Convergence. Clash of the titans

Cita: 

The Economist [2025], "Convergence. Clash of the titans", The Economist, London, 31 de mayo, https://www.economist.com/special-report/2025/05/23/clash-of-the-titans

Fuente: 
The Economist
Fecha de publicación: 
Sábado, Mayo 31, 2025
Tema: 
Los grandes colosos del sistema financiero
Idea principal: 

    Los nuevos gigantes de Wall Street están derribando viejas fronteras

    El informe del Senado estadounidense sobre el crack de 1929 ya advirtió que el creciente interés popular por los valores financieros ponía la riqueza nacional en manos de los financieros. En 2025, ese poder se ha concentrado en un nuevo grupo de gigantes. Algunos, como JPMorgan Chase, deben su tamaño al de la economía estadounidense, pero otros han crecido gracias a cambios estructurales en los mercados. La inversión pasiva ha impulsado a gestores de activos como BlackRock y Vanguard, mientras que actores de los mercados privados, como Apollo, Blackstone y KKR, han visto un crecimiento masivo en sus activos. Además, grandes fondos de cobertura como Citadel y Millennium han absorbido capital y talento, rivalizando en ingresos con los bancos más importantes.

    La influencia de estos colosos se expande y sus esferas de actividad se solapan, desdibujando las fronteras tradicionales. Apollo se asemeja más a una aseguradora que a un fondo de capital privado, las firmas de capital de riesgo están adoptando estructuras propias de actores más grandes, y los fondos de cobertura actúan como creadores de mercado, un rol históricamente bancario. A su vez, los bancos, como Goldman Sachs, se reorganizan para competir con estos nuevos rivales en áreas como los préstamos privados.

    Este fenómeno redefine tres fronteras clave del sistema financiero. Primero, la que separa a bancos y no bancos, con un aumento explosivo de los préstamos bancarios a instituciones financieras no bancarias. Segundo, el límite entre mercados públicos y privados, donde los prestatarios ahora eligen entre deuda que se negocia frecuentemente o préstamos ilíquidos, y los gestores de activos operan en ambos. Tercero, la brecha entre inversores minoristas e institucionales se acorta, ya que productos complejos como los ETF ofrecen a individuos riesgos y recompensas especulativas, un efecto que las criptomonedas no hacen más que intensificar (dato crucial 1).

    No somos tan diferentes, tú y yo

    La convergencia entre las mayores firmas ilustra la transformación del sistema. BlackRock, fundada en el ámbito de los mercados públicos y con enfoque en inversionistas minoristas, se ha expandido hacia los mercados privados, adquiriendo empresas de crédito e infraestructura. Blackstone, por el contrario, ha comenzado a ofrecer productos a inversionistas individuales, abandonando su nicho exclusivo en el capital privado. Este cruce de caminos refleja una tendencia más amplia: la economía estadounidense se financia cada vez más a través de los mercados de capitales y no de los bancos. El dinamismo de este modelo se refleja en su capacidad para fondear innovación tecnológica, desde centros de datos hasta nuevos emprendimientos en inteligencia artificial (dato crucial 2).

    Un negocio arriesgado

    La velocidad del cambio también aumenta los riesgos. La historia financiera muestra que innovaciones aparentemente benignas pueden convertirse en amenazas sistémicas, como ocurrió con los derivados de crédito en la década de 2000. Investigaciones recientes advierten que las interconexiones entre bancos y no bancos debilitan la idea de que la regulación ha reducido el riesgo sistémico. Además, autoridades como el gobernador del Banco de Inglaterra han señalado que la estructura actual del mercado está generando nuevas vulnerabilidades. Para otros, la innovación financiera funciona como un virus: se expande rápidamente allí donde encuentra debilidades regulatorias, lo que significa que el crecimiento acelerado de estos actores es también una señal de riesgo latente (dato crucial 3).

Datos cruciales: 

    1- Los préstamos de bancos a instituciones financieras no bancarias se duplicaron desde 2020, alcanzando 1.3 billones de dólares, equivalentes a 10% del total de préstamos bancarios. El endeudamiento de fondos de cobertura con la banca aumentó de 1.4 billones a 2.4 billones de dólares en el mismo periodo.

    2- En 2024, BlackRock destinó el equivalente a una cuarta parte de su capitalización de mercado a adquisiciones estratégicas en crédito privado (HPS), datos financieros (Preqin) e infraestructura (Global Infrastructure Partners).

    3- La gráfica muestra el crecimiento acelerado de los préstamos bancarios a instituciones no bancarias, pasando de menos de 0.5 billones de dólares en 2015 a más de 1.25 billones en 2025, lo que evidencia la creciente interdependencia entre banca y fondos privados.

Nexo con el tema que estudiamos: 

    La convergencia entre bancos y fondos no bancarios refleja la tendencia a trasladar riesgos hacia espacios menos regulados, lo que genera nuevas formas de inestabilidad. Al mismo tiempo, la capacidad del modelo estadounidense para fondear con rapidez sectores innovadores, como la inteligencia artificial, revela su dinamismo frente a sistemas financieros más rígidos como el europeo. Sin embargo, este dinamismo convive con fragilidades estructurales, pues las interconexiones hacen que los problemas en un segmento puedan propagarse con rapidez al conjunto del sistema. En este sentido, la nota permite analizar cómo la innovación financiera, más que eliminar el riesgo, lo transforma y redistribuye en un contexto de competencia global.