva técnica, pero ha ido mejor de lo esperado", refiriéndose a la migración de las compras en línea.
1. En la feria de Cantón de 2020 se indicó que a pesar del Covid-19 China es casa de 28% de la manufactura global, lo que es casi tanto como el conjunto de manufacturas de Estados Unidos, Japón y Alemania, y además se sigue fortaleciendo.
2. En 2005 26% del valor de las exportaciones chinas fue agregado en el exterior, mientras que para 2016, este valor agregado en el exterior cayó a 17%.
3. La recuperación industrial en China le ha permitido pasar a ser 30% de las importaciones de Japón en mayo de 2020. Mientras pasó a ser 24% de las importaciones europeas en abril de 2020. Ambas cifras récord.
4. Según el banco UBS, entre sus más de 1 000 clientes, 76% de compañías estadounidenses, 85% surcoreanas y japonesas y 60% de empresas chinas, han dicho que planean mover su producción fuera de China. Lo que se traduce entre 20 y 30% de la capacidad manufacturera china, según Keith Parker de UBS.
Gráfica 1. Muestra el porcentaje de ganancias fruto del valor agregado de manufacturas globales desde 2014 hasta 2018. Se muestran los casos de China, Estados Unidos, Japón y Alemania, en el que Beijing se encuentra a la cabeza desde finales de 2009, al rebasar el 17%, y en 2018 se haya con casi 30%. Le sigue Estados Unidos con una tendencia decreciente, desde 22% en 2014 hasta 16% en 2018. Japón también muestra una tendencia decreciente, al contar con casi 15% en 2014 y caer hasta 9% en 2018. Mientras Alemania se ha mantenido más estable, con 9% en 2004 hasta casi 6% en 2018.
Lo acontecido con las exportaciones procedentes de China —que no únicamente engloban capitales chinos, sino transnacionales, al ser Beijing la fábrica por excelencia del mundo— muestra la necesidad de una reconfiguración en el diseño de la división territorial del trabajo o por lo menos en sectores críticos, una transición que China se va ver empujada aprovechar para no perder su influencia con la misma. La competencia intercapitalista mundial lleva a que se den contradicciones como en el caso de las compañías estadounidenses, las cuales en su ambición por entrar al mercado chino, continuarán presionando a Washington para ganar en la disputa, pero únicamente por su propio beneficio, no por el de Estados Unidos como país.