La empresa de Chan es considerada de las más grandes en muebles de China, de manera que alcanzar el mercado norteamericano es estratégico. Por tal motivo, decenas de empresas chinas atraen constantes inversiones en México, para aprovechar el acuerdo comercial expansivo con América del Norte. Así pues, las firmas chinas con las fábricas les permite etiquetar sus productos como "Hecho en México" y cruzar libremente a Estados Unidos por vía terrestre sin pagar impuestos.

Las atracciones geográficas de las empresas chinas sobre México derivan por la creciente tendencia denominada como "nearshoring" o deslocalización cercana, esto desde el acercamiento de la producción a los clientes como mecanismo para limitar las vulnerabilidades a los problemas de transporte y las tensiones geopolíticas. Asimismo, la interacción de las empresas chinas en México reflejan la brecha política que divide a Estados Unidos y China durante la próxima fase de la globalización; sin embargo, las fuerzas comerciales que unen a las naciones son más fuertes. Con lo anterior, el comercio chino pretende seguir en el mercado estadounidense, de manera que con la instalación de fábricas en la región buscan desarrollar operaciones dentro del bloque comercial de América del Norte, y así suministrar más bienes, desde electrónicos hasta ropa y muebles. En consecuencia, Nuevo León como estado fronterizo mexicano se posiciona como referente de los frutos de la inversión extranjera.

A su vez, la Secretaría de Economía de México, informó que desde el inicio del gobierno de García en octubre de 2021, se han invertido cerca de 7 mil millones de dólares en inversión extranjera, siendo el segundo estado con mayor captación de inversión (Dato Crucial 2). De forma particular, parte de las inversiones extranjeras recientes responden a una remodelación amplia de las cadenas de suministros globales, a su vez que una pequeña parte se destina al establecimiento de fábricas con productos terminados para la venta en Estados Unidos.

De la misma forma, la pandemia ocasionó el cierre de la industria china frenando los puertos de carga, por lo que empresas conectadas con fábricas de Estados Unidos sufrieron escasez de manufacturas. En tal escenario, algunas empresas estadounidenses exigen a proveedores chinos un acercamiento de sus plantas en América del Norte como mecanismo de estabilidad en las relaciones comerciales.
Lo anterior se puede notar con las presiones de Ford y General Motors ejercidas a la empresa de Lizong, un fabricante chino de rines para automóviles, esto para construir las primeras fábricas fuera de Asia dentro de un parque industrial en Nuevo León. Asimismo, para la empresa de Corea del Sur, DY Power, el norte de México es un espacio potencial para instalar fabricas de componentes para equipos de construcción, por el interés de estar cerca de su cliente en Texas ante la incertidumbre por la crisis en la cadena de suministro por la covid-19.

El extenso parque industrial Hofusan en Nuevo León, es un emprendimiento de un desarrollador local y dos empresas de China.

El atractivo interés hacia Monterrey se demuestra por la cercanía a Texas, una fuerza laboral altamente calificada formada en ingeniería, grandes tierras y principalmente mayor seguridad a comparación de estados vecinos. Esta situación se puede notar con las tierras de César Santos que junto con Grupo Holley construyeron el parque industrial Hofusan Real Estate, con el objetivo de generar una red de almacenes y fábricas con apartamentos para visitantes ejecutivos.

De igual importancia, en el desarrollo del proyecto inversionista se debe tomar en consideración la relación de los proveedores locales con los beneficios a la región: las condiciones laborales y los incentivos extra de apoyos trabajadores, como comidas y transporte.

De esta forma, un punto esencial en del proceso, son los insumos de proveedores locales necesarios para desarrollar mercancías con piezas y materias primas de la región como método para calificar en el acceso libre de impuesto en el acuerdo comercial de América del Norte.
Por último, otro ejemplo de uso de insumos de la región es Lenovo, fabricante chino de computadoras, que por problemas de transporte internacional cambiaron a un proveedor de la ciudad de Guadalajara, pero en cuanto materiales clave como memorias o cables especializados siguen importando desde China.