Agricultural technology. Feeding the ten billion. Growing enough food for future generations will be a challenge. Here’s how to meet it

Cita: 

The Economist [2016], "Agricultural technology. Feeding the ten billion. Growing enough food for future generations will be a challenge. Here’s how to meet it", The Economist, London, 4 de junio, http://www.economist.com/news/leaders/21700394-growing-enough-food-futur...

Fuente: 
The Economist
Fecha de publicación: 
Sábado, Junio 4, 2016
Tema: 
Alta tecnología en la agricultura como única alternativa viable para el crecimiento poblacional mundial
Idea principal: 

Para The Economist la lucha histórica de los seres humanos por su alimentación ha quedado superada en la civilización moderna. La disminución de la población campesina o granjera que trabaja directamente en la agricultura ha disminuido en proporciones considerables.

Aunque la hambruna ha terminado en gran parte del mundo, esta continúa acechando a gran parte de África –Etiopia, Mozambique, Zimbabue y otros-. El reto se presenta al incrementarse la demanda de alimentos con el crecimiento demográfico en el mundo.

Abundancia

Una de las preocupaciones de los neo-malthusianos* es que en algunos lugares la productividad de productos básicos –arroz, trigo– ha llegado a un estancamiento donde los más sofisticados agroquímicos no logran incrementar las cosechas ni queda tierra no cultivable disponible. Por otro lado, el cambio climático y el incremento de la temperatura harán incultivables muchos de los lugares hoy en día cultivables, particularmente, en regiones tropicales y pobres.

The Economist argumenta que las preocupaciones son legítimas pero pueden ser superadas con: i) la aplicación y propagación de la tecnología, y ii) la implementación de políticas públicas sensibles en el tema.

La tecnología agrícola está cambiando rápidamente, aplicada principalmente por granjeros en países ricos y en lugares de ingresos medios. Las técnicas desarrolladas en occidente –principalmente crianza de modificaciones genéticas que pueden crear cultivos con especiales propiedades– están siendo adaptadas para crear cultivos tropicales más productivos y nutritivos. También puede producir cultivos con propiedades resistentes a la sequía y a altas temperaturas.

Para obtener el crecimiento requerido del 70% en la producción de alimentos, The Economist plantea la necesidad de difundir las prácticas y uso de las nuevas tecnologías en la agricultura de los pequeños productores y de subsistencia en África y Asia, y la construcción de caminos y vías para el transporte de sus excedentes al suministro de mercados. Lo que debe ser acompañado de políticas gubernamentales que reduzcan el desperdicio por malas prácticas de los consumidores en los países ricos, malas prácticas de cosecha, de almacenamiento y transporte. De esta manera, según The Economist, no solo será posible alimentar a 10 mil millones, sino alimentarlos bien.


*Neo-malthusianos: El neomalthusianismo es la doctrina que acoge el supuesto problema de la superpoblación planteado por Thomas Robert Malthus en el siglo XIX. En la que las problemáticas sociales (hambrunas, guerras, etc.) eran originadas por el crecimiento poblacional al ritmo de una progresión geométrica, mientras que la provisión de alimentos lo hacía en progresión aritmética.
Datos cruciales: 

° En 1900 dos de cada cinco estadounidenses trabajaban en un granja, ahora uno de cada cincuenta lo hace.

° Para 2050 la población proyectada son 10 miles de millones de personas.

° Dos mil millones de personas en el mundo no tienen suficiente comida para comer.

° Según la FAO, un tercio de la comida se desperdicia durante o después de la cosecha.

Nexo con el tema que estudiamos: 

La postura de The Economist refleja las respuestas liberales para resolver el supuesto problema demográfico mediante la técnica moderna. Lo que no se pone en tela de juicio es lo que está de fondo: la forma histórica específica en la que la humanidad está produciendo hoy en día los alimentos. El modo de producción capitalista implica no solo el cómo se produce, sino también el cómo se distribuyen y a quiénes llegan los alimentos, favoreciendo primordialmente la realización de valor que la vida humana misma.

Por otra parte, los alimentos son un producto estratégico ya que son elementos de reproducción vital de la fuerza de trabajo. El dominio y el control de la producción de alimentos en pocas manos por ciertas naciones o por grandes empresas significa la subordinación de la soberanía alimentaria de pueblos y naciones.