The other side of Warren Buffett. Don’t Buff it up. An investing hero is not a model for how to reform America’s economy

Cita: 

The Economist [2016], "The other side of Warren Buffett. Don’t Buff it up. An investing hero is not a model for how to reform America’s economy", The Economist, London, 13 de agosto, http://www.economist.com/news/business/21704841-investing-hero-not-model...

Fuente: 
The Economist
Fecha de publicación: 
Sábado, Agosto 13, 2016
Tema: 
La imfluencia de Warren Buffett en la economía Estadounidense y las razones por las que no es bueno que tenga tanta influencia.
Idea principal: 

El artículo ilustra cómo a lo largo de su carrera como inversionista, Warren Buffett se ha vinculado con grandes políticos en Estados Unidos como Ronald Reagan y Arnold Schwarzenegger, para este año (2016) sus aspiraciones políticas parecen ser más evidentes (con 85 años y un credo izquierdista). Buffett no comparte las visiones pesimistas sobre la situación nacional, incluso su rol como un héroe de las inversiones ha dado lugar a que Jonh McCain y Barack Obama insinuaron que Buffet podría llegar a ser Secretario del Tesoro.

La influencia de Warren Buffett a lo largo del tiempo se puede reflejar en sus finanzas (Ver datos cruciales 1) y en su popularidad (Ver datos cruciales 2). Es considerado el último héroe de los grandes negocios de Estados Unidos tras la muerte de Steve Jobs. Sin embargo, no es un santo, y actúa (como muchas personas) por su propio interés. Si todas las compañías siguieran su ejemplo Estados Unidos se pondría peor.

El año pasado Daniel Loeb señaló la desconexión entre lo que el señor Buffett dice y lo que realmente hace:

• Mientras piensa que todos deberían pagar más impuestos, él los evade. El pago de impuestos de Berkshire se ha reducido en relación a sus ganancias, el último año pagó el equivalente a 13% de sus ganancias antes de impuestos y es probable que siga disminuyendo (Ver gráfica en datos cruciales 3).
• Es muy crítico en contra de Wall Street, sin embargo, durante la crisis de 2008 fue de los que apoyó a Goldman Sach. Berkshaire fue uno de los accionistas principales en Moody’s, agencia de calificación crediticia detrás de la debacle subprime. Sus negocios financieros, la participación en Wells Fargo y otras inversiones han escapado de los reguladores nacionales.
• Buffett, comúnmente expresa su opinión sobre el funcionamiento de las empresas. En una reunión el año pasado con 12 directores, exigía mejor gobernanza, además, una de las recomendaciones era que los libros de las empresas debían seguir las normas de contabilidad generalmente aceptadas (GAAP, por sus siglas en inglés), sin embargo, Berkshaire fomenta entre sus inversionistas el uso de su propia metodología basada en el concepto de “valor intrínseco”.

A las anteriores inconsistencias se le suma su debilidad por los oligopolios, y es que después de su decepción con los textiles, manufactura de zapatos y aerolíneas, llegó a la conclusión que su empresa debería invertir en “franquicias” que estuvieran protegidas de la competencia y no sólo “negocios”. Entre los negocios a los que apuesta están grandes empresas como Gillette y Coca-Cola, Omaha, abarca micro-monopolios tales como una fabrica de uniformes para guardias de prisión, grandes negocios con posiciones oligopólicas como ferrocarriles y bienes de consumo.

Las empresas estadounidenses siguen el comportamiento de Berkshaire, es decir, se han buffettizado, que entre los inversionistas significa que deben canalizar su inversión a negocios con altos retornos, participación de mercado y bajas necesidades de inversión, proteger los márgenes de ganancia y recortar costos es la prioridad. Como resultado de esa ortodoxia, la economía estadounidense lo resiente en su crecimiento.

Parece que Warren Buffett es capaz de crear un campo de distorsión de la realidad alrededor de él para desviar las críticas, ya que para sus inversionistas la carrera de Buffett es todo un triunfo. Actualmente Berkshaire alcanza un retorno compuesto anual del 21% (el doble que S&P 500). Algunas acciones podrían considerarse benéficas para Estados Unidos, sin embargo, Buffett está lejos de ser un modelo para transformar el capitalismo. Mientras que Buffett es un cuidadoso y muy buen inversionista, Estados Unidos necesita en este momento tomar más riesgos, menores precios, mayores inversiones y más competencia.

Datos cruciales: 

1. Berkshaire Hathaway tiene un valor de 363 mil millones de dólares. Es la sexta empresa más valiosa del mundo. Buffett es al menos 20 veces más rico que Donald Trump.

2. 40,000 personas asistieron a la reunión anual de Berkshaire, una cantidad mayor comparado con las 5,000 de dos décadas atrás.

3. Gráfica. Qué tan bajo pueden llegar? Pago de impuestos en efectivo del Top 10 de empresas estadounidenses 2015 como porcentaje de las ganancias y del flujo de efectivo (ambos antes de impuestos).

Gráfica de porcentaje de impuestos sobre ganancias, los datos muestran aproximadamente: Wells Fargo (40%), Exxon Mobil (33%), JPMorgan Chase (30%), Citigroup (20%), Microsoft (20%), Verizon (19%), Apple (18%), Alphabet (17%), Gilead (14%), Berkshire Hathaway (13%).

Nexo con el tema que estudiamos: 

Las creencias acerca de que una economía a nivel nacional puede ser manejada como una gran empresa puede resultar equivocada, ¿Qué tan cierto puede ser que un hombre de negocios sepa llevar a una economía nacional de la misma forma en la que se puede llevar a una gran empresa a la cima?, si bien es cierto que el interés del los empresarios e inversionistas en ocasiones choca con los intereses de la sociedad al ser los actores principales de las crisis y conflictos laborales, también es cierto que sólo estas tienen la capacidad de reestructurar la economía en su conjunto, el debate puede seguir abierto, e incluso podría someterse a prueba la incursión de un gran inversionista en la política, sin embargo, el conflicto de intereses, derivado del ejercicio del poder para beneficiar algunos grupos, podría ser la clave para entender porque no es una buena idea.