Data center emissions probably 662% higher than big tech claims. Can it keep up the ruse?

Cita: 

O’Brien, Isabel [2024], "Data center emissions probably 662% higher than big tech claims. Can it keep up the ruse?", The Guardian, London, 15 de septiembre, https://www.theguardian.com/technology/2024/sep/15/data-center-gas-emiss...

Fuente: 
Otra
Fecha de publicación: 
Domingo, Septiembre 15, 2024
Tema: 
Las grandes empresas, sus emisiones y el papel de la inteligencia artificial
Idea principal: 

    Isabel O'Brien, es una periodista independiente que escribe acerca de la transición energética, energías limpias, la inteligencia artificial, las empresas, el reto climático.


    En los últimos años, las grandes tecnológicas como Google, Microsoft, Meta, Apple y Amazon han enfrentado críticas por el impacto ambiental de sus centros de datos, especialmente debido al creciente auge de la inteligencia artificial (IA), que demanda grandes cantidades de energía (datos cruciales 1 y 2).

    Amazon, el mayor emisor entre estas empresas, no fue incluido en este cálculo debido a la dificultad de aislar las emisiones específicas de sus centros de datos.

    El lanzamiento de ChatGPT a fines de 2022 y el crecimiento de la IA han incrementado aún más la demanda energética (datos cruciales 3 y 4).

    A pesar de que las cinco grandes tecnológicas han declarado su neutralidad de carbono, organizaciones como Empleados de Amazon por la Justicia Climática critican que estas afirmaciones se basan en "contabilidad creativa" (dato crucial 5). Este contexto plantea serias preocupaciones sobre el impacto climático de la industria tecnológica en un momento de creciente dependencia de la IA y los centros de datos.

    Una métrica equivocada

    El texto critica el uso de los Certificados de energía renovable (REC, por su sigla en inglés) como una herramienta de "contabilidad creativa" empleada por las grandes tecnológicas para reportar sus emisiones de carbono. Los REC permiten a las empresas comprar electricidad generada con energías renovables, pero esta energía no necesariamente es consumida directamente por sus instalaciones, ya que puede provenir de cualquier lugar, incluso de otro país. Esto distorsiona las cifras oficiales de emisiones, conocidas como emisiones "basadas en el mercado".

    Cuando se excluyen los REC y otras compensaciones, se obtienen las emisiones "basadas en la ubicación", que reflejan las emisiones reales generadas en el lugar donde operan los centros de datos. Estas emisiones muestran una tendencia alarmante lo cual subraya la magnitud del impacto ambiental real de estas empresas, a pesar de sus declaraciones de sostenibilidad (dato crucial 6, gráfica 1).

    La industria de los centros de datos enfrenta un debate significativo sobre cómo medir y reportar las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI). Mientras algunos expertos y organizaciones, como Uptime Institute, defienden que las métricas basadas en la ubicación son más precisas y transparentes, ya que reflejan las emisiones reales asociadas al consumo de energía, el Protocolo de gases de efecto invernadero permite el uso de REC en los informes oficiales. Esta discrepancia ha generado una división entre las principales empresas tecnológicas.

    Por un lado, la Emissions First Partnership, liderada por Amazon y Meta, apoya el uso de REC sin restricciones geográficas, manteniendo una postura más flexible. Por otro lado, Google y Microsoft promueven un enfoque más riguroso, exigiendo una correspondencia entre la producción de energía renovable y el consumo, basada en tiempo y ubicación (dato crucial 7). Ambas empresas han comenzado a eliminar el uso de REC de baja calidad.

    Además, académicos y líderes de la industria han criticado el uso de REC, argumentando que no representan una reducción real de emisiones. A pesar de que el Protocolo de GEI recomienda incluir métricas basadas en la ubicación y en el mercado, la mayoría de las empresas no reportan ambas en sus informes anuales. Solo dos compañías incluyen cifras basadas en la ubicación de manera directa, y únicamente para las emisiones de alcance 2 (indirectas por compra de energía). Este enfoque predominante en métricas basadas en el mercado limita la transparencia y precisión en la medición de emisiones.

    Centros de datos internos

    El impacto ambiental de los centros de datos es un tema crítico, especialmente en lo que respecta a las emisiones de GEI de alcance 2, que se refieren a las emisiones indirectas generadas por el consumo de energía eléctrica. Estas emisiones son particularmente relevantes en las operaciones de los centros de datos, ya que representan la mayor parte de las emisiones de alcance 2 para empresas tecnológicas como Meta y Microsoft. Sin embargo, Amazon es una excepción, ya que sus operaciones de comercio electrónico y logística también contribuyen significativamente a sus emisiones de alcance 2.

    Meta y Microsoft son las únicas empresas que proporcionan datos específicos sobre las emisiones de sus centros de datos (datos cruciales 8 y 9). No obstante, las diferencias entre las cifras oficiales y las basadas en la ubicación son enormes, lo que revela que los centros de datos son mucho más intensivos en carbono de lo que sugieren los informes oficiales (datos cruciales 10 y 11).

    Estas discrepancias se deben a que las empresas no informan específicamente las emisiones de sus centros de datos en sus cifras oficiales (dato crucial 12, gráfica 2). Aunque no se dispone de datos específicos para Google y Apple, se sugiere que sus emisiones basadas en la ubicación podrían ser proporcionalmente similares a las de Meta y Microsoft, dado que sus modelos de negocio son comparables. En resumen, el texto destaca la subestimación de las emisiones reales de los centros de datos en los informes oficiales y la necesidad de una contabilidad más precisa y transparente.

    Las emisiones basadas en la ubicación fueron significativamente mayores que las cifras oficiales reportadas durante un período determinado (dato crucial 13). Sin embargo Amazon no proporcionó datos basados en la ubicación para 2020 y 2021, por lo que se utilizaron sus cifras oficiales, que probablemente subestiman las emisiones reales, para realizar el cálculo correspondiente. Esto resalta una posible discrepancia importante entre las emisiones reportadas oficialmente y las emisiones reales basadas en la ubicación.

    Centros de datos de terceros

    Se aborda el impacto ambiental de los centros de datos de terceros, que son utilizados por grandes empresas tecnológicas, conocidas como "hiperescaladores"(dato crucial 14). Las emisiones generadas por estos centros de datos de terceros deberían, en teoría, incluirse en el alcance 3, que cubre todas las emisiones indirectas asociadas a las actividades de una empresa, como la fabricación de hardware, la construcción de infraestructuras y el consumo de energía en instalaciones externas.

    Sin embargo, la contabilidad de estas emisiones es compleja y poco clara. Algunos operadores de centros de datos incluyen las emisiones relacionadas con la energía en sus propios informes de alcance 2, mientras que otros las clasifican como alcance 3, lo que genera inconsistencias en los reportes. Además, todas las empresas utilizan métricas basadas en el mercado para calcular sus emisiones de alcance 3, lo que resulta en una subestimación de las emisiones reales.

    Un caso destacado es el de Apple, que presenta una brecha significativa entre sus cifras oficiales de alcance 3 y las basadas en la ubicación. Esta discrepancia se debe principalmente al uso de REC en la fabricación de aparatos como el iPhone. Apple no incluye las pérdidas de transmisión y distribución ni las emisiones de sus contratos de nube con terceros en sus cifras basadas en la ubicación. Según sus cifras basadas en el mercado, sus contratos de nube de terceros informan cero emisiones (compensadas por REC). Por lo tanto, en ambas cifras de emisiones totales de Apple, basadas en la ubicación y en el mercado, no se reflejan las emisiones reales asociadas con sus contratos de centros de datos de terceros.

    2025 y más allá

    El crecimiento de la inteligencia artificial (IA) y su impacto en el consumo energético de los centros de datos están generando preocupación en la industria tecnológica (dato crucial 15). Tanto Google como Microsoft han atribuido sus recientes aumentos en emisiones basadas en el mercado al crecimiento de esta tecnología. Chris Taylor, exdirector de la unidad de estrategia energética de Google y actual CEO de Gridstor, explicó que, aunque la IA no era la principal preocupación hace dos años, el crecimiento de Google Cloud ha sido un factor clave en el incremento del consumo energético de los centros de datos.

    Existe incertidumbre sobre si las redes eléctricas actuales podrán soportar esta creciente demanda. Marc Ganzi, CEO de DigitalBridge, una firma de capital privado que posee dos de los mayores operadores de centros de datos de terceros del mundo, advirtió que el sector podría quedarse sin energía en los próximos dos años. Además, los retrasos en la interconexión de redes a nivel mundial dificultan la implementación de nueva capacidad de energía renovable a tiempo para satisfacer esta demanda.

    El texto también menciona una corrección realizada el 18 de septiembre de 2024, en la que Apple aclaró que solo realizó auditorías parciales para su cifra de alcance 3 basada en la ubicación, desmintiendo una afirmación previa que relacionaba la brecha en sus emisiones con los centros de datos.

Cápitulos relevantes para el proyecto: 

    1.-Según un análisis de The Guardian, las emisiones reales de los centros de datos propios de Google, Microsoft, Meta y Apple entre 2020 y 2022 fueron 662% (7.62 veces) superiores a las reportadas oficialmente.

    2.- Los centros de datos representaron entre el 1 y 1.5% del consumo eléctrico mundial, según la Agencia Internacional de la Energía.

    3.- Goldman Sachs estima que una consulta de ChatGPT consume casi 10 veces más electricidad que una búsqueda en Google, y proyecta que la demanda energética de los centros de datos aumentará 160% para 2030.

    4.- Morgan Stanley, por su parte, prevé que las emisiones globales de estos centros alcancen 2 500 millones de toneladas métricas de CO2 equivalente para ese mismo año.

    5.- Amazon, por ejemplo, anunció en julio de 2023 que había reducido sus emisiones brutas 3%, pero se le acusa de seguir expandiendo el uso de combustibles fósiles en sus operaciones.

    6.-Si las cinco grandes tecnológicas (Google, Microsoft, Meta, Apple y Amazon) fueran un solo país, sus emisiones basadas en la ubicación en 2022 las ubicarían en el puesto 33 entre los países con mayores emisiones, superando a Argelia y quedando detrás de Filipinas

    Gráfica 1.
    En esta gráfica se expresan las emisiones energéticas que generan cada una de las grandes empresas en conjunto con la IA.

    7.- Google tiene como objetivo operar con energía renovable las 24 horas del día para 2030, mientras que Microsoft busca alcanzar un 100% de energía libre de carbono en el mismo período.

    8.- En 2022, los centros de datos de Meta representaron 100% de sus emisiones oficiales basadas en el mercado y 97.4% de sus emisiones basadas en la ubicación.

    9.- Para Microsoft, estas cifras fueron de 97.4% y 95.6%, respectivamente.

    10.- Por ejemplo, las emisiones de Meta aumentaron de 273 toneladas métricas de CO2 equivalente (oficiales) a más de 3.8 millones de toneladas métricas (basadas en la ubicación), un incremento de más de 19 000 veces.

    11.- En el caso de Microsoft, el aumento fue de 280 782 toneladas métricas a 6.1 millones de toneladas métricas, casi 22 veces más.

    12.- Para Meta, 97.4% de la brecha entre las cifras basadas en la ubicación y las oficiales corresponde a emisiones no reportadas de sus centros de datos, mientras que para Microsoft esta cifra es de 95.55%.

    Gráfica 2.
    En esta gráfica podemos ver los datos oficiales de las emisiones de cada centro.

    13.- Las emisiones basadas en la ubicación, en una categoría específica, fueron al menos 275% mayores (o 3.75 veces más altas) que las cifras oficiales reportadas entre 2020 y 2022.

    14.- Según Synergy Research Group, estas empresas representaron 37% de la capacidad mundial de centros de datos en 2022, y aproximadamente la mitad de esa capacidad se obtuvo a través de contratos con operadores externos.

    15.- Se prevé que la demanda de electricidad de estos centros se duplique para 2030, según el Instituto de Investigación de Energía Eléctrica, debido a la carga adicional que supone la IA.

Nexo con el tema que estudiamos: 
    Las evidencias sobre el aumento del consumo energético ligado a la expansión de los sistemas basados en IA muestran que la trayectoria del capitalismo es catastrófica en tanto no se cuenta con fuentes renovables y que al menos reduzcan las emisiones de GEI. En tanto tecnología transversal, la expansión de la IA implicará niveles de calentamiento que harán inviable la vida en el planeta: una prospectiva que se menciona poco en los debates públicos y sin embargo aparece cada vez más en forma de alertas sobre el aumento del consumo energético.