Google Employees Are Free to Speak Up. Except on Antitrust
Wakabayashi, Daisuke [2020], "Google Employees Are Free to Speak Up. Except on Antitrust", The New York Times, New York, 13 de octubre, https://www.nytimes.com/2020/10/13/technology/google-employees-antitrust...
Daisuke Wakabayashi es un reportero de negocios ubicado en San Francisco, se dedica a la cobertura de temas de tecnología.
Los empleados de Google (Googlers) son conocidos por alzar la voz y enfrentar a la compañía por todo tipo de temas. Sin embargo, existen las excepciones y por ello, el asunto que se evade en Google a toda costa es el referente al antitrust o demanda antimonopolio.
Google recuerda constantemente a sus empleados que la empresa no participa en prácticas de sabotaje a sus competidores; por lo tanto, el tema nunca es hablado entre los Googlers. A causa de ello, investigaciones del Departamento de Justicia que buscan acusar a la compañía por presentar tendencias de monopolio, no han podido conseguir pruebas desde interior de Google.
Desde su entrada a Sillicon Valley, los empleados del gigante son entrenados para saber qué y cómo decir las cosas respecto al antitrust. Primordialmente, se les enseña que cualquier email con asuntos de la empresa deben pasar por el área legal bajo el uso de la confidencialidad “abogado-cliente”.
A pesar de que no existe una censura formal al tema, eso no exime a los Googlers de represalias en su contra si eligen traer a colación un asunto tan polémico. De esa forma, la comunidad que labora en Google ha desarrollado el consenso tácito de evitar hablar de antitrust si quieren conservar sus empleos o acceder a puestos más altos. También, la calidad de los sueldos para los Googlers ha logrado un entendimiento entre la compañía y sus trabajadores.
Los voceros de Google afirman que la compañía sigue todas las reglas de competencia. No obstante, en los últimos años la empresa se ha visto bajo múltiples demandas e investigaciones de antimonopolio alrededor del mundo y en Estados Unidos.
Como consecuencia de lo previo, Google es más cuidadoso con sus adquisiciones y al mismo tiempo, ha reforzado la seguridad en la comunicación interna de la compañía. Como resultado, el tipo de comunicación entre Googlers con el privilegio “abogado-cliente” se ha convertido en la estrategia antitrust más efectiva de la compañía.
En adición al sistema de correo “abogado-cliente”, se pide a los Googlers que se abstengan de usar ciertas palabras o frases referentes a la competencia. También, se les dice que evadan estimar el porcentaje de las acciones de Google en el mercado.
El sistema de Google funciona y gracias a él, no existen registros de temas sensibles dentro de la empresa, esto pone trabas en las evidencias para procesos judiciales. Asimismo, ha permitido a la compañía la posibilidad de retener información bajo el alegato de que se trata de comunicación confidencial. De esa forma, Google aplica una táctica de retraso frente a las cortes.
La experiencia de Google con las leyes antitrust, han ayudado a la compañía a perfeccionar sus métodos de evasión.
1. Un ejemplo de la estrategia mencionada a lo largo del texto se dio en Texas en 2012, en donde el abogado general acusó a Google de retener 14500 documentos en medio de una investigación. Eventualmente el estado se vio obligado a dejar de lado la demanda.
El presente texto es un ejemplo de cómo las grandes corporaciones desarrollan estrategias para cimentar e incrementar su poder. Mismas que han permitido que las grandes empresas redefinan su papel en la sociedad al demostrar su capacidad de rebasar el poder de los Estados, como es el caso de Google y la ley antimonopolio estadounidense.
Lo anterior, no quiere decir que las compañías se encuentran en una disputa con los Estados. Sino, que representa una de las tantas formas en las que estos actores están interconectados; esto, considerando que el artículo no menciona los apoyos que los gobiernos dan a sus empresas para expandirse más allá de sus fronteras e incrementar su acumulación de capital (tanto de las compañías como de los Estados).